Contract. Capitulo 12

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Capitulo 12:

El conductor privado de Bruno estacionó la limusina frente a un suntuoso complejo resort y spa llamado Imperial Ming, faltando quince minutos para las 20:00 horas.

Aquel lugar por fuera era como ver a un hotel chino como los que se ven en Hong Kong por los colores rojos, verdes y dorados, propios de la arquitectura de los complejos turísticos de china, que imitan la arquitectura china antigua.

Luego caminando dentro del spa, me sentí transportada a la antigua china. Se veía mucho lujo y sofisticación debido a los colores vivos de los pasillos recubiertos de oro y por los anchos pasillos cubiertos con hermosas baldosas con motivos chinos de la antigüedad.

De verdad me sentí caminando en los pasillos en el antiguo palacio Imperial de la dinastía Ming.

Las mujeres con descendencia asiática que trabajan y deambulan en el spa vestían como las antiguas sirvientas chinas, con aquellos ropajes antiguos de seda y el cabello tomado sobre la cabeza con hermosos ornamentos para el cabello. Y nos hacían una reverencia como si Bruno fuese el emperador y yo su emperatriz. Comprendí que justamente ese es el juego del complejo del spa. Hacen sentir a los clientes como si fueran el Emperador de la dinastía Ming.

Una hermosa joven china vestida como una sirvienta del palacio Imperial de china nos guío como una anfitriona hacia una de las secciones del spa, lo que seria un amplio y lujoso salón comedor.

En el comedor había una enorme mesa rectangular cubierta con comida típica de china recién preparada para poder ser degustada solamente por dos comensales. Es decir, por Bruno y por mi.

Me senté en la silla de madera junto a la mesa y Bruno espero a que las damas del palacio, por así decirlo nos trajeran vino para acompañar la comida. Bruno me explico.

— Prefiero el vino blanco de uva al vino de arroz típico de China, para acompañar la comida que se sirve en este complejo.

Como ves Ema, tienes diversas preparaciones culinarias típicas de China para escoger.

En esta mesa hay una variedad de preparaciones provenientes de los cuatro grupos más destacados de la gastronomía China. Los cuales son la Cantonesa, Shanghai, Sichuan, y Dongbei. Por lo que podrás comer tallarines con verduras, pollo agridulce, carne mongoliana, chop suey de ternera, panecillos hervidos al vapor, pollo pekín, y por último pescados como salmón y el fugo o pez globo, el cual es el plato mas peligroso por su alta concentración de veneno. Solo los mejores chef tienen la licencia para prepararlo. Corea, Japón y China se disputan ser los creadores de este plato y lo mismo del sushi.

Además tienes a disposición para degustar mariscos, arroz, y algas, además del sushi. Tienes también camarones, jaibas y centollas.

Como es una comida a la que no estas habituada te aconsejo que solo hagas una degustación, además necesitaras sentir el estómago ligero para lo que vendrá después de la cena.

Bruno esperó a que le sirvieran el vino blanco en la copa y luego comenzó a comer relajadamente. Pidió ante mi desconcierto que le acercaran el plato hermosamente preparado con la carne blanca, casi traslucida de la carne del pez fugu, con la forma de la flor de loto.

El degusto con agrado el sabor del aquel pez globo tan venenoso como el cianuro.

Sin duda Bruno tiene una fuerte predilección por lo peligroso, por otro lado confía ciegamente en el chef que se lo preparo.

Yo opte por la comida que me parecía mas común, no tan estrambótica, como los tallarines con verduras, los panecillos de arroz, el sushi y los mariscos. Bebí luego de probar la comida pequeños sorbos de mi copa de vino blanco, porque no tengo buena tolerancia al alcohol.

Mas tarde, satisfecha de comida y algo mareada debido al vino, Bruno me llevo a otra sección del spa.

Un par de mujeres vestidas con el anfu, como Bruno me dijo que se llaman esas ropas antiguas tradicionales, nos guiaron a una habitación. Nos abrieron las puertas dobles con una reverencia. Me encontré de pronto dentro de una lujosa recamara con tonos rojos.

En la habitación roja, había una enorme cama con dosel, es decir con cuatro postes hermosamente tallados. Habían sobre la cama varios cojines redondos y cuadrados con tonos rojos y la ropa de cama era de un rojo oscuro. Y sobre la cama estaba tendida una hermosa mujer china vestida con una especie de bata de seda roja.

Aquella mujer tenia el cabello largo y negro suelto, y había a su lado en la cama un hombre vestido de igual manera, besándola y acariciándola sensualmente, centrados solo en ellos, como si Bruno y yo fuésemos invisibles.

Bruno me distrajo explicándome.

—Nena. Este cuarto rojo es un aposento de una concubina.

Antiguamente el Emperador visitaba a sus concubinas en sus respectivos aposentos. El tenia a su disposición hasta cien mujeres, a parte de la emperatriz.

En cambio yo, como el Emperador de mi mundo, te deseo solamente a ti como mi amante, Ema.

Me conformaré con mi propia futura emperatriz, ósea contigo Ema White. Soy actualmente un hombre monógamo, aunque circulen rumores que aseguran lo contrario.

La poligamia que experimente en mi juventud quedo en el pasado.

Te puedo asegurar que no necesitaré concubinas. Contigo como mi esposa me sentiré mas que complacido y satisfecho dentro y fuera de la cama, como ya lo estoy en este momento.

Ven, acompáñame junto al sofá que esta apostado en esta esquina. Relájate. No te pongas nerviosa. No hay nada por lo que debas temer. Estas a salvo en mi compañía. Por mi honor te protegeré. Solo estoy buscando tu placer.

Ahora nos sentaremos para observar y si lo deseamos, en las sombras haremos algo mas que ver como esa pareja tiene sexo. Podremos imitarlos si se te apetece.

No habrán más participantes entre medio de ti y de mi. No me van los tríos o los cuartetos. Contigo requiero absoluta exclusividad sexual. No soportaría que otro hombre a parte de mi te toque y no te humillaré tocando a otra mujer.

Me centraré de ahora en adelante en una compañera sexual a la vez.

Toda mi atención la quiero poner solamente en ti.

Me sentaré a tu lado en este cómodo sofá, así que si mas tarde tu cuerpo se enciende de deseo y de pasión frente al espectáculo del kamasutra chino que verás en vivo y en directo. Estaré a mano para que me uses para apagar aquel calor.

Con gusto voy a satisfacer todos tus apetitos esta noche.

No te retraigas. No te sientas tímida. No tienes que sentir pudor, recato ni vergüenza. Nosotros, tú y yo, estaremos en penumbras. Por lo tanto podrás ver con comodidad y claridad la cama con dosel iluminada con los actores centrados en lo suyo. Ellos no te verán a ti.

No te perderás ningún detalle de lo que harán los actores que te mostraran a continuación algunas de las posturas sexuales y algunos juguetes sexuales que me interesa que aprendas a utilizar.

Dichas posturas no requieren de flexibilidad, son mas bien comunes, y corrientes, pero igualmente excitantes. Me muero de ganas por poner todo aquello en practica contigo Ema. Y nada deseo más que aquella fantasía y necesidad sea mutua.

Ahora disfruta del espectáculo mi pequeña e inocente muchachita.

Dicho eso, las luces del cuarto rojo se apagan, menos la luz que ilumina la cama con sus ocupantes que comienzan a mostrarme lo que Bruno desea que yo aprenda.

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