Diario de un amor o dos (Editando)

Capítulo 37

Mateo

Los últimos días han sido relativamente tranquilos, Jules volvió a la escuela y ha ignorado por completo los rumores de pasillo

Y en dos días les quedará claro a todos por qué no deben meterse con ella nunca más

Ellie y yo hemos intentado pasar más tiempo con mamá, saliendo a comer y conversando de todo un poco... Yendo al cine incluso. Hace mucho que no podíamos hacer cosas así

Por fin Richard y Juliet hablaron y resolvieron las cosas, aunque ha estado bastante tensa y hasta triste por tener que revolver lo que ya había enterrado. Hemos tratado de animarla y de hacer que se relaje... Luego de lo que pasó es lógico que nos preocupe, no quiero que nada malo le pase y sé que no está en su mejor momento

Tiene su cabeza recostada en mis piernas y sus ojos cerrados disfrutando del sol mientras acaricio su cabello impartiendo un masaje. No ha dormido muy bien

Se escuchan los gritos del entrenador y de los jugadores, el equipo de football está entrenando para el partido que está cada vez más próximo

Juliet y Peter también están acaramelados junto a nosotros, Ellie está en el taller de pintura trabajando en su nuevo cuadro y por obvias razones Tomás no está, para mi buena fortuna

Se remueve en mis piernas y se sienta sonriendo como una pequeña que está a punto de manipular a sus padres para conseguir su propósito

- ¿Podrías traerme un café? - pide acercando nuestros rostros hasta que somos prácticamente uno mismo

- ¿Y que me gano a cambio?

Se acerca a mi oído

- Podrás hacer conmigo lo que quieras cuando estemos a solas esta tarde

Me paro tan rápido que por poco la llevo conmigo. Ella suelta una carcajada

- Sin azúcar y bien cargado en camino- asiente sonriendo y mi corazón salta de felicidad - En un momento traigo su orden, bella dama

Voy a la cooperativa y ordeno el café junto a una porción de pastel de chocolate y al regresar, me encuentro con que puede que todos nuestros esfuerzos se hayan ido al carajo

Al menos no son Brad ni Salomé, solo es Danielle

- No quiero escucharte- capto lo que dice a medida que me voy acercando

- Te lo suplico Jules, yo te juro que no lo hice pensando en dañarte- dejo lo que compré en la orilla de la acera

- ¿Ah no? ¿Creías que alguien como Salomé que claramente me odia te pedía la clave de mi casillero para dejarme un regalo de cumpleaños adelantado? No juegues con mi inteligencia y lárgate de una vez

- Jules...

- ¡Que te largues! Has de cuenta que nunca fuimos amigas y dedícate a arruinar vidas en otra parte. Pero te advierto que ni con la mía ni con la de mi hermano vuelves a jugar porque no respondo por mis actos

Está roja de la rabia y la parejita también se puso de pie, Juliet G intenta calmar los ánimos

- Jules, escúchala- me enfoca furiosa - Sé que estás muy molesta pero esta no eres tú... Danielle merece la oportunidad de explicarte

- Eres importante para mí, Gabriel también lo es y- la corta con una bofetada que me ha dolido hasta a mí, debo tomarla fuertemente de la cintura y los brazos para inmovilizarla. La rubia no hace ademán de sobar el golpe

Por suerte ningún maestro vio eso

- Jules, Danielle solo quiere disculparse y explicarte cómo fueron las cosas. Por la amistad que algún día existió yo creo que lo vale... También me enojé mucho con ella, pero al saber cómo fueron las cosas tal vez tu percepción cambie- trata de hacerla entrar en razón su mejor amiga y ella forcejea para que la suelte