POV Daniela.
Un año después.
Si tuviera que definir como ha sido mi último año, diría que ha sido una montaña rusa cargada de distintas emociones. Por un momento de mi vida me encontraba en la cima, con una vida la cual creía que era la indicada y correcta para mí, y luego estoy abajo, junto con una personita de 18 años.. ahora 20, que llegó a mi vida a darle una vuelta total e inesperada.
Y debo decir que fue la mejor vuelta del mundo.
María José llegó a mi vida en el momento en que no sabía lo mucho que la necesitaba. Y aunque ella diga que yo soy su salvadora y que gracias a mi, es que hoy está con vida.. ella también fue mi salvadora. Me salvó de vivir una vida que hoy sé que no era la correcta y la que fuese querido, María José me enseñó a apreciar las pequeñas cosas, a ver la vida de una manera diferente, me llevó de la mano a crecer junto con ella, y sobretodo me enseñó a amarla con cada pedacito de mi corazón.
Ella sin duda es mi persona.
- Amor? - Entra María José a la que fue nuestra habitación por un tiempo. - Mi papá acaba de llegar, ya está abajo el camión de la mudanza.
Sí, nos vamos a mudar a un nuevo departamento luego de vivir aquí por un tiempo, cortesía de Juan Carlos debo decir, cuando llegó al departamento a entregarnos las llaves solo dijo: "Daniela, mi bebé y tú merecen un lugar más grande, así que acepten esto sin replicar, los camiones de la mudanza llegan el viernes por ustedes". Y se retiró, dejándonos a las 2 boquiabiertas y con un par de llaves en la mano.
Por más que traté de decirle que yo le pagaría el departamento poco a poco, él no quiso aceptar, al contrario.. me dijo algo que hasta hoy me sigue haciendo sonrojar:
"Tómalo como un regalo de bodas adelantado".
Sí, casi muero ese día.
- Ya casi está todo listo mi amor, tu empacaste todo lo que necesitabas? - Digo acariciando sus mejillas.
- Sí. - Dice disfrutando de las caricias que le otorgó. - Qué loco pensar en todo lo que hemos vivido en un año.
- Y lo que seguiremos viviendo, porque en nuestro cuento nos faltan cientos de páginas por escribir. - Digo haciéndole cosquillas.
- Para Daniela, para! - Dice María José entre risas, al final la atraigo y nos recostamos juntas en el piso, dejando a mi amor sobre mí.
- Te amo tanto, me haces feliz. - Dice Poché acariciando mis mejillas.
- Yo te amo más mi cosita, gracias por enseñarme el verdadero amor. - Digo y nos besamos por un rato, hasta qué....
- Entiendo que les guste besarse mucho niñas, pero tenemos que irnos. - Dice Juan Carlos con tono burlón, consiguiendo que nos separemos rápidamente, completamente sonrojadas.
- Papá! - Grita Poché visiblemente avergonzada, al igual que yo.
- Ya ya, ni que fuera la primera vez que las consigo besándose. - Tragame tierra por favor. - Vamos ya, sus madres nos están esperando en el otro departamento.
•••••••
- Por María José y Daniela. - Dice mi padre alzando su copa para un brindis, todos la levantamos simultáneamente.
- Salud! - Brindamos todos al unísono.
- Estoy tan feliz por ustedes niñas. - Dice mi mamá abrazándonos. - Se merecen todo esto y muchísimas cosas más.
- Gracias mamá, al final la vida empezó a sonreírnos. - Digo viendo a María José.
- Hola hola, espero que no hayamos llegado tarde. - Dice Felipe, quién viene acompañado de Valeria, su novia.
ESTÁS LEYENDO
Resilience
Fanfic" Y después de la tormenta, siempre sale el sol" Una frase que María José lleva escuchando toda su vida, pero.. ¿Cómo puede creer en ella si en su vida siempre hay una constante tormenta y nunca sale el sol? No tiene motivos para sonreír, para ella...