POV Wanda
Si había algo que esperaba no tener que hacer nunca más, era mudarme. Si bien todo lo que teníamos que trasladar era ropa, algunos utensilios y muchos juguetes, había sido trabajo pesado porque no teníamos una buena fecha para hacerlo tampoco.
Los últimos fines de semana habían sido pesados, Pietro por fin se había casado y los preparativos nos habían agotado. Además, el trabajo con su ausencia debido a su luna de miel, también era cada vez más demandante; y la bebé, ni qué decir.
Este fin de semana Natasha había tomado la decisión de que era ahora o nunca. Contrató a una empresa que nos pudiese ayudar y nuestros amigos también se habían ofrecido a echarnos una mano, la única que estaba presente pero no hacía algo, era Yelena. Pero no por su gusto a decir verdad. Estaba bastante avanzado su embarazo y debíamos tener cuidado de que no hiciese esfuerzos.
- ¿De dónde demonios consiguió colecciones de primera edición y firmadas? - Preguntó Yelena y le sonreí. Ella estaba conmigo en lo que sería la oficina de Natasha y estábamos viendo cómo acomodar los libros tanto aquí como en la biblioteca de la casa.
- Algunos son de ella y otros míos, pero muchos, debido al gran espacio que hay por llenar, los ha comprado recién. Estuvo batallando para tenerlos en este momento durante cerca de un mes, incluso contrató a alguien. - Dije y ella puso los ojos en blanco. - Tú y ella son demasiado nerds, en mi casa lo único que hay son libros de cocina y comics. - Dijo y me reí.
- Aquí también, hay un par de cajas con colecciones y guías definitivas de Marvel y DC. - Me miró asombrada. - Tu hermana tiene la teoría de que a Lizzie, a nuestros futuros hijos y a sus primos - señalé su vientre - eso les llamará la atención y que es bueno tengan un lugar donde sepan hallarán todo. - Dije y ella sonrió. - Siempre he odiado eso de ella, hace cosas raras que terminan siendo excesivamente dulces y consideradas. - Admitió y asentí. - Lo sé, eso es un problema cuando me quiero molestar con ella. - Bromeé y ella se comenzó a reír.
- Sí bueno, a decir verdad cuando ella se enoja da miedo. - Dijo y asentí. - Ni que lo digas... - Respondí y me miró con los ojos entre-cerrados. - ¿Alguna vez se ha enojado contigo? - Preguntó con asombro y lo dudé.
- No creo que haya estado enojada como tal pero sí molesta. - Dije y ella sonrió, Natasha hablaba mucho sobre la diferencia entre una emoción y otra. - Pero sí la he visto enojada y digamos que es todo menos agradable verla así. - Asumí y ella asintió.
- Cuando era adolescente la mayoría del tiempo la hacía molestarse, no era precisamente tranquila y era algo idiota también, ella actuaba como mi madre y en mi mente ella no tenía el derecho de hacerlo. - Me dijo y la miré asombrada. - No me mires así, ya reconocí que estaba idiota. - Dijo y sonreí.
- Pero luego entendí que claro que tenía el derecho de regañarme, de ponerme reglas y de ser no siempre permisiva o mostrarse dispuesta a satisfacer mis caprichos. Ella y yo habíamos perdido lo mismo y creo que en mi posición cómoda era más fácil asumir solo había perdido yo. - Asentí porque sí entendía su punto.
- Ella tuvo más tiempo tanto con nuestros padres y con los abuelos, era algo que me mantuvo celosa en una etapa, pero luego comprendí que más allá de quiénes había perdido, debía apreciar quién me había quedado. - Parecía recordar. - Ella hizo todo lo humanamente posible para que yo no sintiera su ausencia y no creciera con falta de amor. - Dijo y sonreí.
- Ella estudiaba bastante, era bastante aplicada y yo era un alma libre. - Bromeó. Sabía Natasha se refería así sobre ella para no decir no le gustaba la escuela. - Pero daba igual, ella se daba tiempo para mí, jugaba y estaba conmigo casi todo su tiempo libre, hacía conmigo las tareas, me llevaba y me recogía en el colegio. Cada vez que podía salía y de sus mesadas me compraba juguetes o dulces. - Sonreí al imaginar a mi novia haciendo todo eso. A decir verdad, aún hacía cosas así. Me preguntaba si era algo muy suyo o asociado a alguno de sus padres.
- Teníamos ayuda en casa, había alguien que cocinaba, planchada y demás cosas básicas, pero nunca sentí me criara alguien contratado, me crió ella y solo tenía, tiene, cinco años más que yo. Ella fue mi ancla, aún lo es. - Suspiré. A veces creía no había nada que me pudiese hacer amar más a Natasha, y luego, con platicas así, confirmaba que no había un límite para el amor que ella podía inspirar.
- Wanda... - Me miró seria y reconocí en su expresión a Natasha, ella hacía el mismo gesto cuando quería decir algo importante. - Dime - Dije con cuidado y vi cómo se comenzó a acariciar el vientre. - ¿Quieren ser sus madrinas? - Preguntó y miré donde estaba su mano precisamente.
- ¿Hablas en serio? - Pregunté entre sorprendida y emocionada. - Muy en serio, si hay una pareja en la que confiaría a mi bebé a ojos cerrados, es la suya. Mi hermana es simplemente maravillosa y si no te he matado por estar con ella, no es solo porque me caes bien o porque ella te ama, sino porque tú también lo eres. - Dijo y me comencé a reír.
- Diablos Yelena, yo... claro que acepto. - Dije un poco trabada y ella sonrió. - Y dudo que Natasha te diga que no. - Suspiró. - No, no lo hará. Ella está incluso más emocionada que yo. Ya no me pregunta por mí o por María, pregunta únicamente por el bebé. - Me reí otra vez. Había escuchado esas platicas y Natasha lo hacía a posta.
- Hey... - Apareció Tony - Mierda, esto es estilo. - Dijo y sonreí. La casa era preciosa y estaba orgullosa de lo que habíamos creado y diseñado juntas. - ¿Me construyes mi casita? - Preguntó con cara de niño y le puse los ojos en blanco. - Si puedes pagar por sus servicios, lo hará. - Dijo Loki apareciendo y me reí.
- ¿No se supone deberían ayudar a los demás abajo o en las habitaciones? - Preguntó Yelena y ellos la miraron con rostro de "¿es en serio?". - Yo estaría ayudando si no estuviera todo lo embarazada que estoy. No me miren así, idiotas. - Dijo y los hizo reír. - Yo les dije, los dedos son mágicos. - Apareció Scott y me comencé a reír. Ellos quizás no lo sabían, pero claro que lo eran.
- Mierda, por qué siguen apareciendo. - Cuestionó la rubia y ellos bufaron ante su molestia. - Las veníamos a buscar porque ya llegó la comida. - Aclaró Tony.
- Sí bueno y como sabía que Tony se quedaría charlando, vine por él. - Dijo Loki y asentí. - Lo cierto es que Natasha dijo que ambos se quedarían charlando si no los apuraba. - Dijo Scott y sonreí.
- Dice que pidió comida china exclusivamente para Yelena y de algún restaurante peruano de la ciudad, comida para Wanda. - Mencionó y me puse de pie.
- Debiste comenzar por ahí. - Dije tendiendo mi mano hacia Yelena para ayudarla a pararse. - Ayúdenla, yo voy a darle las gracias a mi futura esposa. - Dije y los tres sujetos comenzaron a molestarme.
Bajé rápidamente las escaleras y encontré a Steve jugando con María, Morgan y Lizzie. Cassie estaba usando su celular y estaba recostada sobre la alfombra.
Bucky por otra parte sí estaba ayudando a servir la comida a Natasha. - Hasta aquí siento el olor a gloria culinaria. - Dije y Natasha me hizo un gesto para que me acercara. Lo primero que hice fue besarla de una manera que la dejó sorprendida.
- ¿Eso por qué fue? - Preguntó mientras yo limpiaba un poco de labial que se había quedado en sus labios. - Porque te amo, porque me encantas y porque me compras comida rica. - Dije y ella me abrazó. - Y porque coges genial. - Susurré en su oído y se comenzó a reír. - No te rías, nuestra habitación ha quedado increíble y ya quiero probar la cama. - Dije y escuché alguien se aclaró la garganta. - Mierda. - Dije mirando hacia Bucky, quien sonreía travieso. Me había olvidado por completo de su presencia.
- Ya nos exhibiste. - Dijo Natasha y me escondí en su cuello mientras me reía. Era malditamente feliz a su lado. En interacciones simples, en platicas raras, en medio de la mudanza y con gran parte de nuestra casa aún hecha un desastre, me sentía plena.
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Después de este capítulo quedan solo 4 más. Estoy considerando seriamente hacer o no un epílogo. ¿Ustedes qué dicen?
Los tres capítulos de hoy han sido simples, solo charlas a decir verdad pero que son importantes al final. Espero haya sido de su agrado, como siempre muchas gracias por leer y por votar.
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Real e Ideal - Scarletwidow / Wandanat
RomanceNo hay historia más grande que aquella que se cuenta en nuestro a día día. - Esta es una historia inspirada del Scarletwidow pero que en esencia es Wandanat. Algunos momentos son recuerdos, otros fantasía pero no sé qué tanto puedas diferenciar lo...