Shameless (EN EDICIÓN) | k.d | T1

Capítulo 14

—¡Uraraka, tengo algunos heridos por acá!— grité lo más fuerte que pude, al rato ví como ella se acercaba rápidamente a la escena.

—¡Voy por ellos, apartate!

Lo que comenzó como uno de nuestros fines de semana de patrullaje usuales por la ciudad terminó en desastre cuando vimos actividad bastante alarmante, al acercarnos y examinar la zona nos dimos cuenta de que había posible actividad delictiva. Todos entramos en acción, había quedado cerca del mismo lugar en el que patrullaban Uraraka, Lia, Denki, Mina y Kirishima. Procedimos a avisar a los héroes profesionales que estaban cerca con nuestros celulares y también a nuestros demás compañeros, quienes estaban esparcidos por diferentes direcciones defendiendo a los ciudadanos.

En cuestión de 10min la ciudad estaba vuelta un pequeño caos, los gritos de histeria de los niños, mujeres y hombres que huían del fuego se combinaban con el terrible humo que venía de algunos carros, locales y edificios que colapsaban gracias al choque de los cuerpos ya inútiles de los nomus que salían sin previo aviso. Uraraka se encargaba de poner a salvó a los ciudadanos con Kirishima mientras Lia y yo buscábamos a los responsables del caos. Al llegar a una calle ciega nos dimos cuenta de que era una trampa, los delincuentes nos querían ahí para poder atraparnos.

—Rindete, los tenemos acorralados.— dijo el robusto hombre, haciendo señas con las manos para que el pequeño grupo detrás de él no bajara la guardia.

—¡Jamás!— grité histérico.

Uno de los hombres que estaba detrás del que parecía el líder del grupo lanzó una especie de cuchillo a una velocidad bastante considerable hacia Lia, por lo que la empujé en el momento perfecto recibiendo la cortada en mi brazo derecho.

—Mierda...— dijé cayendo al piso. Estaba perdiendo algo de sangre y eso me preocupaba.

—¡Deku!— gritó Lia, levantándose del piso para llegar a mi lado. —¡Perdón, perdón, perdón!— decía mientras unas pequeñas lágrimas salían de sus extraños ojos e intentaba hacer un torniquete con la tela rota.

—Tu compañero tiene un brazo herido por tu culpa, ¿sería prudente herirle el otro para quedar parejo?— dijo el mismo villano.

Sin darnos cuenta, la cuchilla que antes había quedado atascada en algun lugar del piso se devolvió en el mismo curso que siguió cuando la lanzaron por primera vez, llegando a hacerme un corte en el otro brazo y llevándose consigo un mechón del cabello de Lia.

—Van a pagar por esto...— logré decir, el dolor no era casi perceptible pero estaba seguro de que era la adrenalina que estaba actuando como analgésico momentáneo.

Lia se incorporó lentamente, quedando frente a ellos, luego de mirarme con algo de duda logré gritar.

—Hazlo ya Lia, ¡Ahora!

Empezó a mover sus manos de forma circular creando una pequeña bola de energía, seguido de esto uno de los carros que habíamos elegido minutos antes se elevó en el aire y vino a gran velocidad hacia los delincuentes, quienes quedaron inconscientes y visiblemente heridos ante el repentino ataque.  Corrimos hasta llegar hasta ellos aunque tuvimos que retroceder un poco, el humo que salía del vehículo empezó a hacerse cada vez más denso y esparcirse visiblemente, llamando la atención de otros héroes que justo acababan de llegar a la escena.

—Izuku, Lia, ¿estado de los delincuentes?— pregunto Endeavor aproximándose a los chicos junto con Aizawa, Mirko y Hawks mientras tapaban sus narices con sus manos.

Lia se acercó levemente intentando no tocar el ardiente vehículo ni la débil pared contra la que habían sido estampados.

—Aún respiran, su pulso es débil, pero siguen vivos.— habló ella, alejando su mano del cuello de los antisociales.