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-Señorita Walmon me alegra que ya aceptado la invitación –dio un sorbo a su copa.

-Agradezco su invitación –comento ella con una amplia sonrisa en su rostro, pero a la vez nerviosa.

-Sobretodo traer a su acompañante –insinuado a Sandro.

Hera suspiro Sandro al final de cuentas insistió en venir, a pesar de que ella perjuro que confiara en ella, solo que el hibrido no confiaba en el felino, haciendo el ambiente más tenso. Solo deseaba que amanecería para estar camino con sus padres.

-No podía permite que mi linda esposa viniera sola, no es por desconfianza sino por seguridad ya sabes, hay tanto animal allá afuera –rechino los dientes.

-Hace bien, yo igual, pero confió en mi prometida.

- ¿Prometida? –dijo era sorprendida

Sandro casparreo un poco como su linda mujer se sorprendió por tal noticia, torciendo los labios.

-Así es, de hecho, ahí viene, sabía que el señor Vanglesky no la dejaría venir sola decidí invitarla -se puso de pie al igual Sandro.

La bruja la vio era realmente hermosa, frunció el ceño porque era coqueto el felino teniendo una bella.... ¿Felina? Pero lo más importante se dio cuenta de algo que esa mujer s estaba comiendo con la mirada a Sandro, esos dos felinos eran tal para cual.

Hera le dio un discreto pellizcan a su marido, que este asintió disculpase.

-Siento llegar tarde, pero desde que llegue hoy a Green Valley, hay un tráfico donde sea –dijo la felina dando un beso en los labios al juez.

-Descuida cariño no tenemos mucho que estamos aquí, deja presentarte a los señores Vanglesky –comento el juez.

-Mucho gusto Natie Votuk –se presentó ella.

Ambos esposos Vanglesky se miraron el apellido les sonaba, acaso seria pariente de su conocida vieron con incredulidad.

-Mucho gusto Sandro Vanglesky y mi esposa Hera –el hibrido fue le primero en saludar.

La felina saludo con una sonrisa y ojos brillantes al hibrido, Hera deslizo su mano con cuidado sobre su esposo discretamente, estaba teniendo un conflicto de celos, esperaba que el juez hiciera algo ya que era muy evidente, pero recibió la misma mirada del juez sobre ella.

Debía hacer algo para romper esas miraditas nada agradables.

- ¿Usted es Votuk?, de causalidad no es familiar de Mia –inquirió la bruja.

Los ojos café brillantes de la felina observaron con más determinación regresándole con una sonrisa tan amplia mostrando sus dientes cristalinos.

-Si la conozco, pero no convivimos tanto es prima lejana al igual que los demás Votuk.

-Oh, -entre abrió sus labios.

-Ya ordenaron algo –miro la carta del menú.

Los cuatro ordenaron cada quien sus diferentes platillos, Hera como Sandro estaban algo incomodos como ese par se demostraba el amor casi limpiando hasta las mismas anguinas sin pudor alguno.

-Creo que...Debo ir al baño –comento Hera rompiendo el romance entre los dos felinos.

-Te Acompaño –se puso de pie siguiendo a la bruja.

Hera realmente no tenía necesidad ir, pero quería a evitar la imagen que estaba viendo.

-Eres muy linda, justo como el me había dicho –comento Natie detrás de ella.

HIBRIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora