La fiesta era grande con muchos invitados. Era una reunión con personajes de todo tipo, Macaria reía de alguna anécdota que contaba Poseidón aunque secretamente buscaba esos ojos tristes con los que había sido muy dura.
—Mi amor—le dijo Tanatos.
—Cariño—ella respondió—¿nos disculpan?
—Mis padres quieren entregar la casa en la que viviremos.
—Ah, ¿siguen con eso?
—Solo aceptala, después si quieres regresaremos.
Nix empezó a hacer sonar una copa para que todos escucharan.
—Escuchen por favor—anuncio ella.
—Estoy muy feliz por esta unión de mi hijo y la bella Macaria—dijo Nix acaparando todas las miradas.
—No puede ser menos escandalosa—pregunto Hades acercándose al oído de su hija.
—Silencio papá—dijo ella en voz baja.
—Hace años, mi hijo me dió los planos de un castillo pensando en su chica ideal y en los hermosos hijos que tendría con ella—Nix levantó una llave en el aire—lo mandé a construir y hoy se los quiero entregar.
Macaria se acercó a recibir las llaves ante la mirada extrañada de sus padres.
Perséfone la aparto de los invitados y le dijo:
—¿Te vas de tu reino?
—Así es mamá, solo unos meses.
—¿Por qué no me lo habías dicho?—Persefone se sentía realmente mal por qué su hija no le había contado las decisiones que tomaba.
—Porque no es como que me vaya para siempre.
—No puedes irte, debes reinar aquí.
—No te ofendas mamá pero no hago nada aquí y esto sería vida de pareja solos.
Tanatos miro la escena y fue a rescatar a su esposa.
—¿Quieres bailar?—le preguntó Tanatos.
Macaria asintió y fueron a la pista.
—¿Ella que quería?—Tanatos sonreía a los asistentes fingiendo que no pasaba nada.
—Bueno mis padres no sabían de la casa y están algo sorprendidos por no decir molestos.
Él le dió una vuelta y no paraba de hacer contacto visual con ella.
—¿Y tu? Estás bien con irnos—la acercó más a él.
—No es para siempre ¿Cierto?
—Nada es para siempre cariño—la cargó por la cintura—hay que darles a estos estirados una lección de baile.
Bailaron, en parte para evitar a los invitados y en parte porque no querían dejar de estar juntos.
El vestido vaporoso de Macaria se movía delicadamente ante los pasos de baile de Tanatos. Ahora estaba segura que él era su primera opción, que no podía fallarle. Vio pasar una figura que reconoció en cuanto se acercó a Nix.
—¿Invitaste a Leteo?—le pregunto a Tanatos cuando la vio.
Él volteó y le sonrio. La joven diosa también iba de blanco y al igual que Macaria llevaba flores en el cabello.
—Ella es mi mejor amiga, deberías salir con ella.
—¿Por qué haría algo como eso?—Macaria levantó una ceja.
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Tolerate it (Macaria x Tánatos)
FantasíaSi todo está en mi cabeza, dímelo ahora dime que me equivoqué de alguna manera sé que mi amor debe celebrarse pero tú lo toleras...