Contract.

Contract. Capitulo 27

Capitulo 27:

Luego de la cita con mi cuñado fui a una boutique y compre algunas prendas de ropa y zapatos para tener una coartada para mi salida un día sábado frente a mi marido, ya que el fin de semana es solo para nosotros.

Cuando vuelvo a casa me encuentro a Bruno detrás de su escritorio trabajando. Dejo las bolsas de las compras en un sillón en su despacho y me acerco a Bruno. Lo abrazo por el cuello y le doy un beso amoroso en la mejilla derecha. El deja los papeles que revisaba y centra toda su atención en mi. Lo siento tenso y fastidiado. De pronto lo libero de mi abrazo impactada cuando me pregunta enfadado.

— ¿Hasta cuando vas a continuar con las citas clandestinas con mi hermano Ema?.

¿Pensaste que no iba a descubrir que te has reunido con Luca a mis espaldas?.

¿Qué asunto tan importante tienen que tratar sin mi intervención?.

Estas conspirando con Luca mi retorno a la familia Marchetti. ¿No es así?.

Me atrevo a suponer que él ha estado tratando de convencerte para que des a luz a un heredero para la familia, porque Luca no tiene la intención de casarse y tener hijos. 

El esta viviendo una doble vida que no desea abandonar y tiene la intención de utilizarte para dicho fin.

Supongo que a estas alturas estas dispuesta a seguir su petición porque te prometió el respaldo de la familia Marchetti.

Luca puede resultar bastante convincente y manipulador.

¿Qué vas a hacer Ema?. ¿Vas a tratar de convencerme de tener hijos por el bien de mi familia?.

Me alejo de mi marido y apoyo el trasero en el borde de su escritorio, a la izquierda de Bruno para disimular la inestabilidad de mis piernas debido al nerviosismo por el enojo que me expresa. Busco la mirada de mi marido y le pregunto entre asustada e indignada.

—¿Hace cuanto sabes que me reúno con Luca?. ¿Me has estado vigilando por medio de tus guardaespaldas?. ¿No confías en mi Bruno?.

—He mandado a mis hombres a seguir tus pasos porque siempre quiero estar al tanto de lo que haces cuando no estas frente a mi. Hice lo mismo en el pasado y continuare vigilando tus pasos en el futuro porque debo saber todo sobre ti para mantenerte segura.

No desconfió de mi esposa sino de los demás.

Intuí que en algún momento mi madre o Luca se pondrían en contacto contigo para tratar de manipularme. Y no estuve equivocado. ¿O si Ema?.

Dime. ¿A qué acuerdo llegaste con el patriarca de mi familia?.

¿Quieres darles un heredero a los Marchetti porque sientes pesar debido a que rompí lazos con ellos o en el fondo estabas buscando una escusa para pedirme un hijo porque deseas ser madre?.

Ema. Te conozco mejor de lo que crees. Desde el principio intuí que una mujer familiar como tú querría en algún momento convertirse en madre cuando tuvieras estabilidad emocional junto a un hombre con el cual pudieras proyectarte como pareja. Y ese hombre soy yo.

Lo que deseo justo ahora no es que me relates la lastimera historia que utilizo Luca para convencerte de tener un heredero. Como su hermano mayor comprendo su motivación. 

 Luca tiene en su vida a una persona que valora antes que a su posición en la familia. 

Lo que quiero escuchar de ti Ema, es lo que deseas desde el fondo de tu corazón.

No uses como escusa a mi familia. Dime tan solo que quieres hijos fruto de los dos porque me amas y estas soñando con la familia numerosa que podríamos formar.

Ema, quiero que te sientas segura siendo mi mujer. Quiero que tengas fe absoluta en lo que tenemos. Lo que anheles yo te lo concederé.

Antes de ti no tenia planes de tener hijos sobre todo por la imposición de mi familia, pero luego de conocerte la situación cambio. Si eres tú anhelo también hijos, porque deseo una familia a tu lado. Quiero envejecer contigo.

Por otro lado, si estas deseando que mi familia sea tuya, también estoy dispuesto a restablecer aquellos lazos. Lo único que deseo en esta vida es que seas feliz. Si eres feliz yo también lo soy.

Lo único que tiene verdadera importancia para mi es mi devoción por ti. Ahora dime que piensas al respecto Ema White.

Emocionada me lanzo a los brazos de Bruno y me prendo de sus labios. El me abraza y me ayuda a montarme sobre sus muslos subiendo mi falda plisada hasta mis caderas. Yo me froto acalorada y lasciva sobre su erección que responde endureciéndose para mi.

Mientras degustamos nuestros labios sedientos de pasión y lujuria comenzamos a quitarnos la ropa. Bruno abre con pericia los botones de mi blusa blanca manga corta dejando expuesto el sensual brasier que adorna mis senos, luego se dedica a regar besos desde mi cuello a los montes de mis senos. Jala los pezones a través de la tela. No tarda en liberar mis senos erectos de las copas del brasier y atrapa los pezones para estimularlos de una manera deliciosa y lujuriosa utilizando las manos y los labios. Yo jalo su suéter negro y él ayuda levantando los brazos para poder sacárselo. Luego también me dedico a degustar su piel animada por sus jadeos de placer.

Mientras me mantiene sobre él sujetándome de los muslos yo libero su falo y lo masajeo hasta que lo siento lubricado. Luego levanto las caderas y retiro mi prenda interior hacia un lado y me acomodo su erección dónde quiero tenerlo. Hecho eso lo recibo en mi interior y comienzo a follármelo. Enredo los dedos en su pelo sedoso, y atrapo sus labios, jalo con los dientes su labio inferior y le digo apasionada manteniendo su intensa mirada.

—Dame un hijo nuestro Bruno. Deseo tener en mis brazos un fruto de nuestro amor.

Lo que anhelo recibir de ti. No puedes comprármelo con dinero. Te quiero a ti Bruno. Dame un niño que te ate para siempre a mi. Y si ese niño puede restablecer tus lazos con los Marchetti mucho mejor.

Quiero atarte a mi vida con lazos que jamás puedan romperse.

—Yo ya te pertenezco Ema White. Eres mi esposa.

—No es suficiente Bruno. Quiero algo mas que un contrato. Quiero que hagas florecer mi vientre con hijos que pueda criar a tu lado. Hijos preciosos parecidos a ti.

—Entonces adelante nena. Fóllame y recibe mi corrida. Ya no tengo la vasectomía. Es un regalo especial que tenia preparado con antelación para ti. Supe antes que tú que estabas fantaseando con que tu vientre y tus senos cobijen el fruto de nuestra pasión.

Gratamente impactada me siento derecha sobre Bruno para recibir y liberar su erección. Aprieto mis paredes vaginales para no dejar escapar ninguna gota de su inminente corrida. Disfruto mientras tanto de la expresión extasiada de Bruno que se apoya en el asiento de cuero estando sudoroso y tenso mientras oscilo sobre él con su falo golpeando mi interior poniéndose mas firme y caliente. Apoyo las palmas en su pecho amplio y fuerte. Me siento gratamente poderosa y femenina adueñándome de él. Hago mío su corazón, su cuerpo y su futuro.

De pronto mi liberación se hace presente y Bruno me abraza firmemente para vaciar su corrida directamente en mi cuello uterino. Mi cuerpo sufre convulsiones y siento en mi interior el peso del semen de Bruno llenándome por dentro. Lo abrazo sobrecogida porque él me pertenece por entero y yo le pertenezco por entero a él. Soy profundamente amada. Y amo profundamente.

Siendo profundamente amada aprendí que puedo tener esperanza. Y amando profundamente tengo valor. No temo del futuro y de todo lo que me depara.