BNHA: Nueva Generación

Un día de clase..."cotidiano"

-Me...-empezó una voz con tono quejajumbroso -¡ABURRO!... Me cago en todo... parecen clases de instituto corriente...

-¿Esta por empezar la segunda hora de clase y ya te estas quejando Chihiro?- preguntó Kenji mientras guardaba los libros de matematicas para sacar los de ingles antes de que llegara Present Mick.

-Animate anda, que a ti el ingles se te da bien ¿no?- Yune trató de levantarle los animos a la chibi cabezóna llorona rubia.

-¡Pero no asi!- se quejó -Me gusta el ingles cuando quiero cantar... PERO NO CUANDO ME TENGO QUE HACER UN PUÑETERO WRITING- se quejaba mienras le salían lagrimitas y se daba en la frente con su libreta de lengua... dandose cuenta de algo -¡MIERDA! ¡Encima no he sacado el cuaderno de mates durante la hora anterior, lo he apuntado todo en la portada del de lengua!- dejó caer la cabeza en la mesa.

-¿Cuando dices todo te refieres a los diez primeros minutos de clase?- le preguntó Yune sentada en la mesa de Chihiro ojeando los escasos apuntes de su compañera.

La rubía cogió el cuaderno y paso la pagina por donde había apuntes sobre el indice del libro.

-He visto piedras más inteligentes Chihiro Jirou- habló la Midoriya esta vez leyendo por encima el resto de los apuntes.

-Vete a la mierda- replicó la mencionada.

Yune suspiró. Le dio un par de palmaditas en la cabeza y se fue a hablar con Yei, Kenji y Setoshi.

Pasaron un par de minutos y Present Mick no se presentaba todavía en la clase.
Se estaría retrasando.

Yasu estaba leyendo un librito en francés llamado "L'etranger".
Noro y Kishi jugaban a las cartas.
Satoru hablaba con Fumio y Tadashi.
Kenzo y Asa hechaban un pulso.
Akane adelantaba deberes en total silencio.
Dai estaba esperando, con el menton apoyado sobre sus manos, mirando hacia el frente.
Akira hablaba con Grace sobre como mejorar su traje.
Y finalmente... Kasumi estaba dormida.
Pero nadie se dio cuent hasta que del cansancio a la chica se le cayó la cabeza encima de su estuche.

Algunos la miraron.

-Vamos a tener que despertarla o podría llevarse una buena bronca- dijo Yei.
-¿Que hace Kasumi por las noches para venir tan reventada por las mañanas?- preguntó Kenzo.

Yasu mediante unos signos explicó, que Kasumi aprovechaba las madrugadas para escribir libros.

Kasumi era una gran admiradora de la madre de Setoshi.
La gran escritora de poemas era uno de sus modelos a seguir.
Una mujer recogida emocionalmente aunque siempre amable en cualquier momento.
Con un imaginación portetosa.
Eso es justó por lo que se enamoró Mezo.

-Bueno, que alguien la mueva un poco. Si no viene Present Mick pronto vendrá otr profesor de gurdia- apuró Yei.

Kasumi se movió, cruzó sus brazos y apoyó la cabeza en estos por un lado, dejando ver su expresión tranquila y sus grandes parpados cerrados.

-¡Tengo una idea!- Exclamó Chihiro. Y saco una pluma. ¿¡De donde leches había sacado una pluma?!

-¿Que piensas hacer Chihiro?- preguntó Setoshi entrecerrando los ojos.

-Voy a despertarla nada más... solo le pasaré la pluma por la nariz y entonces etornudará. Estoy segura de que se verá adorable- dijo ella. Y después se giró hacia Yasu -¿Verdad?

Su hermano se dio muy fuerte con la mano sobre la cara. Y mientras veía a su hermana acercar la pluma a la cara de Kasumi empezó como loco a tratar de decirle que parara. Pero no se levantó a detenerla.

Se cubrió la cara.

La pluma rozó la naríz de Kasumi delicadamente.

Esta movió la cabeza hacia los lados y entonces empezó a aspirar aire con los ojos cerrados varias veces.

Su cara hacia muecas de desagrado. Claramente iba a estornudar.

Pero...

-Oye no os parece raro que se le estén metalizando las plumas- preguntó Asa muy confundida.

*CHIS*

.

-Buenos días alumnos, perdonad el retraso, tenía que hablar con la junta del cen...- empezó Present Mick entrando por la puerta. Pero enseguida se cortó cuando vio TODA la clase, paredes, mesas, puerta, suelo, techo... ¡LLENAS DE PLUMAS METALICAS CLAVADAS!

Las ventanas tenían agujeros y grietas. Las plumas atravesaban las mesas y se podían ver las cuchillas hasta por debajo.

Todos los alumnos y alumnas estaban con las plumas clavadas en los bordes de sus ropas quedando pegados a cualquier superficie.

Todo al rededor de Kasumi, que se frotaba la naríz mientras movía la cabeza de lado a lado.