Narra Elizabeth
Asentí y me levante de la cama, traía puesta solo mi ropa interior y aunque no habíamos hecho nada tenía que acostumbrarme a dormir así con él de ahora en adelante. Me puse mi falda y otra blusa, salí de la habitación luego de entrar al baño y hacer lo que tenía que hacer, camine a la cocina y ahí estaba él, se veía demasiado apuesto.
Después de comer el desayuno, dónde él me estuvo contando sobre lo que haría los próximos días, yo estaba cambiandome de ropa.
— Me gustaría verte esta semana.
— Esta semana tengo exámenes - lo mire - lo siento...
— Cierto, olvidaba la semana de exámenes.
— ¿Iras por nosotros esta semana?
— El miércoles - él habló desde el sofá y gire a verlo de nuevo - tu papá ira el lunes, tu mamá el martes, yo el miércoles, jueves Michelle y el viernes el chofer.
— ¿Podrias ir a dejar primero a Jackson y después a mi?
— Si - se acercó a mi - ¿quieres hacer algo?
— Ya lo pensaré - sonreí de lado -
— Bien - sonrió - vamos a dejarte a casa de tu amiga antes de que llegue tu papá.
Asentí y salimos, no sin antes besarlo como lo hacíamos ayer, subimos a su auto y él comenzo a conducir en dirección a casa de Amy.
Estaba con ella en la habitación y ella estaba como loca.
— ¿Qué hicieron? - sonrió -
— Pues... Solo hablamos y vimos una película.
— ¿De verdad? - preguntó decepcionada -
— Si - sonreí - pero estuvo bien... Era como lo imaginé, un hombre que se hace ver imponente, duro y frío, pero en la intimidad de su casa, o en este caso su departamento, era totalmente diferente.
— Hmmm - sonrió - o tal vez esta esperando a tomar confianza y sacar su lado candente.
— Desearía verlo - reí - aun que aún no estoy lista.
— Toma tu tiempo - sonrió -
— Anoche... Bueno en la tarde - mire mis manos y sonreí - estábamos en la sala, él me estaba besando y yo estaba sentada en sus piernas, de mi salió un yo que no conocía... Más apasionada.
— Son las hormonas - soltó una risa y me miro - estamos en esa edad.
— Aparte de eso - gire mis ojos - al parecer a él le gusto eso porqué comenzo a moverse un poco y yo respondía a sus caricias, me sentía tan... Tan excitada.
— ¿Pudiste sentirlo?
— Si - sonreí -
— ¿Y?
— Es la primera persona que ha estado entre mis piernas así que no se de eso... Pero era grande - ladee la cabeza un poco - presiento que me dolera.
— Ese día necesitas estar relajada y no contrarte - ella habló - o sino dolerá más.
— ¿Cómo lo sabes? - la mire -
— Leo libros - me miro - duh.
— Bien por ti - reí -
Paso el fin de semana, mi mamá me había preguntado por como me había ido en casa de Amy y que habíamos hecho, tuve que inventar todo, claro que Amy sabía lo que iba a decirle a mis padres.
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Oh my daddy
Fanfiction¿Cómo fue posible que esto llegara a pasar? Lo de él y lo mío era imposible, estaba mal, rompía demasiadas reglas de la sociedad... Rompió mi amistad... Pero es que no podía negarme a él, a su mirada tan dominante, sus caricias que me hacían tocar...