Capítulo 19

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Dejar ir a alguien es difícil, más cuando has pasado mas de mil años con esa persona codo a codo, peleando a diestra y siniestra contra todo aquel que intente derrumbarnos, porque si te metías con una te metes con ambas.

Como ya dije anteriormente, las veces que discutíamos era escasas, pero no hacia falta discutir para saber que la otra esta enojada por algo, usábamos la ley del hielo.

Esa irritante ley para el que la sufre, divertida o tortura el que la haga. Hace siglos que comenzamos a usarla, al principio solo era para molestar o de broma, pero con el tiempo paso a ser algo mas grande.

Preferiría ignorarla por mil años a que sufra por algo que estoy muy segura que sufría, que talvez no pueda volver a ser la misma después de esto, solo espero que Alice la ayude a seguir a delante, sin mi.

En todos mis años nunca había sentido tan gratificante estar en un bosque, con los pájaros que cantaban dulcemente, el sonido del agua corriente de un pequeño rio al norte de donde me encuentro, la placentera brisa que soplaba moviendo delicadamente las hojas de los arboles y por momento alborotando mi cabello.

Es.... No tengo las palabras para describir tanta belleza que mis ojos ven, y me siento terriblemente arrepentida de no haberme dado cuenta antes, pero creo que ahora que mi muerte se aproxima es que veo todo lo que me perdí.

La inmortalidad. Suena extrañamente divertida, pero cuando te centras en cosas como esas no tienen tiempo para apreciar lo que esta en tus narices.

Suspire, aspirando el oxigeno tan puro que la naturaleza me regalaba, en serio extrañaría esto.

Mis pasos resonaban entre tanta tranquilidad, acababa de hablar con el, solo digamos que no fue la mejor conversación del mundo. No mientras intentemos matarnos mutuamente.

Sus palabras todavía resonaban en mi mente. Acepto, pero con una condición, que después de todo lo que a pasado no me sorprendería que me pidiera eso.

Arlet ya me había confirmado su parte, pero cierta parte de mi me decía que Kai no lo iba a dejar así por así, pero luego recuerdo que el nunca se ensuciaría las manos, pero algo como esto dudo que se lo pierda..

Con arlet y Kai de mi parte ya podría hacerlo, pero creo no tener la fuerza suficiente para ser el ancla para que Jasper vuelva.

Hacía muchos años Arlet y yo habíamos ido a una tribu azteca que contaban historias fascinantes, pero había una en particularidad que nos llamo la atención, 'La maldición aciaga'

Decían que ocurría cada cien años, todo comenzaba con un dolor punzante en el cuerpo y un cansancio extremo, luego en tu mano crecían una grandes y feas venas negras, al principio son solo pequeñas venas que fácilmente se camuflan con las nuestras, que aparecen en tu piel para luego crecer por ella, como un vacío oscuro y doloroso consumiéndote.

La leyenda decía que quien la tena solo podía ser un tipo de ser sobrenatural, las sirenas. Contaban la historia de la primera sirena a la que le ocurrió, todo paso por tener un odio profundo a los de su especia pero sobre todo a ella misma, decía que el encargado del clan le había puesto como castigo que le pidiera de rodillas, que le suplicara dejarla en el clan. Mas no lo hiso, se mantuvo con su dignidad, por eso el líder decidió exiliarla del clan y que ningún otro clan la deje entrar al suyo, dejándola completamente indefensa ante los enemigos de su antiguo clan.

Pero eso no fue lo peor, el líder le había echado una maldición, mientras mas tiempo pasase lejos del clan la oscuridad la consumiría hasta el punto de matarla lentamente, pero mientras tanto un dolor inhumano la invadiera haciéndola sentir como el fuego del infierno la quemase.

El quería venganza, y la obtuvo cuando esta ya no pudo soportar mas el dolor que tuvo que suplicarle a un hombre de la aldea vecina para que la asesine. El líder quería que se tragara su orgullo y que lo complaciera, y como no lo hizo decidió darle el peor de los castigos.

Nunca creí que esta leyenda fuese cierta, simplemente creí que patrañas de ese viejo para llamar la atención, ahora puedo tragarme mis palabras sin rechistar.

Hasta donde recuerdo el hombre dijo que esta paso hace muchos años, y que pasaba de generación en generación. De ella habrá saco Arlet su orgullo?

No recuerdo cuando comenzó, solo sé que cuando pude salir de la mente de Jasper ya lo tenia. Debió hacer ido por el esfuerzo que hice para entrar en su mente...

Con un nudo en la garganta me cubrí las manos, en estos momentos lo que menos necesito es que los Cullen me pregunten por mi mano.

Hablando de ellos, se que e sido un poco brusca o grosera con ellos, no daré una excusa no porque no la tengo sino porque en verdad lo fui y me arrepiento, pero desear algo que nunca va a pasar es solo, una fantasía.

Solo deseo que después de esto me puedan perdonar.




Siren - Jasper Hale |  TWILIGHT✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora