Hogwarts después de la guerra (Drarry)

ᴅᴇsᴄᴜʙɪᴇʀᴛᴏs

Harry y Draco se encontraban en un salón desocupado. Estaban muy agitados, mientras se miraban extrañados. No podían terminar de creer lo que habían visto. Demasiada información de golpe.

10 minutos antes.

- Draco, ¿Pansy te dijo que iba a estudiar con Hermione?

- Si, Potty -repitió el rubio por quinta vez a su novio dándole un beso-. Acaso Granger no te dijo nada?

- No... -respondió Harry extrañado-. Igual vamos a buscarlas. Tenemos que encontrar a los 4-

- .... para contarles sobre nuestra relación -terminó Draco. Se lo sabía de tantas veces repetidas por el azabache.

Harry lo miró sonriente aunque nervioso. Estaban bajo la capa de invisibilidad, pero Draco estaba agachado porque sus talones sobresalían si se paraba.

Corrieron por varios pasillos, mientras el rubio trastabillaba y por eso Harry se enredaba con la capa.

Dos minutos después llegaron a un pasillo, cercano a la Biblioteca, cuando escucharon voces salir de una salón abandonada. Ron estaba acorralado contra una mesa mientras Blaise lo besaba apasionadamente. Parecían dos anguilas. Harry miró a Draco y soltó una risita, al igual que el chico.

- B-Blaise ¿pusiste los hechizos silenciadores? -Ron se había separado del chico para mirar nervioso hacia la puerta.

- Si, cariño -respondió el moreno volviéndolo a besar.

Los dos chicos desde la puerta salieron corriendo. Al fin pararon en otro pasillo, algo alejado. Harry sonrió nerviosamente y Draco hizo lo mismo.

- Parece que nos ganaron -dijo Harry mirando a su novio.

- ¿Eh? -respondió el rubio. El azabache se puso de puntitas y dejo un beso en los labios de Draco, para luego voltearse y seguir caminando. El rubio tuvo que apurarse, ya que la capa comenzaba a resbalarse-. ¿A que te refiere-?

- Digo que parece que llevan más tiempo que nosotros en su.... mmm.... "relación", si es que la tienen -dijo el azabache. Draco lo miró y sonrió. A veces si que era inteligente.

- Pansy y yo sospechábamos algo -dijo al fin. Harry se paró y lo miró.

- Hermione y yo también -Draco negó sonriendo. Harry adoraba la forma en que su nariz se fruncía cuando reía.

Siguieron caminando. Cinco minutos después estaban delante de la biblioteca. Esperaron que la señora Pince estuviera distraída, porque detectaba hasta el vuelo de una mosca. La bibliotecaria fue a acomodar un libro lejos de la entrada, por lo que ambos chicos entraron rápidamente y corrieron a la parte donde habían mesas alejadas.

- Draco... crees que est-

-Shh -lo calló el rubio y le señalo con la cabeza hacia adelante. Unas cuantas mesas más allá, Pansy y Hermione reían silenciosamente, la segunda apoyando la cabeza en la primera, mientras se agarraba el estómago por la risa.

-P-Pansy.... para -decía la castaña riendo.

- Y entonces Blaise preguntó: "¿Para que sirve ese tefélono?" y Draco le contestó: "Si serás idiota, Blaise. Eso es un estuche para varitas. Aunque no sé por qué lo usan los Muggles...."

Draco se tapó la cara avergonzado. Harry se tuvo que tapar la boca para no reír. Había volteado para vigilar que nadie hubiese escuchado la pequeña risa que se le escapó. Cuando volteó, la mandíbula se le abrió hasta el piso. Pansy besaba cariñosamente a Hermione.

Miró a Draco y ambos salieron corriendo de allí.

Presente.

No lo podían creer. Las chicas lo habían ocultado demasiado bien. Respiraron profundamente. Era demasiada información para un solo día.

- Vamos a mi Sala Común -dijo Harry aún pasmado. Draco ya se había recuperado, así que lo guió hasta la Sala de Gryffindor.

- Mimbulus mimbletonia -dijo cuando llegaron hasta el retrato de la dama Gorda. Esta les abrió el paso, ya que estaba acostumbrada a ver al rubio por allí. Felizmente no había nadie dentro, por lo que se sacaron la capa y subieron a la habitación del azabache. Draco subió a la cama y señaló a Harry para que se acercase. Este se sentó delante de él, haciendo que el rubio lo abrazase. Poco después ambos se durmieron.

- ¡¡Hermione!! ¡¡Tienes que venir a ver esto!!

Así fue como Ron despertó a la pareja. Draco se levantó perezosamente y Harry se frotó los ojos como un niño pequeño.

- Weasley... harías el favor de apagar esa luz....

- ¡¡M-Malfoy!! ¡¡H-Harry!! ¡¡C-cama!! -balbucía el chico a Hermione que al parecer se acercaba.

- Ron... ¿puedes hablar claro?

- Si, Weasley, ¿harías el favor de explicar que haces aquí? -la secundó Draco. Se escuchó un ruido fuerte, como de una taza rompiéndose. Acto seguido apareció la chica en la puerta. Abrió los ojos como platos y miró a Ron luego a Draco Harry y repitió la escena dos veces. Luego sonrió complaciente.

- Hermione, ¿tú sabías de esto? -preguntó Ron.

- Lo sospechaba -Harry y Draco se miraron cansinamente. Por lo menos dos de ellos ya lo habían descubierto.

- Vayan con Pansy y Blaise. Díganles que vengan -al decir eso el rubio, Ron y Hermione se ruborizaron. Salieron de allí a toda prisa y no volvieron hasta 20 minutos después, con sus parejas sorprendidas.

- Draco Lucius Malfoy!!! -gritó Pansy-. ¿¿Cuando planeabas decirnos que Potter y tú están saliendo??

- Bueno, ya lo saben. Igual nosotros sabemos de lo suyo, así que, si no es molestia, apaguen la luz que queremos dormir.