Con tu sonrisa (Wang Yibo & Xiao Zhan)

CAPÍTULO 28

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El aire se estaba volviendo escaso, comenzó a hacer calor en esa habitación y algo los llamaba, sin poder resistirse más Yibo empujo a Xiao Zhan al interior de la habitación, dejándolo caer suavemente en la cama, incluso con toda la desesperación que tenía, trataba de sobrellevar las acciones y emociones que sentía en ese momento.

Xiao Zhan no colocó resistencia y se dejó guiar, Yibo se subió sobre él sin detenerse en su "pelea" a besos, agarro con firmeza a Xiao Zhan, para no dejarlo mover, a este paso su enfoque estaba perdido y ninguno podía pensar claramente. Sus besos se volvieron más húmedos, sus lenguas encontraron la sincronía y el equilibrio para poder ir una con la otra.

Pararon. Volvieron.

Respiraron. Continuaron.

Wang Yibo bajo su mano al pecho de Xiao Zhan, en dirección a la camisa de botones, poco a poco fue despejando la zona, despojando a Xiao Zhan de la camisa y dejándolo en esqueleto. Bajo lentamente mientras dejaba besos suaves, lleno de deseo sobre el cuello. Volvió a la boca de Xiao Zhan tras haber recorrido el cuello ajeno, casi por inercia e instintivamente, atraído cada vez más por esa boca, succiono la parte inferior del labio contrario, Xiao Zhan jadeo como respuesta.

Satisfecho por la contestación del cuerpo ajeno, sonrió y volvió a lo suyo, esta vez, quitándose su camisa. El sonido húmedo de sus bocas hacia un eco muy vergonzoso en la habitación, aun que sus oídos era sordos por el absorto que tenía con Xiao Zhan.

¿Qué mierda estaban haciendo?

Aquella pregunta repentina, lo dejo aturdido, quería seguir debajo de Yibo, quería que él lo estuviera besando, que lo tocara, que lo mirara, que...

Se asustó, pero olvidó su espontánea preocupación al sentir una pequeña mordida sobre su cuello, jadeo de sorpresa. El dolor fue extraño, casi tenso, Yibo volvió a repetir la acción unas cuantas veces más, todas seguidas, buscando la reacción que esperaba. Mordió brusco, Xiao Zhan gimió omiso, gimió más, cada mordisco dejado por Yibo, cada vez más brusco, cada que lo hacía se le era difícil controlar su voz.

El último lo dejo aturdido, el dolor estaba presente, pero no era la misma sensación, ese dolor le gustaba, con más razón, tenían que detenerse, separó a Yibo de él, solo unos centímetros, lo miro, su mirada era opaca, suspiro.

-¿Qué se supone que estamos haciendo? - susurro, desorientado y afligido.

Yibo lo miro desconcertado y pasmado, lo pensó, analizó y proceso todo. No llego a ninguna conclusión. Se sintió patético, bajo la mirada, que deplorable.

-No lo sé... - admitió honesto, vacilante, su propia respuesta lo hizo dudar.

-¿Quieres…? -no pudo terminar.

-¿Quieres? - repitió - No me preguntes eso. Eres tú el que debe de estar seguro- musito, soso.

-¿Por qué? - como si la respuesta no fuera obvia.

-Xiao Zhan... - el nombrado se estremeció, vaciló un poco.

-Wang Yibo. ¿Te lo dije, no? - habló incierto - Me gustas, joder, me encantas- escupió - Te bese, deje que me besaras, nos besamos, estamos en mi cuarto... - el brillo de sus ojos pareció extinguirse - ¿Qué otra maldita respuesta necesitas?-

El silencio los invadió, no fue capaz de mirarlo, miro el cuerpo que estaba sobre él, miro su camisa a un lado tirada. Indeterminado, respiro hondo.

Xiao Zhan no lo sabía, no sabía si era correspondió, las veces con las que se besó con Yibo eran situaciones en las que él estaba ebrio, incluida esta. Pensó que de seguir así, a la mañana siguiente Yibo estaría tan arrepentido que no le volvería a hablar.