Amor Joven//Isargas

29

Juan lo besó de nuevo y las manos de Martín se envolvieron alrededor de su cuello, acercándolo más. Lo tomó en sus brazos y sin soltar el beso lo llevó a la cama, donde lo acostó.

,,Esto definitivamente es mejor que la mesa", se trepó hacia atrás y yació en las almohadas, viendo a Juan en los cuatro acercándose como un lindo perro. ,,Aún puedo ponerte en este, es más grande", murmuró y apoyándose en sus manos se inclinó hacia adelante para besarlo. Se arrodilló junto a sus piernas y se frotó contra su regazo, incluso a través de los jeans podía sentir lo duro que estaba Martín.

Se besaron durante unos minutos, hasta que Juan empujó la rodilla en el regazo del segundo y su respiración se hizo más profunda. Entonces Juan se apartó para deshacerse de sus ropas.

Ambos eran solo en bóxers y Juan volvió a acercarse, encajaban tan perfectamente que se estaban causando un roce asombroso que los estaba volviendo locos. Martín ahora respiraba con dificultad y Juan podía sentir su llena erección en su muslo, por lo que se deslizó entre ellos y tiró de la molesta tela. El aire se sentía tan frío en su piel sensible y era casi incómodo.

Inmediatamente después de que su piel se tocó, Martín vio. ,,Juan", logró decir. ,,Lo intentaré, pero no creo que pueda aguantar mucho". Juan lo besó rápidamente en los labios.
,,Está bien", dijo. ,,¿Quieres que te prepare?" Martín asintió rápidamente y apoyó la cabeza en las almohadas. Juan abrió una botella y se humedeció los dedos antes de sentarse de rodillas para mirar al chico.

Los cabellos de Martín estaban pegados a su frente, su pecho subía por la impaciencia, su pene rojo lleno yacía sobre su estómago. Juan se inclinó para besarlo y lo lamió con cuidado, haciendo que Martín suspiró ansioso.

,,Está bien, pegueño." Vio el nerviosismo de Martín. Aunque no era la primera vez, Martín estaba tan tenso que deslizó el dedo hacia abajo para burlarse un poco de su entrada y hizo unos circulos, sintiendo a Martín calmarse.

,,Respira", dijo Juan y metió el dedo adentro. El rostro de Martín se torció y luego se relajó, cuando movió su trasero contra la mano de Juan. ,,Es diferente a ayer", dijo Martín. Juan sonrió. ,,En un segundo te sentirás bien, lo juro". Movió los dedos y los estuvo moviendo levemente por un momento hasta que tocó ese pequeño lugar de adentro. Martín jadeó y sus caderas se levantaron. ,,Hazlo de nuevo," él dijo. ,,Por favor." Y Juan lo hizo, masajeando el lugar y poniéndose más duro cuando Martín gimió.

,,¿Otro?" preguntó. Martín asintió ansioso, torció las palmas de las manos y apretó la manta blanca. Juan entró otro dedo y comenzó a moverlos lentamente. Apartió un poco los dedos y Martín se tensó, pero pronto volvió a ser placentero. Jadeaba hasta que Juan le sacó los dedos.

,,¿Por qué te detuviste?" preguntó Martín. Tenía los ojos cerrados y sonaba como a punto de desmoronarse.

,,Pensé que querías una polla", sonrió Juan. Martín abrió los ojos. ,,Espera...la cama estará mojada, ¿no deberíamos usar condón?" Juan estaba confundido por la pregunta, pero luego accedió y, partiéndose de piernas, le dio a Martín una bolsita. Volvió a ponerse las manos en los muslos para poder mirar.

El segundo chico abrió el paquete, una de sus manitas envolvió la longitud de Juan, lo que hizo que inhalara profundamente. Martín se cruzó lentamente la parte de arriba y empujó la rendija, esparciendo el preeyaculado por su longitud.
Juan inclinó la cabeza. ,,Ah, joder", gimió. "Martín".

,,Lo siento", dijo Martín rápidamente, logró poner el condón en el pene de Juan y lo bajó antes de poner un poco de lubricante en la mano y bombear varias veces su orgullo.

,,Está bien", dijo. ,,Estoy listo". Juan exhaló y se inclinó hacia él una vez más. Conectó sus labios en un beso perezoso. ,,Yo también."

Luego se dirigió a sí mismo, con una mano junto a la cabeza de Martín y lentamente empujó hacia adentro.
Martín contuvo la respiración, esperando que se sintiera bien, porque en el momento solo sintió doloroso estiramiento. Pero tan pronto como las caderas de Juan se presionaron más contra él, no pudo concentrarse en nada más que en lo cómodo que era estar tan lleno y tan cerca de Juan.

,,Muévete, por el amor de Dios, muévete", siseó después de unos segundos de paz y Juan comenzó a mover lentamente las caderas. ,,Maldita sea, estás apretado", dijo Juan entre dientes. Por un momento pensó si era realmente hoy cuando su hijo está con su amigo, pero silenciosamente esperó que no se equivocó y que ninguna visita inesperada llegue. No podría detenerse incluso si quisiera.

,, Juan, Juan, Juan, por favor, más rápido ", gimió el chico en voz baja y movió el culo al mismo ritmo que Juan. Su pene se movía sobre su estómago, cuando empujó y la cama golpeó ruidosamente la pared.

Juan aceleró. Martín estaba en llamas y se ensanchaba a su alrededor, y la mente de Juan estaba cegada por la asombrosa sensación. Continuó así durante siete minutos hasta que Martín estuvo prácticamente llorando, murmurando palabras que no tenían sentido y envolviendo el cabello de Juan en sus dedos.

Juan se detuvo solo para poner las piernas de Martín sobre sus hombros, empujando de nuevo esta vez con más fuerza. Repetidamente estaba golpeando la próstata del chico y lo convenció de gritar y tirar de su propio cabello.

,,Juan, estoy cerca", susurró. ,,Joder, vamos, Juan, más fuerte".

Juan escuchó, empujó una y otra vez y dejó que Martín gimiera y gritara, cuando se movía dentro de él. La diferencia entre los gemidos suaves, altos de Martín y sus bajos y duros hizo arder a Juan por su perfecta armonía.

Después de otro minuto, la mano de Martín se movió hacia la espalda de Juan, sus dedos hicieron un profundo surco en su piel. ,,Voy a venir, Juan".

Juan envolvió una mano alrededor del orgullo de Martín y rápidamente bombeó, murmurando palabras de apoyo.

Con un último empujón Martín terminó con fuerza entre ellos. Gimió lo suficientemente fuerte como para que todos en la calle lo escucharan.

Juan lo empujó una vez, dos veces y después de la tercera se corrió también y cayó sobre el pecho de su amante, completamente sin aliento.

Durante unos minutos eran en silencio. Solo el sonido de un aliento fuerte sonaba de ambos chicos sudorosos. Y luego Juan sonrió. ,,Maldita sea", dijo. ,,Estuviste increíble. Te amo mucho".

Juan se acostó junto a Martín y con su mano encontró una ropa para limpiarlos a ambos. ,,Yo también te amo", sonrió Martín y se acercó a Juan, quien lo abrazó con una mano y el menor puso la suya en el pecho de Juan, mirando a los hermosos ojos. ,,Oh Dios, estoy tan agotado y pegajoso ".

,,¿Quieres ducharte conmigo?" sugirió Juan. ,,¿Y luego tomar una siesta?" Martín sonrió tan enamorado. ,,Eso suena increíble, amor. "

Fueron al baño, sus piernas estaban inestables y su piel húmeda. Cuando pasaron por el espejo, Juan pensó que se ven tan bien juntos.

Estuvieron bajo la ducha fría no más de seis minutos antes de volver a la cama.

Juan abrazó a su novio por la cintura y lo acercó más. La manta no era necesaria ya que todavía estaban llenas de calor. Antes de que Martín se durmiera en el cómodo abrazo de oso, murmuró, ,,tenemos que volver a hacer esto pronto".

Juan sonrió. ,,Lo haremos, no te preocupes", le dio un beso en la mejilla. ,,Cuando te despiertes si quieres", añadió en un susurro. ,,Te amo, pequeño".

,,Yo también te amo."

Not los caps de smut siendo más largos que los normales JAJA