Tolerate it (Macaria x Tánatos)

Capitulo 13

Macaria y Tanatos se mudaron a la Tierra de nuevo. No quería saber nada de su familia y para ser sincera consigo misma por primera vez estaba bien fuera de los Campos Elíseos. Su abuela la había ido a visitar lo cual le traía paz. Demeter era una excelente abuela lo cual sorprendía a todos.

—No puedo creer que tus padres usaran ese sucio truco contigo—le dijo Demeter—ellos te dieron los Campos pero solo para que los cuides no para que los reines.

—Me quieren mantener contenta diciéndome que soy reina y no soy reina de nada.

—¿Qué tal estas con tus poderes?

—Preferiria mostrartelos

Macaria se acercó al suelo y solo con un movimiento de sus dedos y girando la muñeca hizo crecer todo un jardín, Demeter no daba crédito a lo que estaba viendo, su nieta era realmente especial.

—Tienes talento, no necesitas esforzarte nada.

—Espera...

Ella movió dos dedos y todo se volvió cenizas.

—No lo puedo creer eres muy buena en esto.

—He tenido tiempo en los campos Elíseos para practicar

—Ese tiempo deberías usarlo para tener hijos, ¿cuándo piensan tenerlos?

—Quizá pronto, estamos en un buen momento y siempre he querido criar a mis hijos en la tierra—Macaria miro a Demeter—, ya sabes como niños normales.

—Claro porque es muy normal que los niños tengan alas y poderes.

—Mi hijo no tendrá alas pero volará, lo he visto en mis sueños, pero aún no es tiempo

Macaria había visto a su hijo en sueños, sabia incluso de que color eran sus ojos y su piel.

—¿Qué esperas entonces?

—Tanatos no está listo yo tampoco, quiero que sea el momento perfecto. Ahora mismo estoy en una situación tensa con mi familia...—ella recodo que Kerr y en general la familia de Tanatos no les hablaban— la familia de Tanatos tampoco pone mucho de su parte.

Demeter puso semblante serio, trato de ser dura con su nieta para que entendiera lo que estaba por decir.

—Si te soy sincera, nunca llegará ese momento, siempre habrá algo que se interponga pero debes aprender que lo que tu quieres depende de ti.

—Estoy acostumbrada a esperar.

—¿Cuantas veces te ha servido eso? cuando te casaste fue porque alguien más te empujó a hacerlo porque si fuera por ti no lo habrías hecho—Demeter la miro a los ojos, curiosamente no le recordaban a Perséfone.

Perséfone tenía un carácter impetuoso y le gustaba demostrar que cuando hacía algo era el momento y el lugar. También era valiente. Por otro lado Macaria era más tranquila, se dejaba fluir y también influir.

—Si quieres algo...—concluyo Macaria—hazlo posible.

Después de la plática pasaron los días, una mañana llegó Iris dando nuevas noticias de Perséfone.

Querida hija:

Estoy tratando de arreglar todo lo que pasó y eso incluye arreglar mi relación contigo, no quiero que creas que eres inútil. Eres la Diosa más capaz y si al caso tu padre y yo te dimos los campos Elíseos sin dárselos del todo fue porque queríamos mantenerte controlada, lo cual funcionó hasta que dejó de funcionar. Ven a casa trae a tu esposo y te prometo que les daremos los Campos Elíseos por completo.