El oro de tus cabellos. (AU/ Otayurio)

Cap 8: Harley.

Allí se encontraba recostado con Potya a su lado, Otabek había abierto un poco los ojos hasta que sintió algo peludo. Escucho que alguien estaba en la cocina mientras volvía a cerrar los ojos, se encontraba muy agotado. Horas más adelante el kazajo volvió a despertarse por completo, vio al rubio con su gata mientras le peinaba. Ambos se miraron y se saludaron con una sonrisa.

- Tienes el sueño pesado Altin, es la 1 de la tarde, espero que durmieras bien en el sofa.

- No te preocupes dormí bien, Víctor y Yuuri me van a matar- Se levantó lo más rápido que pudo mientras se organizaba un poco la ropa. Debía ir a su casa y cambiarse, estaba un poco somnoliento para conducir, así que prefirió irse a el baño para quitarse el sueño. Jamás le había pasado eso, quería morirse en ese instante, él era muy serio con su trabajo y no permitía dejarse llevar muchas veces por sus emociones.

- Beka, càlmate, le dije al dúo que ibas a llegar sobre las 2 de la tarde. Les comenté que te quedaste en mi apartamento y nos dormimos muy tarde.

- ¿Cómo me llamaste?- Otabek salió del baño con el rostro mojado al igual que su cabello. Tenía la camisa un tanto humeda y su expresión seria con la ceja arqueada no ayudaba a decir las cosas sin reírse.

- Beka, ¿te molesta que te llamé así?Deberías comer algo antes de irte, no vaya a ser que te de algo en el trabajo.

- No me molesta, es solo que me sorprendió, no me habían llamado así desde que dejé mi país natal, ¿vas a volverme a brindar ese raro sándwich?

- No, hice gachas con huevos revueltos y un poco de té, espero que te guste, no le cocino a cualquiera Altin.

Otabek soltó una pequeña risa mientras seguía al ruso, le empezaba a gustar el humor sarcástico y poco convencional de su compañero de trabajo. Estaba comenzando a pensar que podrían llegar a ser amigos. Cuando llegó a la sala/comedor se sorprendió de la comida, notó que el rubio no sólo se había esforzado para brindarle buena comida, sino también su compañía. El kazajo llegó a las 13:50 a su trabajo y no dudo en meter prisa y hacer su trabajo lo más eficiente posible; Se quedó a trabajar unas cuantas horas extras para compensar el no haber llegado a su hora al trabajo. Se sentía mal en ese sentido pero al mismo tiempo un tanto alegre, había logrado hablar con Yuri y que se abriera un poco a él y eso le motivó a seguir teniendo ese tipo de amistad.

- ¿No crees que ya deberías volver a tu apartamento Otabek?- JJ le hablaba desde el borde de la puerta; desde que el canadiense notó que tenía cierta cercanía con el rubio, empezó a comportarse un tanto posesivo con él- quiero decir, mañana también trabajas, podríamos incluso ir a un bar como en los viejos tiempos, tú, Harley, Creita y yo.

- Seguramente Isabella te esté esperando JJ. No hace falta que te preocupes tanto, sabes que soy muy serio con mi trabajo.

- No estoy preocupado.

- Está bien, no estés celoso, no voy a ir a casa de Plisetsky, JJ; no me agrada esa actitud posesiva conmigo- El kazajo miró al moreno con la ceja arqueada, vio como su amigo hacia un puchero mientras tenía los brazos cruzados. Muchas veces olvidaba que el canadiense tendía a tener comportamientos posesivos y de celos incluso entre sus amigos.

- ¿Estás seguro que te vas a tu apartamento después?, a este paso vas a ir con Yuri y Harley a un bar sin mí.

- Deja de preocuparte y vete, no vaya a pasar que Isabella crea que me estoy robando a su novio.

Después de eso JJ se fue, estuvo casi una hora y media hasta que alguien tocó la puerta del estudio de edición y Otabek no tuvo intención de no girar, sabía que sería JJ para llevarlo a dar una vuelta con su bebé.