Duchas.

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Narra Jack conway.

Ella me miraba con los ojos entreabiertos. Tratando de juzgarme.

-volkov sabes que en el jodido hospital llegan tíos a solo tocar los cojones.- expliqué.

-al igual que aquí.- respondio. Hijo de puta... Si es verdad. mierda quería que _____ fuera alumna para tenerla vigilada, que supiera a cada minuto que es mía...

-vale.- respondi cortante.

-me voy de 10-33.- informo volkov déjandome  con _____ solos. Creo que confía más en mi por lo que le dije de _____ y lo que compartió el de ella.

-¿Que coño le dijiste?.- pregunto cabreada. Sonreí al verla así. Se veía como un niña malcriada.

-Hice lo que tenía que hacer.- susurré ronco. Ella frunció el seño sin entender.

-¿A que cojones te refieres?...- solto indignada.
me acerque a ella y esta retrocedió hasta chocar con las taquillas. La acorale colocando mi mano a un lado de su cabeza y apoyandome en esta.

-aver muñeca... Eres mía. Y el que los demás te vean semi desnuda. me pone los cojones inflamados.- solté cerca de ella. Ella trago saliva.

-vale... Pero que te quede claro gilipollas. Jamás, jamás, jamás... Seré una madera.- respondio atrevida. Sonreí a un lado. Con una mano la cogí del cuello delicadamente y la acerque más a mi.

-podre ser gilipollas... Pero tarde o temprano caerás... Y no me tutees muñeca.- solté contra sus labios. Mi polla estaba impaciente queriendo revivir lo de anoche. Está ves yo estaba preparado.
Ella sonrió y se mordió el labio inferior de una manera que me ponía aun más.

-nunca...- soltó y choco contra mis labios. Las manos de ella me cogían de la nuca impidiéndole separarme de ella. Aún que tampoco tenía la intención.

La levante de la cintura y ella me abrazo las caderas con sus piernas. Me diriji a las duchas de los vestuarios.
Sentía como mi entrepierna imploraba espacio y ser liberado.

-hoy...estuve del otro lado de una... persecución.- soltó contra mis labios mientras me seguía besando. Entre a una ducha y la cargue contra la pared de esta.

-es mucho más divertido... Cuando vas en un patrulla.- solté mientras me desacia de su camisa hasta dejarla en brasier.
Ella me apartó un poco y me empujó contra la pared.

-¿Sabe que es más divertido?.- pregunto desabrochando mi camisa.

-No muñeca...- respondí. Ella sonrió, me miro a los ojos y se arrodillo frente de mi.

Narra _____.

Tenía mucha adrenalina en mi cuerpo la cual no me dejaba pensar claramente, pero lo que voy a hacer lo llevo deseando desde que probé un bocado de la fruta prohibida que es este tío.

Miraba cada reacción del súper intendente. Este abrió sus labios levemente dejando a la vista su lengua entre sus dientes.
Mis manos pasaron a su cinturón desaciendo este. Baje la bragueta y sus boxers negros.

Sonreí picara mirando como el estaba listo para mí.

El me cogió del mentón obligandome a alzar la vista. Tenía una sonrisa perversa.

-abre la boca.- ordeno. Yo le obedeci abriendo la boca y sacando la lengua.
Este con su otra mano cogió su polla y la metió en mi boca mientras me seguía mirando.
Sentía como mi entrepierna ya estaba humedecida... 
-chupa muñeca.- ordeno con un susurro muy ronco. Mi boca se hizo agua.
Comencé a succionar levemente mientras movía mi cabeza de adelante hacia atrás haciendole una felación.
El inclino su cabeza hacia atrás apoyandose en la pared y cerrando los ojos.

I Am God.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora