POV Daniela.
- Bienvenida a casa, pequeña. - Digo apenas abro la puerta del departamento, con María José delante de mi, yo llevo sus maletas.
Debo admitir que hice algunos (muchos) cambios en el departamento, quería que María José estuviera en un ambiente diferente, que se sienta cómoda, sienta el calor de un verdadero hogar, y si yo tengo como dárselo, lo haré.
- Wow.. no recordaba el departamento así. - Dice ella recorriendo con su mirada todos los espacios.
- Bueno, quería hacer unos pequeños cambios. - Digo sonriendo. - Y espera a ver la habitación.
Mi plan inicial era que ambas durmieramos en la misma habitación, pero conversé con Marta y me dijo que ella es una adolescente, y que por más que me quiera, necesita su propio espacio. Le di toda la razón, y es por eso que transforme el pequeño estudio que tenía, en una habitación.
Tiene una cama, su armario, y un pequeño escritorio para que haga sus deberes.
Busqué algunas ideas en Pinterest sobre cómo se lo quería decorar, y debo admitir que me quedó muy lindo, todo con el estilo de María José.
- Esta es mi habitación? - Me pregunta observando cada pequeño detalle.
- Sí, pero si no te gusta.. podemos ir mañana al centro comercial y cambiar todo, algo que te guste a ti y.. - Me interrumpe abrazándome.
- Está perfecto, me encanta. - Dice con su vocecita tierna que tanto amo. - Gracias.
- No tienes que darme las gracias, yo sólo te estoy dando lo que tanto te mereces. - Digo honesta. - Te tengo una sorpresa, pero antes.. vamos a comer un postre que hice y que espero te guste.
- Me parece bien, yo amo los postres. - Dice ella y regresamos a la cocina.
Preparé un cheesecake de chocolate y dulce de leche, y no es porque lo haya preparado yo, pero me quedó espectacular.
- Esto me encanta, podría comerlo todos los días y ser feliz. - Dice con su boca llena de cheesecake.
- Pues me aseguraré de prepararte cada cierto tiempo cheesecake. - Ella me agradece con una sonrisa.
- Oiga, yo... yo me siento un poco mal, porque usted dejó de vivir con su familia para estar aquí. - Dice bajando la cabeza, apenada.
- Pequeña.. sólo me quedaba con mi familia para no estar sola, mientras estaba con Felipe, los 2 nos quedábamos aquí, y ahora que estás tú, no puedo dejarle sola, además que mis padres entienden.. de hecho, me dijeron que cuando queramos, podemos pasar una noche allá.
Mis padres se sorprendieron un poco cuando les dije que María José se iba a quedar en mi departamento, pero luego de explicarles toda su situación, me entendieron y dijeron que era lo mejor para ella. La única que no estuvo muy de acuerdo fue Juli, ella no quería que le quitaran a su hermana, pero le prometí que puede venir los fines de semana a quedarse aquí y que María José y yo jugaremos muñecas con ella, ahí se le olvidó todo su enojo y empezó a contar los días para venir aquí.
- Lo único es que tendremos a Juli aquí los fines de semana, así que prepárate porque vamos a jugar mucho a las muñecas y a ver películas de Disney todo el tiempo.
- Por mi no hay problema, amo todas las películas de Disney. - Dice ella con una sonrisa.
- En serio? A mi igual me encantan.. si quieres podemos ver una ahorita. - Digo entusiasmada.
- Sí por favor, podemos ver enredados? - Me pregunta ella con sus ojitos de cachorrito.
- Claro que sí, ve buscando la película en el televisor mientras yo voy por unas mantitas y si quieres te puedes poner el pijama, así quedas más cómoda. - Ella asiente y se dirije a la sala y después a su habitación.
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Resilience
Fanfic" Y después de la tormenta, siempre sale el sol" Una frase que María José lleva escuchando toda su vida, pero.. ¿Cómo puede creer en ella si en su vida siempre hay una constante tormenta y nunca sale el sol? No tiene motivos para sonreír, para ella...