—Espero que te hayas divertido hoy—Ares y Macaria caminaban hacia afuera.
—Bueno tengo una pintura nueva y un vestido nuevo pero te mentiría si te digo que fue una noche divertida.
Ares la tomó de la mano y llevó por un pasillo secreto.
—¿A donde vamos?—le preguntó ella.
—Lo que dijiste fue un golpe bajo, no voy a permitir que te aburras, no estando conmigo—Ares se aseguro que no hubiera nadie en el pasillo, abrió un portal y fueron a un callejón.
—¿Donde estamos?–pregunto ella.
—En Galway, vamos a un pub—Ares apresuro el paso—esta por llover.
Macaria se sentía tan feliz por estar con Ares, era exactamente como lo recordaba.
—Espera—le gritó ella—¡déjame quitarme los tacones!
Ares se detuvo y seguían buscando el lugar ideal para tomar la fiesta. Empezaron a caer las primeras gotas de lluvia.
—Ven por aquí.
Entraron al pub y Ares pidió dos cervezas, se sentaron en una mesa en la esquina y brindaron por la ocasión.
—Necesito que me prometas algo—Ares le tomo la mano—, no importa lo que pase, siempre seremos nosotros mismos.
—¿A que te refieres?—ella no comprendía realmente lo profunda que era la petición de Ares.
—Que nunca cambiaremos esto que tenemos¿sí?
—Lo prometo—le sonrió.
Volvieron a brindar y le dieron fondo al tarro.
—Bailemos—Macaria lo llevo a la pista y había tocando un trio irlandés.
No sabían cómo moverse al ritmo de la música tan distintiva del lugar así que solo miraban a las demás personas e imitaban los movimientos, Ares se quitó el saco y lo lanzó a la mesa donde ambos habían estado antes. Esa era la clase de relacion que Macaria siempre quiso tener con Tánatos, evidentemente no lo había logrado. Afuera estaba una tormenta con rayos azotando en las calles. Pasaron unas horas más y Macaria fue a la barra a pedir más cerveza, se sentía tremendamente sedienta.
—Ni una mas para usted señorita.
—¿Por qué?—preguntó ella molesta.
—Políticas del lugar, las mujeres no toman más de 5 tarros.
—Eso es una estupidez—le dijo Ares—usted es estupido.
—¿Como me dijiste?—preguntó el hombre molesto.
—Estúpido, esta perdiendo de vender por una estupida política.
El cantinero le lanzó un puñetazo que Ares detuvo fácilmente y le lanzó un puñetazo tirándole un diente.
—Hay que irnos—Macaria lo tomo del brazo, agarró de la mesa las cosas que pudo y dejó unos cuantos billetes en la barra.
Corrieron bajo la lluvia mientras escuchaban balazos provenientes del pub. Tomaron atajos por callejones sin que nadie los viera, Ares reía mientras corría porque no tenía sentido que escaparan, eran Dioses, no los podrían matar, y tenían dinero suficiente para pagar.
—Creo que ya estamos seguros—le dijo Ares.
Ambos estallaron en risas mientras la lluvia los mojaba.
—¿Bailamos?—Ares la tomo por la cintura y comenzaron a bailar
Ares tarareaba un sonido para tener como seguir un ritmo, Macaria sentia el corazón de Ares latir y lo miró a los ojos. le acomodó el cabello y le sonrió.
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Tolerate it (Macaria x Tánatos)
ФэнтезиSi todo está en mi cabeza, dímelo ahora dime que me equivoqué de alguna manera sé que mi amor debe celebrarse pero tú lo toleras...