Capítulo XXVIII

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Su cuerpo se sentía adolorido como si hubiera recibido un sinfin de golpes. Ni siquiera podía levantarse de la silla en la que estaba colocado sin ninguna atadura. Comenzó a inspeccionar el lugar en el que estaba.

Una vieja, polvorienta y mal cuidada cabaña. Solo había una salida, las ventanas estaban bloqueadas con tablones y en el fondo seguia el cuerpo del cazador. Stiles no comprendía lo que estaba sucediendo. De pronto escuchó pisadas que se dirigían hacia la puerta así que fingió seguir dormido.

La puerta se abrió y las pisadas comenzaron a dirigirse hacia él. Debía hacer algo, pero su cuerpo se negaba a responder.

- Sé que estás despierto. - reconoció la voz.

- ¿Tío Steve?

- Así es Stiles, soy tu tío Steve o quizás deberías conocerme por quien soy realmente. Soy Steve Campbell el responsable de la muerte de tus padres.- Stiles lo vio con horror.

Eso no podía ser posible. Steve era el mejor amigo de sus padres. Él los apoyaba en todo incluso cuando los demás miembros del clan les daban la espalda. Lucho con ellos en varias ocasiones protegiendo su espalda y había sido él quien los había asesinado.

- Pero tú...

- Lo sé, yo su mejor amigo, quien cuido de ti y procuró tu bienestar los asesine. Esa es la verdad Stiles, acéptalo.

- No, debes mentir, tú no podrías...

- CLARO QUE SI PODRÍA STILES. - le gritó. - Odiaba tanto a tus padres y tenía que disfrazar ese odio bajo una sonrisa falsa y una amistad que nunca existió.

- Ellos jamás te hicieron algo para que tú tomaras esa decisión.

- Te equivocas. Tus padres me quitaron todo Stiles. Quieres saber lo que pasó realmente entonces escucha atentamente. Tu padre y yo crecimos juntos pues nuestros padres eran grandes amigos. Noah siempre fue un alfa fuerte mientras que yo era el hijo que le daba vergüenza a su padre. Era débil incapaz de defenderme por mi mismo, pero tu padre siempre estaba allí para defenderme. Si, lo considere mi mejor amigo hasta el momento en el que la guerra estalló. Fue entonces que conocimos a tu madre, Claudia. Yo amaba a tu madre Stiles, pero cometí el error de ocultar mis sentimientos y fue entonces que Noah se quedó con ella. Fui el padrino de la boda que le puso fin a la guerra. - Steve hizo una pausa y tomó otra silla para sentarse cerca de Stiles. - Me costó mucho aceptar, pero lo logré y fue entonces que la conocí a ella. Su nombre era Gelda y pertenecía a un pequeño clan que se había unido al clan. Al igual que yo heredaria el liderazgo de su clan y créeme era asombrosa en toda la extensión de la palabra. Iba a proponerle matrimonio, pero si padre cometió un error. Se habían metido en una pelea con un grupo de cazadores y enviaron un mensaje de auxilio. Pero tu padres tomaron la decisión de no intervenir. Me negué por completo y fui yo solo en su auxilio. ¿Sabes que fue lo que encontré?

- Yo...

- No encontré nada mas que cuerpos calzinados. Mi querida Gelda había sido masacrada junto a todo su clan. Tus padres dejaron que ella muriera sabiendo que yo la amaba. Me dieron la espalda cuando más los necesitaba y fue entonces que me di cuenta que ellos no merecían ser nuestros líderes. El clan merecía un líder que no se hiciera atrás en las batallas. Mi padre tenía razón al decirme que las ideas de igualdad de Noah y Claudia sólo eran una pérdida de tiempo. Pasé mucho tiempo planeando la forma de ponerle fin a tu familia, pero sabía que necesitaba de apoyo. Deucalion era el hermano menor de uno de nuestros clanes más fuertes y anhelaba tener el poder y posición de su hermano mayor. ¿Quién crees que se lo dio Stiles? Fui yo, asesine al hermano de Deucalion y he admitir que fue demasiado fácil. Claro que no esperaba que su propio clan lo culparia de tal hecho y terminarían por expulsarlo. Estaba solo de nuevo hasta que ese viejo de Augusto apareció. Habia conspirado con el padre de Noah para asesinar a la familia de Claudia en ese terrible incendio o al menos eso pensó. He de amitir que fue de mucha ayuda, pero era un completo inútil. Cuando tus padres comenzaron a notar la amenaza fui yo quien les dio la idea de entregarte a Talia para que ella te cuidara. Creyeron en mis palabras, vaya error.

- No...- Stiles estaba a punto de soltar sus lágrimas.

- No seas tan cobarde Stiles. - se burló. - No tome en cuenta que la vieja Hannah iría con ellos. La maldita te salvó la vida y me dejó una carga. Al principio creí que podía ser capaz de criarte como mi propio hijo. Creí que talvez podría manipularte cuando tu tiempo llegará, pero resultaste una mezcla perfecta de los ideales de tus padres. Y es por eso que debo eliminarte.

- No puedes hacerlo, tu pacto...

- Si, el famoso pacto de sangre. ¿Qué crees? Tus padres me libraron de él como muestra de buena fe hacia nuestra amistad, grave error pues de ser así quizás no hubiera capaz de colocar esa bomba en su auto.

- Eres un maldito. - Stiles le escupió en el rostro.

- Pero sabes algo. - Steve se limpió. - Antes me gustaría verte sufrir un poco.

Steve se levantó y fue por una computadora. Lo colocó frente a Stiles y de pronto pudo ver a su manada de rodillas mientras un beta se acercaba con un arma en sus manos.

- Despidete de ellos Stiles.

- No, espera.... - uno a uno fuero cayendo al suelo. Stiles gritaba, pero no pudo hacer nada. De pronto la cámara enfocó a Derek. Stiles pudo sentir como el lobo se despedía de él. Y entonces, el disparo se hizo presente. Derek cayó al suelo sin vida y está vez Stiles no estaba allí para salvarlo. -¡DEREK! - gritó Stiles de forma desgarradora.

- Tranquilo, pronto te reunirás con ellos.

- MALDITO. - Stiles intentó abalanzarse sobre él, pero su cuerpo seguía igual.

- Tal parece que el veneno de Kanima y mandrágora funciona muy bien en ti.- Sin embargo, Stiles seguía intentando y sus ojos comenzaron a parpadear hasta que se encendieron por completo.

- Ahora verás.

-No haría eso si fuera tú. - depronto la cámara enfocó a otro beta que sostenía a Dylan en sus brazos. - No querrás que el muera también. - Steve aprovechó que Stiles se distrajo y le inyectó más veneno.

- Ahhhh. - Stiles se quejó del dolor.

- Bien, supongo que será mejor acabar con esto de una vez por todas. No te preocupes por Dylan cuidare bien de él y solo espero que él sea más fácil de manejar de lo que fuiste tú. Hasta nunca Stiles.

Steve estaba a punto de dispararle, pero la puerta fue abierta de golpe.

- Tú.

Un rey peligroso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora