who killed him? ; sunghoon

14

El rector venía entrando junto a la maestra de la clase de Seol y Sunghoon, tenía que salir de ahí pero no sabía como lo haría.

Dios mío y ahora, ¿que hago?, pensó.

Jake no quería que fuera atrapado pero no podía hacer mucho, aunque tal ves un susto podría salvar a Sunghoon.

Jake sonrió y salió del salón, mientras tanto Sunghoon intentaba pensar en algo que pudiera hacer para salir, había una ventana en ese salón, pero sí salía podría romper su celular o su pierna, rectoría estaba en el segundo piso.

Mientras tanto en su casa Seol se había quedado dormida y de la nada había aparecido en un hospital.

–Jake –susurró al ver a el chico con ahora ropa casual, un simple pantalón de mezclilla y una polera negra con una camisa de cuadros arriba de ella.

Se acercó a Seol y ella se quedó quieta en el lugar, al acercarse al oído de Seol susurró en este.

–Mis manos frías urgando en corazones cálidos rompiéndolos y dejándolos tirados en una fría oscuridad eterna.

Al decir eso Seol lo miró, el mantenía una expresión de seriedad y de la nada Jake estiró su mano, otra vez quería que ella la tocara más sin embargo fue despertada por el sonido de su celular.

–¿Hola? –soltó somnolienta mientras se frotaba los ojos.

–Voy para tu casa ya –agregó Sunghoon al otro lado de la línea y colgó la llamada.

Seol confundida tomó camino hacia la cocina, tomó lo que sobró de la comida lo cual al parecer habían sido macarrones con queso y subió a su habitación con esta y una lata de coca.

Comía tranquilamente mientras veía una serie en su computadora cuando Sunghoon entra al cuarto de Seol todo sudado con un suéter rojo.

–La conseguí –exclamó jadeando y se tiro en la cama cansado.

–¿Qué conseguiste? –cuestionó Seol mientras tomaba de la lata de coca.

–La autopsia de Jake –confesó tratando de normalizar su respiración.

Seol abrió los ojos sorprendida y miró a Sunghoon el cual le dio su teléfono.

–En galería, ahí marca el cómo murió –explicó y cerró un monto los ojos.

–Envenenamiento –añadió Seol mientras veía el móvil de Sunghoon.

–Tenemos que saber quién fue y porque rectoría lo está ocultando –agregó Sunghoon y Seol asintió.

–Es alguien que tiene poder, deberíamos de comenzar a interrogar a los sospechosos, tal vez puedan darnos alguna pista o se les salga algo –comentó Seol y Sunghoon asintió.

–Seol recuerda –exclamó Sunghoon aún con los ojos cerrados–. Una vez está en tu cabeza te conviertes en una raza nueva extraña, una forma de vida que adora fantasear sobre su propia extinción.