I Am God.

Comunista.

Entramos los cuatro, Gustabo, Horacio, viktor, Greco y yo.

-¡quitadme estás mierdas!.- soltó el súper intendente.

-no señoh.- respondió un agente rubio a su lado.

-¡Papá!...- lo saludo Horacio quien traía una rosa en sus manos igual que Gustabo.

-¿Quien coño eres tú...?.- pregunto el meyor.

-soy yo papá...- respondio Horacio. -papa, soy comunista...- soltó el emocionado por verlo. El súper intendente al oír esto se puso más agresivo.

¡Ajá!. Vi una herida en su pierna... Sangraba.

-necesita curación...- solté mirando la herida sangrante.

-¡NO NECESITO NI UNA MIERDA!, ¡SOLTADME!. ¡OS MATO COMUNIATAS!- gritaba. vale... Si parecía no agradarles los comunistas.

-vale. Yo te asistiré... A ese hombre no me acercó.- soltó Valeria alzando las manos. ¿Cómo?... ¿Tan terrible es?, Hasta ahora solo grita como loco.

Trate de acercarme muy amigable.

-¿Super intendente?... ¿Puedo ayudarle con su lesión?...- pregunté muy dulce. El me miro con el seño fruncido. Esposado y todo se me acercó.

-aleja... Tus... Putas... Manos... De mi... Comunista.- susurro con rabia. Rodee mis ojos.

-como quiera... necesito ayuda.- solté fria. Dos agentes los afirmaron de sus brazos. Me arrodille enfrente de el para quitarle el cinturón.

-que alguien más lo haga.- soltó viktor.

-soy EMS viktor... Esto es lo que hago.- bufé.

-¿Que es tu novia, puto comunista?.- pregunto el intendente forcejeando con los agentes.

-es mi hermana.- aclaro viktor. Todos los agentes comenzaron a balbucear entre ellos.

-no jodas... No es su novia.- susurro por aquí.

-esta libre...- susurro por allá.

Terminé de desacer el cinturón y la bragueta del súper intendente.

-todos los agentes se deben ir.- soltó Valeria.

-¿C-como?.- pregunte al ver que solo ellos mantenían al intendente quito.

-es por la privacidad del paciente. Tranquila lo esposaran... Con más esposas.- soltó ella. Ambos agentes le colocaron otras dos esposas que lo mantenían pegado a la camilla de pie.

Volkov y ivanov se quedaron por seguridad.

Volví a arrodillarme con todas las cosas necesarias para curarlo al instante.
Cogí la cinturilla de su pantalón.

-¡MIRA COMUNISTA HIJO DE PUTA COMO TENGO A TU HERM...-

-QUEDESE QUIETO.- Lo frene antes que lo dijiera. mejor calladito...

-volkov por qué no traes la porra... Yo me quedo.- soltó ivanov.

-la porra lo hará entrar en razón.- soltó viktor saliendo de la habitación. Ostia... Que alivio.
Ivanov respetando la privacidad de su superior de volteo.

Baje los pantalones del súper dejandolo en boxer y examine la herida... Parecía un corte.... No era tan profundo. Pero sangraba mucho al no quedarse quieto.

-¡no me toques!.- soltó el hombre.

-venga... Es un poco de alcohol...- le enseñe el algodón. El solo miraba con el seño fruncido.
Limpie la herida suavemente y con delicadeza para que no entrara alcohol dentro de la herida ya que eso es doloroso, el alcohol es solo para desinfectar el alrededor....
Consentrara en lo que hacía mis ojos viajaron inevitablemente hacia cierto bulto notorio en sus boxers. Ostia...
Mire a la única persona que estaba ahí, que era ivanov y este seguía de espaldas... Vale... Uf...
Mire al súper intendente con una sonrisa pícara.