Manada Self || Sterek [Terminada]

Capítulo 10

Narradora:

Toda la manada bajo del avión después de que aterrizó.

Noah fue quien se encargo del transporte, había rentado dos camionetas familiares.

El era quien manejaba la primera camioneta que era seguida por Peter que se encargaba de la otra camioneta.

Al ver que Noah estaciono frente a una mansión se quedaron sorprendidos, Noah bajo y se dispuso a tocar la puerta que no tardo ni un segundo en ser abierta.

— ¡Noah!, que hermoso verte de nuevo, Stiles, Niki y los chicos no están, pero pasen todos.

La rubia se hizo a un lado y los de las manadas bajaron de las camionetas entraron aun sorprendidos.

Una vez que todos estuvieron acomodados en la sala Noah se dispuso a hablar.

— ¿Tardaran mucho en regresar Freya?

La rubia se encogió de hombros.

— La verdad no se, desde antier en la tarde se fueron, supongo que se quedaron con Niki a entrenar.

Noah asintió.

— ¿Tienes aun las llaves de mi casa?

La rubia asintió.

— Si, pero no aquí, Niki me las quito, dijo que también era su casa y a veces va a ella, otras a su lugar.

Noah asintió y se levanto.

— ¿A donde vas?

Cuestiono Peter nervioso, no quería perder a Noah ahora que estaba en el mismo lugar que su aun esposo.

— Voy al jardín, ¿puedo?

Eso último se lo pregunto a Freya que asintió sonriente y les hizo una seña a todos para que la siguieran.

El jardín trasero era enorme, incluso mas que la estancia.

— Este lugar es bueno para entrenar.

Comento Derek.

— Si, lo es, yo no soy muy buena en combate físico pero si tengo mis trucos.

Dijo Freya quien le sonrió cómplice a Noah.

— ¡Familia ya llega...!

Stiles se cayo al ver a todos.

— Hola hijo, no me culpes a mi, los chuchos Hale se metieron a robar tu dirección.

Stiles asintió a su padre.

— Hola Noah.

Saludo Niklaus casi en un susurro.

— Hola Klaus, perdón por lo de la otra vez.

Niklaus le sonrió un poco.

— Descuida, nos alteramos y dijimos las cosas sin pensar, también perdón por eso.

Noah asintió, Peter observaba toda la escena mientras solo pensaba que el era mas agradable y muy sexi.

— Hola mamá.

Saludo Isaac mientras se acercaba al castaño y lo abrasaba.

— Hola bebe.

Le correspondió el abrazo pero ahora su vista estaba fija en la manada McCall.

— Te llame pero no contestaste.

Comento mientras se separaba y hacia un puchero.

— Lo se cariño pero mi celular no estaba conmigo.

Isaac asintió entendiendo que después le contaría.

— Stiles, ¿nos los presentas?

Stiles asintió a la petición de su hermanita.

— Bueno, el es Isaac, mi cachorro.

El ruloso los saludo con un ademán de manos.

— Mi padre, Noah.

El mencionado los saludo con un asentimiento.

— Los Hale, Peter, el otro compañero de papá, Laura la hermana mayor de mi compañero, Cora, la hermana menor de mi compañero, Malia, la hija de Peter y Derek, es el mas sexi de todos los Hale.

Los otros cuatro Hale gruñeron en desacuerdo.

— Grrr, también para ustedes.

Stiles presentó a Erica, Vernon y Jackson que saludaron son un simple ademán de mano.

— Los gemelos, Ethan y Aiden.

Ambos saludaron connun asentimiento al decir su nombre.

— Luego esta el cachorro de la manada McCall, mi querido y enojon, Liam.

El ojiazul saludo con un ademán de manos.

— Las chicas de la manada McCall, Lydia, la pelifresa, Allison, la azabache, Kira, la asiática y el Alpha Scott McCall.

Los mencionados se sentían avergonzados ya que en todo me mentó de la presentación de ellos los miro con algo de recelo.

— ¿Así que tu eres Scott?

Cuestiono Henry, el primo de Stiles mientras se le acercaba al Alpha.

— Eres lindo.

Stiles alzo una ceja confundido pero al ver que Niklaus ponía los ojos en blanco supo lo que pasaba.

— Genial.

Murmuró para luego encaminarse a donde esos dos y los separo ya que estaban a solo centímetros.

— Scott, Henry, Henry, Scott.

Los presento, ambos se sonrieron de lado y estrecharon sus manos recibiendo a cambio una corriente eléctrica que recorrió la columna vertebral de ambos.

— Un placer.

Murmuraron a dúo.

Las tres chicas miraron la escena confundidas, no entendían porque las mejillas de Scott se comenzaban a sonrojar.

— Okay.

Espero les guste.

Continuará...