Angel of Death ➳ Jeon Jungkook ✔

07

Debido a las importaciones de café que Jungkook tuvo, conoció a Min Yoongi, el dueño de las grandes hectáreas de cafetaleros (lugar donde se cultiva la semilla del café). Tiempo después ambos se asociaron y Yoongi le proporcionaba producto para que Jungkook lo procesara y vendiera. No fue un día 12 de agosto cuando Min se dio cuenta de los sucios actos que su socio realizaba, Jeon lo convenció de que se uniera a su imperio y algo dudoso aceptó.

Los dos hombres producían grandes cantidades de café, al igual que de sustancias ilegales, de las cuales se asociaron con Jung Hoseok, quien era un rico empresario y quería matar a un hombre que no pagó ni la mitad de la inversión que le había ofrecido a Hoseok, así que acudió a Yoongi. Éste acudió a Jungkook y le dio la autorización para matar al hombre que estaba hundido en deudas con demasiada gente.

Finalmente, después de armar un plan fríamente calculado ejecutaron al hombre, pero Hoseok nunca apareció, fue como si la tierra se lo hubiera tragado. Jungkook y Yoongi quienes eran los reyes del sucio negocio, lo buscaron por una semana pero seguía sin haber rastros.

Hasta que mágicamente la mercancía perteneciente a Jungkook desaparecía y era vendida en el mercado negro. Los hombres de Yoongi se dieron cuenta de movimientos extraños en las bodegas donde todas las sustancias ilegales eran guardadas. Habilitaron más cámaras de seguridad sin que nadie supiera y dieron con el responsable.

Jung Hoseok.

De ahí el gran odio que Jungkook tenía hacía él, le robaba los productos y nunca recibió una recompensa por el asesinato. Ese odio por Hoseok empezaba a crecer cada vez más al saber que él entró a trabajar a una oficina de detectives que resuelven los casos que la policía simplemente no les prestaba atención. Fácil podría atraparlo por todas las pruebas con las que contaba, para su suerte aquellas evidencias se perdieron en una mudanza que Hoseok hizo, así que sólo quedaba rendirse ante ese caso.

Por otro lado, Yoongi siempre lo acompaño y estuvo con Jungkook en todo momento, el último jugaba el papel de hermano menor y Min el papel de hermano mayor que siempre protegió a Jungkook. Eran íntimos confidentes que ninguna pelea los iba a separar. Hace diez años, cuando el menor  murió, Yoongi desarrolló muchos problemas internos. Empezó a llenarse de silencios, se ponía ebrio todos los días, echaba pasión con cualquier chica que se pusiera enfrente.

Y por fin, Min Yoongi dejó de sufrir... siendo fusilado por el mismísimo Jung Hoseok.

—¿Amigo? ¿Eres tú? —cuestionó Jungkook con la mano en la boca por volverlo a ver.

—¿Jungkook? —murmuró el pelinegro con sus pequeños ojos que brillaban de tan sólo verlo.

—Eres tú. —afirmó el menor mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. Lágrimas retenidas desde hace una década que jamás pudieron salir, hasta un noviembre de temperaturas frías que pensó que lo iba a pasar sin él.

Yoongi, mejor conocido como Suga, no lo podía creer, después de una larga y dolorosa década volvió a ver a su mejor amigo, su hermano, su compañero de vida por el que sufrió demasiado y ahora Min estaba frente a él, su físico era diferente contaba dos grandes alas negras, un cuerpo trabajado producto de aquellos trajes que sabían acomodarse en las áreas correctas.

Ambos estaban estupefactos frente al otro, ninguno de los dos iba a dejar ir al otro,  porque la hermandad que ellos fueron creando dio comienzo a una interdependencia entre ellos.

Llorando de la emoción, Jungkook lo llevó con Gabriel para que diera la autorización de convertirlo en un ángel de la muerte, después de todo ambos habían cometido los mismos pecados y actos ilegales. Gabriel le otorgó los poderes necesarios para ser dicho ser sobrenatural y de su espalda, que no era muy ancha, salieron las grandes alas de color negro que lo dejaron sin palabras. Jungkook había visto muchas veces ese acto y aún le seguía encantando, dejándolo tan hipnotizado como la primera vez que él lo experimentó. Asimismo, Gabriel le explicó su función en el mundo de los muertos, que era igual a la de todos los ángeles.