𝘜𝘯𝘢 𝘉𝘢𝘭𝘢

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Ya estaba anocheciendo, estaba cambiandome en el baño mientras que Gwen leía un libro recostada sobre la cama. Mi mente se dispersaba en el dilema de si contarle a Gwen o no, sí... se lo tenía que contar, pero... ¿cuándo?, supongo que luego de lo que suceda esta noche, es por el bien de Emily, ella me pidió que no dijera nada. Pero ¿a la persona que más amo en el mundo tambien se lo tengo que ocultar?  No Mildred, esta mal... se lo tenes que decir ahora.
Terminé de vestirme, era el mismo vestido bordó de la vez pasada, pero esta vez decidí ponerme un pequeño sombrero negro. Salí.
- Gwen, ¿podemos hablar? - le digo con suma cautela.
- si, ¿qué tienes?.
Me da la mano y me siento a su lado.
- tengo algo,... un asunto importante que contarte, es con respecto a Emily, hoy a la noche... ella va a lograr algo grande, yo la voy a acompañar y necesito que sepas que cuando vuelva, prometo contarte todo... ¿confías en mi?.
- no logro entender... claro que confio en vos... Mildred, ¿te pasó algo?
- no, a mi no me pasó nada, solo recuerda que te amo más que a nada en este mundo.
- está;...
Justo tocan la puerta, era Emily avisando que teniamos que irnos.
- ¿qué ibas a decirme?- Le digo sosteniendo aún su mano.
- que está bien, que yo tambien te amo.
- te juro que te voy a compensar, te amo.
La beso.
- cuidate.
- lo haré, gracias.

El aire era frío, el otoño se acercaba... nos subimos al taxi, Emily, tenía los ojos un tanto iluminados, estaba realmente emocionada.
- gracias Mildred, eres una gran amiga. - me dice sonriendome.
- no hay de qué.

Llegamos, quedaba en el Soho...
Era un bar un tanto lúgubre... algo andaba mal.
- Emily... ¿estás segura?
- no, pero quiero intentarlo, si queres volver lo entiendo.
- no voy a volver, aunque sea procuro devolverte a salvo con Zac y Robert.

No tardamos en reconocer a Simonet, quien nos condujo detrás del escenario para ayudarla a cambiarse.
- el público es solo masculino, ¿donde nos trajiste?- le pregunta Emily a Simonet.
- ¿y qué pensaste por mundo de modelaje? Emily, es esto o nada.
- yo no voy a vender mi cuerpo, Mildred, ¿qué hago?.
- lo que vos quieras, lo que decidas está bien.
Tardo unos minutos en responder.
- lo voy a hacer, es ponerme una maya y salir a que me chiflen y luego me paguen. -dijo Emily decidida
- bien, suerte - le digo - no tenes que hacer nada que no quieras.
- exacto - dice Simonet.
Emily se puso la maya, le quedaba hermosa, tenía buen cuerpo. Y ya estaba lista.
- en 5 minutos empiezan, estás 3ra. - le dice Simonet- y perdón por no habértelo avisado, pensé que ya te podías imaginar - se la queda mirando un tanto apenada.
- esta bien, yo soy la imbecil que no se dió cuenta.
Le deseé suerte y me senté en una mesa junto con Simonet.
Pasaron las primeras 2, tenían talento y a los hombres les encantaban... llego el turno de Emily... se notaba su verguenza pero lo hacía muy bien, los hombres le empezaron a chiflar, que asco. Simonet le aplaudía y Emily nos sonrió. No duró más de 2 minutos, fue en vano y seguro la paga sería lo peor.

Ella salió, yo la esperaba afuera y la felicite.
- ¿estás bien?.
- se que suena estúpido, pero estoy feliz... logré animarme y me siento orgullosa de mí.
- mejor así, me alegro.
Le pagaron 2 libras, era obvio.

Salimos del bar acompañadas de Simonet que nos dejó unas botellas de cerveza y luego volvió al bar. Caminamos por un callejón hacia el centro hasta que un hombre se nos apareció por detrás, el alcohol se percibía a kilómetros. Acorraló a Emily contra la pared, ella comenzó a gritar y yo empecé a pegarle para que la dejara. Él sacó un arma la cuál hacía temblar, estaba realmente alcoholizado.
- andate y dejala, andate o te disparo - dice eufórico.
- no tenes por qué hacer esto, dejala en paz... no me voy a mover.
En eso se me acerca; no me da tiempo a huir, siento un fuerte dolor en la cabeza, Emily grita mi nombre y sé que comenzó a correr. Todo es negro después.

Holaaa, bueno acá les dejo lo que creo que fue un gran capítulo ¿? ¡Que lo disfruten!

Nuestro Propósito (Mildolyn)✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora