Hana tenía una respuesta con respecto a la propuesta de Gabriel, ella no sabía qué haría exactamente al ir a ese llamado, pero no perdía absolutamente nada con ir. Podía conocer nuevas cosas y eso le emocionaba.
Subió a su habitación y se arregló bastante casual, para ir a la oficina de Gabriel y darle a conocer su respuesta, que lo pensó toda la noche hasta llegar a una conclusión.
Salió de la casa con su destino estipulado, caminó varias calles ya que decidió no abrir sus alas para poder admira lo bonita que era la ciudad de Busan. Está vez no hacía tanto frío como en días anteriores, así que el sol empezaba a calentar y las personas empezaban a salir más, por ende había más gente de lo habitual transitando las calles.
Llegó al pequeño edificio perteneciente a Gabriel, las puertas de acero se abrieron dejando ver a muchísimos ángeles de la muerte corriendo de un lugar a otro. Se dirigió al elevador marcando el último piso para llegar a la oficina de Gabriel. Entró por la única puerta que había en el pasillo. Se dejó ver una limpia oficina con el característico olor a café que nunca podía faltar.
—Buenos días, Gabriel.
—Hola, Hana. Supongo que ya tienes una respuesta —preguntó con curiosidad dándole un sorbo a su perfecta taza de café que reflejaba el brillo de los bombillos en el techo.
—Así es. Lo pensé toda la noche y sí me gustaría asistir al llamado —dijo segura de su decisión.
—En ese caso, mañana mismo te irías —cruzó sus brazos al momento que dejó su taza de café en la superficie de su escritorio.
Pero Hana tenía una duda.
—¿Cómo se lo diré a Jungkook? —Ella quería saber cómo se lo iba a tomar Jungkook, ya que en ningún momento le mencionó lo que le había dicho Gabriel.
—No te preocupes, yo hablaré con él al respecto.
Lo que Hana no sabía es que Gabriel tenía un objetivo en mente: confirmar si ellos pueden estar lejos. Confirmar si ellos aún no han desarrollado los sentimientos amorosos que él esperaba ver desde el primer momento que los mandó a vivir juntos.
Ya que Gabriel quería ver a Jungkook en las peores condiciones posibles porque Gabriel nunca fue lo que la gente pensó. Tenía una sed de venganza que nadie notaba porque todo era un secreto en el que Jungkook era el protagonista por haber robado el imperio que anteriormente le pertenecía a la familia de Gabriel.
***
El tiempo cada vez avanzaba más rápido y las sombras de la noche empezaban a visualizarse a través del ventanal ubicado en la sala. Cuando Hana era una niña de aproximadamente 8 años, su mamá le contó que cuando quedó embarazada de ella se enteró viendo un eclipse lunar. Por eso el gusto por dicho fenómeno.
Al llegar a casa, Jungkook estaba en la sala leyendo el mismo periódico que había leído Hana por la mañana y ni siquiera notó cuando ésta llegó.
Hana fue a su habitación para cambiarse de ropa a una más elegante, ya que estuvo esperando el eclipse lunar desde hace años y está vez no iba a perder la oportunidad de verlo. Escogió un pantalón negro con una blusa blanca con rayas en un tono bastante oscuro, sus zapatos igualmente negros con detalles dorados y su pelo suelto, ya que era bastante corto y finalmente bajó para irse al mirador donde iban a presenciar el fenómeno.
—Ya vámonos Jungkook, llegaremos tarde —dijo Hana bastante apurada localizando las llaves de la casa.
—Ajá —Jungkook seguía tan inmerso en la lectura que hacía casi omiso a lo que le decía Hana.
—¡Ya vamos que se hace tarde! —logró captar su atención.
—Sí, sí, sí, vamos Hana.
Ambos llegaron justo a tiempo, había bastante gente que también quería ver el eclipse, pero con el carácter de Hana era obvio que iban a estar en primera fila sí o sí. Entraron al edificio donde buscaban con la mirada el elevador que los llevaría a ver el espectáculo lunar.
—¿Por qué tan emocionada? —La miró de reojo notando una gran sonrisa en boca que era imposible no ver.
—Mi mamá se enteró que estaba embarazada viendo un eclipse, o al menos eso quiero creer —dijo con un tono de voz nostálgico que la hacía recordar todos esos buenos momentos cuando no había maltrato intrafamiliar.
—Ya veo, debió ser un momento muy bonito —dijo Jungkook cuando las puertas del elevador se abrieron para ingresar en el.
—Recuerdo —corrigió Hana—. Es un recuerdo.
Las puertas del elevador nuevamente se abrieron dejando ver a una multitud de gente que al igual que ellos venían a presenciar el eclipse. Siendo apachurrados, pisados, golpeados por las personas, lograron llegar a un lugar cerrado con una ventana donde casi no había gente, perfecto para disfrutar el fenómeno.
Su rostro tenían una gran sonrisa pintada en sus labios, sus ojos achinados debido a la gran emoción que su cuerpo sentía al ver el eclipse lunar que tanto esperó. Hana estaba totalmente hipnotizada por el brillo del cielo, una obra de arte que merecía ser pintada.
—Es hermoso —dijo Jungkook con su mirada fija en el cielo.
—Tienes razón —y ella de un momento a otro se llenó de tristeza al recordar a su madre, que para ella fue su pilar por muchos años.
Recordó el momento en el que su familia vivía feliz, con plenitud pero ni siquiera supo en qué momento su padre se volvió alcohólico y comenzó a golpear a su madre y antes de que ella pudiera huir, Hana la encontró agonizando en la sala. Desde ahí se quedó completamente sola sin el cobijo de una madre pero siempre mantuvo una actitud positiva aún cuando la situación no mejoraba... sin notarlo sus lágrimas ya acariciaban sus mejillas mientras miraba fijamente el eclipse.
—Hana, no llores.
Los brazos se Jungkook se sintieron tan cálidos para Hana, una ola cálida que esperaba sentir nuevamente. Pequeños sollozos salían de Hana mientras murmuraba lo mucho que extrañaba a su mamá, ya que murió cuando ella estaba en plena adolescencia por culpa de su padre.
La anatomía de Jungkook se sintió tan cálida para ella que le apetecía quedarse ahí de por vida. Le contó anécdotas que tuvo durante su vida y él hizo lo mismo. Sin duda un momento que Hana jamás iba a olvidar, ya que por primera vez abrió sus sentimientos con Jungkook.
Sinceramente, no tengo idea de qué estoy escribiendo pero anyways, ya se viene lo chido jaksjska, en fin gracias por leer my crazy ideas <3
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Angel of Death ➳ Jeon Jungkook ✔
Spiritual¿Pueden dos ángeles de la muerte enamorarse? Por supuesto que no. Esa era la ideología del arcángel Gabriel, quien condena a Jeon Jungkook para ser un ángel de la muerte de por vida, después de morir. Pasan los años y Kim Hana asesina a su padre...