Capitulo 5:
Estoy gratamente acomodado entre las piernas separadas de Ema, seduciéndola con el calor y la dureza de mi erección, palpitando contra su sexo a través de la ropa, estando sentada sobre mi escritorio. Mantengo sereno y compuesto su mirada velada que expresa inseguridad y deseo por igual.
Ella devora con ojos chispeantes mi imagen teniéndome muy cerca, mostrándome a su vez la adorable imagen de sus mejillas encendidas y su respiración agitada. Adivino que me desea, pero cruzan por su mente dudas y temores.
Esta dudosa y excitada, preguntándose tal vez si este es el mejor método o el único que existe para descubrir si es o no, frígida.
Obviamente no es frígida. Más sensible al placer no podría ser. Solo el primer beso que le di la arrancó de un plumazo de la realidad. Su cuerpo se calentó y languideció de deseo. Pero eso no es suficiente. Quedamos en que debe experimentar un orgasmo o sino, no aceptará mi propuesta de matrimonio porque pensará que no tiene nada que aportar al matrimonio.
Lo de casarme con ella va muy en serio. ¡Quiero que sea mía!. Quiero la exclusividad de su cuerpo para siempre. El motivo detrás de aquello se debe a que la amo.
No le confesaré este amor que me quema la sangre hasta que este siendo amado de igual manera por ella.
Como dije antes, quiero robármela de su familia. Esa gente no se merece tanta lealtad y entrega de parte de Ema. Permiten por comodidad que ella renuncie a su derecho de amar y de ser amada por un hombre.
Su abuelo es un adicto al juego de poker. Fue así que se involucro con el prestamista ilegal que lo timo con aquel interés fraudulento.
El abuelo de Ema no pago la hipoteca de su casa porque utilizó todo el dinero que recibió de su nieta en el transcurso de los años para jugar en casinos ilegales.¡El abuelo de Ema no es ningún anciano decrepito!. Tiene 60 años. No trabaja porque recibe una pensión de gracia que malgasta. Espera que su nieta menor provea el sustento de la familia y además le pide dinero a su nieta para continuar jugando.
La abuela de Ema es una típica dueña de casa. Además es una mujer sumisa y sin carácter que espera que el marido o algún integrante de la familia sea el proveedor. Jamás a trabajado en su vida fuera de su casa.
La hermana mayor de Ema trabaja para darse gustos. No aporta económicamente en su casa. Su sueldo lo malgasta en ropa de marca y en zapatos costosos para poder codearse con hombres de dinero en locales nocturnos exclusivos.
Tengo entendido que Tatiana tiene bastante interés en mi. Ella averiguo todo sobre mi vida, pero tiene claro que aunque fuera la última mujer en el planeta Tierra yo jamás la tocaría.
La hermana de Ema esta esperando el mejor momento para poder acercarse a mi ahora que Ema es mi secretaria.
Para mi Tatiana White es solo una putana. Es una busca fortunas. No se da cuenta de que esos tipos que se lleva a la cama la utilizan. Ninguno formalizará con ella.
Me centro en Ema. Aún no la libero de la ropa. Mi cuerpo esta tenso, excitado y hambriento de pasión. Nunca antes estuve tan excitado. Mi sangre esta fluyendo como lava, a toda velocidad por mis venas. Mi cabeza se calienta, y mi corazón golpea duro dentro de mi pecho. Mi mente esta invadida de morbo. Me asaltan férreos deseos de posesión.
Tocar libremente a Ema, lo mismo poder besarla me produce una fuerte emoción. Mi falo me exige liberación. Me muero de ganas de follarla.
Debería robarme su primera vez en un lugar mas cómodo, como por ejemplo la cama de mi departamento, pero si me echo para atrás en este momento, Ema se retractara. No querrá volver a estar a solas conmigo ofreciéndome su cuerpo por entero.
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Contract.
RomanceEma White es una joven secretaria la cual su único sueño en la vida es convertirse en la asistente ejecutiva de Bruno Marchetti, siendo él un exitoso, atractivo, sensual, carismático, profesional y enigmático ejecutivo con una personalidad magnética...