Cap 37: Comienza una nueva página.

85 10 0
                                    

Después de bajar y recibir los elogios de todos, Otabek no creyó que su gatito llamará tanto la atención, sabía de su belleza y atractivo, pero después de la exhibición muchos Amos y Amas venían a pedirle a su novio, Yuri había llamado a todos y demostrado ser más que digno para estar con el moreno, muchos quienes ya le conocían por otras fiestas le felicitaban y deseaban felicidad, pero lo que realmente no esperaba es que todos se refierieran a su pareja como su esclavo, pocos fueron los que se refirieron a su ruso como sumiso, para la gran mayoría que lo conocían o tenían en alta estigma, el rubio ya era su esclavo; estaba sentado descansando un momento cuando escucho una voz que conocía de memoria.

- Voy a suponer que jamás vi lo que le hiciste a mi primo delante de todos Otabek, un poco más y se lo haces allí mismo.

- Buenas noches señor Nikiforov y Katsuki; en las fiestas BDSM están prohibidas las relaciones sexuales tanto en privado como en exhibiciones, todo aquél que las haga será expulsado de la fiesta y de la lista.

- Vaya, eso no lo sabía, es asombroso cuantas normas hay en este mundo, hola Yurio, ¿puede hablar?

- Claro, os conoce a ambos, pero "con educación gatito"- conocía ese tono y sabía a lo que se refería, no iba a morirse por tratar bien a su primo y a su pareja.

- Hola Víctor, hola Yuuri.

- Entendido, deja que me llame viejo o calvo, Yuri sólo me llama así cuando está enfadado.

- ¿Ok?, gatito, eres libre de hablar como siempre con ellos.

- Oye Otabek, ¿quiénes son?

- El señor Nikiforov y Katsuki son mis jefes Mark, tanto Nikiforov como Yura son primos y bueno, el señor Katsuki es su pareja y futuro esposo y cuñado de Yuri, ya que Nikiforov lo ve como a un hermano pequeño.

- De todos los fotógrafos del mundo me enviaron al que se iba a enamorar de mi pequeño Yuri, que sepas que para mi sigues sin tener mi completa aprobación.

- Viejo, hemos tenido está conversación, Otabek no debe satisfacerte a ti sino a mi, ¿acaso crees que tú me agradas como futuro esposo del katsudon?, en mi mente se merece a alguien más serio y maduro.

- ¡No lo digas así Yurio~, sabes que amo a Yuuri mejor que nadie, no lo escuches lyubov, quiere manipularte para alejarnos!

- Jajajaja, Vitya, sabes que yo también te amo tal y como eres; felicidades por la exhibición, fue increíble, casi ni te reconocí Yurio, me alegro de que te hiciera felíz lo que hicieron.

- ¿Felíz?

- Sí, sonreías mientras Otabek te hacía la suspensión, al parecer lo disfrutabas, nos alegramos mucho por ti Yurio.

- Disfrutabas en las garras de un depredador.

- Yuratchka y yo sólo tenemos tres años de diferencia señor Nikiforov, no creo que usted sea el más indicado para llamarme depredador.

- ¡¿Cómo me llamaste?!

- ¡Jajajajaja, no puedo creerlo, en toda tú cara viejo!

- Gatito, comportate.

Mark y Sam dejaron leves risas al escuchar ese comentario, al parecer los jefes de sus amigos no eran muy maduros, estuvieron hablando con ambos y conociendolos, al parecer el de pelo plateado era muy cariñoso con su pareja, algo que les sorprendió a los acompañantes, ellos tenían el malo estigma de que los rusos eran fríos y poco cariñosos, pero al parecer no es que fuera muy cierto, el ruso mayor no ocultaba en decir cuanto amaba a su futuro esposo, cuanto quería estar con él y que nunca iba a poder querer a alguien como su rollito de canela, el japonés era todo lo contrario, se sonrojaba fácilmente debido a los alagos de su pareja, y era muy tímido, notaban que estaba nervioso y que el ambiente en el que se encontraba no le era muy cómodo, el peli negro vio a los amigos del fotógrafo y notó que uno de ellos estaba en la misma posición que el rubio, tal vez era un protocolo de ese mundillo.

El oro de tus cabellos. (AU/ Otayurio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora