JongKey parte 8

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Abrí los ojos y vi a Key sonriendome
-¿Qué pasó? ¿Donde están todos?
- Nada sólo te desmayaste por tomar mucho alcohol y a los chicos le ayudaré a Euisoo a llervarlos a casa.
-Mnhhh -¡Rayos!- ¿Me puedes decir la hora?
-Son a las 3 de la mañana, así que vuelve a dormir aún falta que amanezca.
Se levanta de la cama y lo detengo firmemente.
-Espera, quiero que te quedes conmigo... Titubee.
-Ahora regreso cariño, no pienso tardar mucho.
Jale con fuerza e hizo que se cayera a mi lado de nuevo

-Dije que te quedas -hice una voz de autoridad-

Tomo su mejilla lentamente y le doy un beso en ella el sólo se queda quieto, empiezo a darle besos en el cuello subo la cabeza le doy besos en la frente y Key sigue estando inmóvil y sorprendido, continuo dándole besos en la mejilla y en la cara continuo dándole más besos en cada esquina del rostro, me siento al borde de la cama y empiezo a quitarle el suéter que trae,yo en cambio me quito el mío y empiezo a besar la yema de los dedos que están muy suaves y temblorosas.

Desabrocho los pantalones negros que trae continuo besándolo en el cuello él me pone encima de él con un movimiento brusco
-Vaya hasta que cooperas -le digo con una sonrisa maliciosa.

Me lanza una mirada seductora y hace que me excite más, kibum me empieza a quitar la ropa que me queda hasta quedarnos completamente desnudos. Me siento en su miembro y lo introduce lentamente en mi, gimo de placer.
Realmente lo estoy haciendo con kibum....
Movia mis caderas en círculos amaba escuchar el gemido de Kibum hacia que yo me excitara lo doble.
El me bajo de sus piernas y así que era turno que le tocara arriba, se sentó lentamente...
hice que se metiera más en mi es muy angosto mi novio.
Me recostó lentamente en la cama mientras seguía dandome besos apasionados yo me agarre fuertemente de la sabanas.
Key no andaba con bromas abrí mis piernas y deje que Key lo metiera lentamente no podía dejar de gemir estaba punto de llegar al éxtasis
Kibum eres mío -grite para asegurarme de que escuchara
-Vente dentro de mí seguí gritando.
Mientras el lo metía cada vez más y más.
Sólo resonaba en cada rincón de la pared nuestro gemidos
Lo mire a los ojos estaba muy sudado y soltaba suspiros de placer.
-Eres mío Kibum -Murmuré
-Eres completamente mío.
Esto es de los mejor por fin Kibum era mío y de nadie más

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