Ella quería tener todo el poder. Tener SU poder. Y, haría lo que fuera para conseguirlo. Felix quería salir de aquel sitio. Pero no podía comunicarse con el. La actitud de chico serio y afectado volvió a Hyunjin, pasaban los días, y siempre se repet...
- Hyunjin puede controlar la piedra.- aseguro Chan.
En la habitación reino un silencio extraño. Hasta que el peli negro decidió hablar.- ¿Q-Que yo que?- pregunto incrédulo.
Chan suspiró.- Veamos, no puedes controlarla en sí, con ella puedes controlar todos los poderes de tu familia durante generaciones, los cuartos elementos.- explico.
- ¿O sea que nuestro padre en realidad es bueno, y mamá es la loca?- pregunto Yeji, sorprendida.- La historia que me contaron a mí fue totalmente diferente, un royo raro de que Kam quería la piedra para él, pero era de nuestra familia... una cosa extraña.- suspiro.- Lo que aún no entiendo que como mierdas Hyunjin puede hacer eso, si apenas puede controlar su ira, y segundo, ¿de qué nos ayuda eso? ¿Vamos a matar a mamá o que?
- Supongo.- hablo el alto.- No hay otra salida, esa mujer está loca. Lo único que quiere es poder, hasta papá quiere matarla..- razonó Hwang mayor.
- ¿Y como mierda vamos a hacer eso? Pregunto.- murmuró Changbin, totalmente confuso.
- Eso ya lo veremos más tarde..- murmuró Nayeon, levantándose.- Ahora, todos a prepararos para las clases, hoy es un día importante.- dijo, dirigiéndose a la puerta.
- ¿Qué pasa con hoy?- pregunto Yeosang.
- Tenemos entrenamiento con Su a primera hora.- explico la castaña.
- ¿Era hoy?- río Wooyoung.- Nos jodimos..
En cuestión de minutos, casi todos abandonaron la habitación, menos Minhee que seguía con la cabeza entre las manos. El otro peli negro meditaba mentalmente lo que pasaba tanto dentro de su cabeza como fuera.
Hyunjin le indicó al rubio que se preparara para clase mientras él hablaba con Kang. Lee asintió y se metió al baño para no escuchar su conversación y para peinarse. Hyunjin se acercó a su amigo, y se sentó frente a él en la cama.
- Oye, si quieres puedes contarme lo que a pasado.- le dijo con una sonrisa.
Minhee levantó la cabeza, suspirando y asintió.- Bien, pues verás..Serim, Hyeongjun y yo hicimos un...trío.- desvelo, con la mirada baja.
Hyunjin abrió los ojos, y un nudo se formó en su garganta, sin dejarle responder. Suspiro sorprendido y agarró aire.- ¿Cómo así..?- murmuró.
- Mira, ni yo mismo sé que pasó allá, solo sé que fue incómodo, pero especial..- suspiro el otro. Se levantó de su silla.- Iré a prepararme, te aconsejo que hagas lo mismo.
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Felix y Hyunjin se encontraban bajando a la primera planta para poder desayunar algo antes de las clases. Iban agarrados de la mano, mientras mantenía un cómodo silencio.
Llegaron al lugar y se sentaron junto al resto de sus amigos, ya comiendo. Estuvieron un rato allá, hasta que tocó la campana, avisando que las clases empezaban.
Todos, se dirigieron al patio exterior, donde normalmente hacían las prácticas de los poderes, en aquel gran campo verde, vallado por todos lados. La profesora ya se encontraba en un lado, mientras los llamaba con la mano.
- Buenos días a todos, espero que amanecieran bien..- dijo la mujer, alegre. Algunos de ellos suspiraron.- Bueno, hoy haremos un entrenamiento normal, que cada uno vaya a practicar sus habilidades.- finalizo.
Cada uno se fue para un lado, preparándose tanto mentalmente cómo físicamente. La mujer se alejó de los jóvenes, para que pudieran practicar tranquilos.
Hyunjin se alejó hacia un lado, no muy lejos de Felix. El rubio se encontraba con los ojos cerrados, tomando un momento de calma y preparándose. Cuando sus ojos se abrieron, solo uno de ellos era morado, como normalmente eran. Comenzó con algo que se daba bien, la telequinesia.
El resto de estudiantes también practicaban por su cuenta. Hyunjin se encontraba halando consigo mismo, aún recordando lo que el mayor le había dicho. ¿Realmente podía controlar todos los elementos con aquella pierda? Suspiro cansado, y aquel día simplemente se dedicó a encender pequeños fuegos y hacerlos levitar. Nada de otro mundo.
Cuando la práctica acabo, Hwang mayor estaba a punto de y acercarse a su novio e irse juntos al descanso, pero la profesora fue más rápida, y se acercó a él con rapidez.
- Señor Hwang, quiero hablar con usted.- dijo con una sonrisa amable. Hyunjin asintió.- Venga esta tarde a practicar aquí, sobre las siete, antes de cena. Quiero enseñarle un par de cosas.
Hyunjin, un poco extrañado, asintió y luego se marchó junto a sus amigos y su novio. Felix le agarraba de la mano discretamente, mientras sonría leve.
Yeosang se acercó por detrás y pasó su brazo por los hombros de cada uno, separándoles.- ¿Cómo van, tórtolos?- pregunto alegre, no muy fuerte para que los demás no escucharan.
Hyunjin abrió los ojos.- ¿Cómo?
- ¿Se creen que soy tonto o que? Sé que tienen algo, desembuchen.- inquirió.
Felix le mando una mirada fugaz a Hyunjin, que este entendió rápido. El mayor suspiro, armándose de valor.- Bien, pues.. Somos pareja..- no parecía muy convencido, pero sonrió nervioso.
Felix sonrió enternecido. Yeosang se apartó de ambos, mientras sonreía en grande.- Ya lo sabía, soy muy sabio. Bien, les dejó solos.- le guiñó un ojo al rubio y se marchó.
Ambos volvieron a agarrarse de las manos, mientras reían.- Eso fue extraño.- opinó el menor. Se calló unos segundos.- ¿Vamos a la cafetería? Hoy las cocineras hicieron tarta de platano.- sonrió en grande.
Hyunjin sonrió de igual forma y asintió, llevando hacia el lugar a su pequeño y tierno novio.
