Capítulo 19: Juntos.

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•T/N•

Una capa de sudor recorre mi frente,y siento mi camiseta apegarse a mi cuerpo; una pesadilla. Veo borroso y unas lágrimas recorren mis mejillas.

Otra ves la imagen de mi padre callando del agujero negro azota mi mente. Esta es demasiado conocida como para sorprenderme.

Al levantarme siento las sabanas un poco húmedas, transpiro y lloro levemente, mi respiración no sé tranquiliza, y siento mi garganta seca.

Me levanto con las piernas temblorosas, y camino lentamente hasta la puerta en dirección a la cocina. Ruego por no encontrarme a alguien, si se me cruza alguna persona prefiero que sea Bucky, quien me entendería y abrazaría hasta calmarme; amo cuando me abraza y mucho más cuando me besa las mejillas y refriega con delicadeza su barba en estas.

Mi corazón late con fuerza en mi pecho, me dirijo rápidamente a la puerta de al lado, la habitación de Bucky, se escuchan quejas, y la palabra "No", una y otra vez.

Entró en el lugar con delicadeza, no deseo despertarlo de un golpe, podría caerle mal. Me siento a su lado y toco su rostro con las llenas de mi dedos, se remueve inquieto bajo el toque. Empiezo a mimar su rostro y cabello. Cuando deja de moverse más tranquilo, acercó mis labios a su rostro y doy leves besos en sus mejillas; se que lo tranquiliza. Lo abrazo colocando mi cabeza en su pecho.

Se despierta a los minutos.

Escucho su respiración normalizándose mientras apoya sus manos en mi cintura, dándome tiernas caricias.

-Gracias..

-No agradezcas..-sus labios acarician mi oído.

Mi rostro se dirige al suyo, ya pasaron seis meses de relación, el empieza a acercarse, yo también.

Nuestras narices rozan, sus manos agarran con fuerza mi cintura, mis manos en su pecho, yo encima de él, levemente sentada en su fuerte estómago; siento que estoy volando otra vez.

En esos seis meses, nos besamos solo tres veces; la primera ves que nos besamos en el pasillo, la segunda ves fue en mi habitación, fue corto y suave, casi un rose y el tercero fue en la cocina, donde casi nos encuentra Rhodey. En ese momento casi me da un ataque cardiaco, él nos miró extrañado al notar nuestra cercanía, los dos tomando agua uno al lado del otro con notorios nervios, claramente para él fue demasiado sospechoso, al otro día mi padre no dejaba de revolotear a mi alrededor.

Nuestros labios se encuentran, es suave pero notoriamente desesperado, los dos moríamos por besarnos así, juntos y apretados, sin restricciones.

Atrapa entre sus dientes mi labio inferior, jadeo y enredo su cabello entre mis dedos.

El se sienta en la cama, sobre él se supone que debo sentirme más grande pero es todo lo contrario, me sigo sintiendo más pequeña.
Sus labios danzan en mi cuello con delicadeza, no se aleja, mi respiración entrecortada se hace notar. Entierro mis uñas en su cabello. Sus labios dan contra la línea de mi clavícula, siento como mordisquea con delicadeza, y la punta de su lengua recorre esta.
Mi corazón deja de latir al escuchar un golpeteo en la puerta.

-¡Bucky!-la voz del Capitán me deja sin aire nuevamente-¿estas bien?, es que escuché unos gruñidos y me preocupe..

¡Steve Rogers, que conveniente!

Noto a Bucky tensarse debajo mío, también con la respiración entrecortada. Me da una leve mirada, entre enojada y deseosa. Mis mejillas arden. Sus pupilas dilatas y sus cristalinos orbes me hacen desear unir nuestros labios nuevamente.

-Estoy excelente-sus gruñidos me hacen estremecer, su mirada no se aleja de mi.

-(Nombre) no estaba en su habitación..-deseó arencarle los ojos al Capitán en ese momento-¿Buck?..

De manera lenta y torturadora nos alejamos, me siento en la cama a su lado con el camisón arrugado y mal puesto, trato de arreglarme un poco mientras Bucky abre la puerta, deseoso de matar a Steve.

Noto como una cabellera rubia y unos atónitos ojos celestes me miran por arriba del hombro de el dueño de la habitación, el de cabello castaño solo lo mira con enojo mal ocultado.

-¿Que quieres?-su vos sigue sonando ronca y enojada; trato de sacar el dulce pensamiento de mi mente, me encanta su vos.

-¿Que estaban asiendo..?-el Capitán mira a su amigo como si acabara de tocar algo único y preciado.

Es evidente el porqué la pregunta, mi camisón está completamente desarreglado, nuestros labios están rosados e hinchados, su cabello está más enmarañado que el mío, mi cuello y clavícula está llena de marcas, incluso mordidas; el Capitán está horrorizado ante la idea de lo que podíamos llegar hacer, yo era una adolescente hormonal qué pasó gran parte de su vida en un Internado, él era un hombre que estuve gran parte de los últimos años congelado. Me hace enrojecer notar que no estaba muy lejos de la verdad.

-Nada que te importe Steve- su vos era una clara advertencia, "no molestes".

Pero el Capitán no se daba por vencido mirando hacia el interior de la habitación, sinceramente no quiero saber que está pensando, posiblemente que nos atacó el satanismo o algo por el estilo.

Bucky literalmente lo sacó a rastas de la puerta para mandarlo a su habitación, aunque posiblemente se quedaría en la puerta vigilando todo lo que hacemos.

El se gira hacia mi y rápidamente se tira arriba mío sonriente para hacernos rebotar en la cama.

-¡No me hagas cosquillas!¡Que crees que piense Steve de tu comportamiento!¡Hijo del diablo!, eres un pescador..te voy a tirar agua bendita..- el carcajea al lado mío, no paramos de reír, es imposible después de las miradas que lanzaba Steve.

-Eres una tonta..-me susurró al oído mientras me abrazaba aún riendo.

-Sip, pero así de tonta, me debes querer..-mi tono de vos fue completamente infantil haciendo que se riera aun más.

-Buenas noches muñeca..

-Buenas noches Buck..

Lo último que recuerdo antes de dormirme, fue su hermosa sonrisa y el bello sonido de su risa en mi cuello.

"Problemas"/Bucky Barnes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora