Obligación.

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Narra Jack conway.

Miraba las calles concentrado en todo mi alrededor del patrulla.
Volkov confiaba demasiado en mi con su hermana pequeña... Joder soy un hijo de puta. Pero eso ya lo sabía el.

Note un moviento raro en _______, la mire de reojos ella se habia atado el cabello en una coleta, tenía una leve sonrisa.
Volví a consentrarme en el camino.
No la puedo follar, no la puedo follar, está débil... Me repetía a mi mismo.

Sentí la mano de ______ en mi muslo. Mierda.

Sin decir nada seguí conduciendo. Ella movia su mano cada ves más cerca de mi polla.
Joder... no jodas.

Quería que parará, pero al mismo tiempo que no se detuviera.

Opte por seguir manejando.

Su mano llegó a mi entrepierna dura.
Por ensima de mi pantalón movía su mano.

Aparque fuera de la tienda. Apenas coloque el freno de mano la cogí de las caderas y la subí a mi regazo.
Solo la bese como ella a mi. Ambos desesperados uno por el otro.
Me la sudaba que estuviéramos en sitio público, los vidrios del patrulla son polarizados.

-fuckme.- soltó contra mis labios. Esa palabra sonaba tan bien con su voz.
Me detuve a pensarlo un poco...

-no.- respondí. Ella frunció el seño. -aqui no.- aclare ella sonrió de lado.

Bajamos del patrulla y fuimos a la tienda. Rápidamente compre una pipa y nos largamos.

Narra ______.

El súper intendente conducía más rápido esta ves. No se dónde coño iba pero ya no quiero esperar más.

Llegamos a un edificio grande y lujoso.
Este me guió al interior, tomamos el ascensor.
Lo mire deseosa y el a mi.
¿Que coño tiene este madero que me pone tanto?.
Me lance a sus labios y este me correspondio. Salímos del ascensor, el súper me había cogió en sus brazos haciendo que colocará mis piernas a su alrededor.

No me importaba que alguien nos viera y al el parecía que tampoco.
Estamos a algún lugar. El seguía caminando y yo no estaba interesada en dónde íbamos.

Al final me dejó en una cama. El está a entremedio de mis piernas.

-te debo algo muñeca... Desde hace mucho.- cometo con voz ronca.

-¿El que?.- pregunté. El solo sonrió y se levantó. Se sacó su camisa nuevamente. Más cerca y a la luz del día podia ver algunas cicatrices en su cuerpo, eran balas y cortes.

El súper intendente saco mis pantalones y luego mis bragas sin perder tiempo. Ambos sabíamos que no podíamos desaparecer por mucho.

El me miro y se lamió los labios. Al entender a lo que se refería mis caderas comezón a moverse Levemente al instante.

El sonrió y se arrodilló. No jodas... ¿Esto está pasando de verdad?.

Levanté ni torso para verlo.
El súper intendente cogió mis muslos e hizo que me acercara más a la orilla de la cama y abrió más mis piernas.

Yo tenía la boca abierta para poder respirar bien y que no me afixiara en ese momento.
El me miro a los ojos con una sonrisa perversa.
Se acercó a mi intimidad abrió levemente la boca y saco la un poco la lengua.
Cada centímetro que se acercaba mi corazón latia más rápido.

Hasta que su sentí su lengua en mi zona sensible.

-ostia...- gemi cerrando los ojos. El siguio, hacia pequeños círculos con su lengua en mi clítoris. -Ah....- solté bajo. Tape mi boca para no emitir ni un ruido.
Este paro y saco mi mano de mi boca.

I Am God.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora