— Lo lamento.
La disculpa de Bella hizo que Matt volteara, no era su idea que se sienta mal. Solo quería que dejaran de verlo como si el fuera un monstruo sin corazón.
Él quería que sepan que su único deseo era saber que sería padre. Pilar aunque el quisiera negarlo no sostuvo la mentira mucho tiempo, a los cuatro meses le confesó que su hijo era de Paul.
Y aunque el tenia una sospecha y le doliera eso se quedó a su lado, no por ella. El niño no tenia la culpa de tener una madre tan... complicada.
— No era la culpa de nadie, cometimos errores Matt. Y yo.. no debí huir... no debí...
Matthew la abrazó haciendo que Bella se calle y cuando sintió ese cuerpo cálido junto al suyo se sintió... terrible.
— hiciste lo que debiste, agradezco al cielo y a quien mierda sea que no te haya pasado nada. Ni a ti ni a mi hija.
Noah y Violeta estaban aún parados juntos a ellos, la chica de cabello al igual que su nombre sonrió. No hablaba mucho solo lo justo y necesario para cada situación.
— extrañaba la forma extraña de tu hermano para expresarse, me hace recordar a cuando era una cría de trece.
Noah la observó, los ojos oscuros de su amada observaban la escena con demasiado cariño.
— ni cuando te propuse matrimonio reaccionaste así.
La chica lo observó enseguida y se río con delicadeza mientras miraba el anillo de color verde en su dedo anular.
— solo fue un anillo que pusiste en una hamburguesa, que por cierto casi me atragantó, pero en ese momento no recuerdo la palabra matrimonio.
Noah sonrió de lado y le extendió su palma como si esperara algo.
— devuélveme mi anillo...
— te lo doy si tu me devuelves mi virginidad.
Ambos se rieron y volvieron a observar a la parejita frente suyo.
— Tu hermano se arrodillara o esperará a que nos marchemos.
Susurró Violeta y Noah nego, sabia que estaba mal si ese hombre lo hacía pero quería verlo. Sabia que ni su hermano ni Bella lo dirían frente a ellos pero ambos esperaban eso.
— Quiero conocer a mi sobrina. ¿nos vamos, Il mio amore?
El chico le ofreció su brazo a la dulce mujer a su lado, ella solo lo tomó delicadamente mientras le daba un corto beso en los labios a su pareja.
— Vamos Mio caro.
Ambos dejaron la oficina dejando a esa pareja perpleja, no podían creer lo que vieron.
— ¿ellos nos acaban...
— si, nos ignoraron y tú deberías sentirte más indignado. Fue tu hermano.
— pues el está por ir a tu hogar a ver a su sobrina.
Matthew y Bella solo negaron mientras se alejaban. En los labios de ella una sonrisa dulce crecio.
— Noah le propuso matrimonio.
— eso no importa Bella, ellos ya están casados. — ella lo miró extrañada y el volvió a hablar intentando explicarlo — no casados de forma legal, sus almas ya están unidas. Ambos ya actúan como un matrimonio, se tratan como si estuviesen casados hace años. Por qué la verdad la forma en la que actuaron senti como si se conocieran de hace cincuenta años y ambos forman esa edad.
— Es hermoso, Noah si cumplió lo que le prometió.
— ¿qué?
La castaña no dijo nada y lo miró con obviedad.
— llévame a casa después, tu hermano estará ahí y tienen que hablar.
El hombre asintió y cuando quedó solo no supo que más hacer, ya todo parecía resuelto pero no todo era color rosa, al recibir el mensaje descubrió por qué.
— Carajo Will. ¿que hiciste?
ESTÁS LEYENDO
Si decido quedarme #1.5 𝓢𝓪𝓰𝓪 𝓢𝓮𝓷̃𝓸𝓻
RomansaBella Feraud estaba perdida, desaparecida, no había rastros de ella. Esa mujer se había esfumado de la faz de la tierra sin dejar una sola señal. No supe que hacer en ese momento. Pero luego lo supe. Nunca que tuve que haberla dejado ir. (*) SEGUNDA...