🥴18💒

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-Esto es mucho, ¿Te has vuelto loco?.

-¿Loco? Tú me hiciste algo, lo puedo jurar hiciste eso trucos que hacen las brujas me hechizaste –respondió Sandro.

–Claro que no hice eso, deberías bajarle a la velocidad nos podemos matar.

–Dime querías entrar ese lugar con el, eres muy lista demasiado, finges poner esa cara de inocente pero eres cínica.

–Estas mal Vanglesky

–Ahora soy Vanglesky, sacas bien las garras Hera. Pero si hablamos de garras las mías no saldrás bien librada, tómalo como castigo.

Se estaciono, para solicitar información dejando encerada Hera dentro del auto.

–Bien vamos –dijo el sacándola del auto.

–¿Qué... Que hacemos aquí? –preguntó ella.

–Acaso no lo vez –dijo el llevándola de la cintura.

–Te has vuelto loco Sandro!! –se detuvo ella entre sus brazos.

–Eso querías no –comenta el hibrido metiendo sus manos por su cabello rizado.

–Yo, no me refería eso...

Sandro frunció el ceño a que jugaba Hera.

–¿Entonces que Hera?, –ruño desesperado –Ayer que fue, pero luego te vas a la mañana siguiente, para luego irte con se imbécil ¿Acaso te ibas a meter con él?–volvió a gruñir.

–Por supuso que no!!, como puedes pensar eso –se defendió ella.

–Entonces hagámoslo –volvió a tomar sus manos

–¿Hacer que?.

–Porque crees que te traje hasta aquí, solo para darte un tour, ¿Enserio?

Sandro se estaba desesperando, y no era el hecho de estar en la capilla, sino por llevarla al departamento, pero se estaba poniendo algo difícil, su vena en su cuello iba a reventar, su padre desaprobaría esto actitud, pero tenía la cabeza caliente en este momento.

Pero sobre todo quería quitarle esa ropa y dominarla.

–No lo hare –dijo ella

–No –repitió el

Ella negó con los brazos cruzados, debía mover sus cartas ante la terquedad de la bruja, el acaricio detrás de su oreja, acercándola a su rostro.

–Sigues en decir no –su aliento golpeaba su rostro. –¿Segura? –volvió pero esta vez solo casi un leve rozón de labios.

Hera se inclinó de puntillas, pero Sandro se aparto un poco. Sonriéndole.

–Eres una mentirosa. Prepárate porque lo que hare después te perforara la garganta–La soltó dejándola ahí.

Hera no sabía de donde estaba sacando valor, si quería ser un tormento pero las cosas se habían volteado, y estaba con la cara roja siendo llevada para entrar aúna capilla, con este loco. Ahora miraba a Sandro de esa manera era claro el amor te hace ver lo bonito que se ven y no los defectos enfermizos que tienen.

El hibrido no la escucho, la dejo en la entrada de esa iglesia, no es como esperaba, ¿Cómo es que esto salió de control?, no se refería a eso en el auto, era que tener un novio dulce, atento, cariñoso, no un esposo de un jalón.

Dio un sorbo al trajo que les ofrecieron, no conforme con eso dio otro, y si es posible hasta la misma botella arrebato a la mujer de recepción que esa sonrió al ver a la nueva novia nerviosa, mientras el hibrido estaba hablando con un tipo de peluca negra y ese extravagante disfraz

Lo vio venir hacia ella tomándola de la mano arrastras, viendo enfrente un ¿Elvis? Pro que ....

Las manos de Sandro las tenía entrelazadas, ella estaba como si todo fuera una película, el hombre con disfraz decía algo que no lograba escuchar ante la intensa mirada del hibrido que relamía sus labios.

-Sandro aceptas a Hera ....

vio el anillo con aquella perla rosada una Pink StarLan, era bellizima

Eso fue lo único que pudo escuchar la bruja estaba algo mareada por el licor y agarrar el valor necesario, si su madre le hubiera advertido el mes pasado que hablo con ella no le hubiera creído todo esto.

Los ojos de Sandro sobre su cuerpo llenos de flamas, pero sabía segura que tenía las cuentas saltadas, de solo imaginar lo que vendría después.

Y eso era su noche de bodas exprés.

Otra era la señora Vanglesky.

Agregándole que nadie la iba a salvar de la bestia seria comida entera.

HIBRIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora