Capítulo 27

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-Cuando estamos viendo el capítulo sale una escena hot, menos mal que pusieron un poco de música.

Mientras estaban haciendo esa parte me giro a verle, y el también se gira al notar mi mirada encima suya.

Puso la serie en pause.

E inesperadamente atrapa mis labios en un beso salvaje.

Me subo encima de él y voy dejando besos en su suave cuello, en ese tatuaje de búho que tan bien le queda.

Noto como se tensa al sentir mis labios encima de su cuello al dejar besos-

Hugo: estas tocando una zona peligrosa, sabes que me pone a mil que me dejes besos en el cuello y más como lo estás haciendo.

-dice soltando suspiros-

Eva: ¿y de qué forma lo estoy haciendo?

-digo haciéndome la que no sabe, y siguendole dando besos en el cuello y también de vez en cuando bajando a su clavícula-

Hugo: no te hagas la que no sabes, porque lo sabes perfectamente.

Eva: lo sé.

Hugo: eres mala eh.

Eva: un poquito.

-me separo de la zona de su cuello, y le miro-

Hugo: ¿sabes que también se hacer yo?

Eva: el que.

Narra Hugo:

Sabía que ella tenía la misma debilidad que yo, como ya se sabe es el cuello.

Yo había sufrido, así que ahora le toca a ella sufrir.

Hugo: esto.

-no le dejo hacer ni decir nada, y ya estoy sumergido en su cuello deborandole a besos toda esa zona.

Mis boca sentía su fina piel contactar con mis labios.
No había cosa mejor que sentir su piel contra la mía, ya fuera de la manera que fuese.

Le cogo y aprieto su culo pegándolo  más hacia a mi para no dejar ningún espacio libre entre nosotros.
Al hacer eso noto como ella suelta un jadeo.

Con las manos en su culo, empiezo a dar mordiscos en toda la zona de su cuello, bajando hasta su clavícula y hombro; momento en el cual también jadea.

Me separó de ella y la miro, como ella hizo antes conmigo-

Hugo: has visto yo también se hacer esas cosas.

Eva: yo no he sido tan mala.

Hugo: pero tenía que devolvértela, y tenía que hacerlo mejor para que sufrieras las consecuencias.

Eva: ¿a si?

Hugo: si.

Eva: quieres ver quién se la devuelve mejor al otro.

Hugo: tu ganas.

-no iba ha dejar que me hiciera volver a sufrir, antes me estaba controlando un montón para no empalmarme porque ahora ducharme con la escayola no es fácil.

Me llega a dar otros besos más y no pudiera haber aguantado más.

Aunque bueno no nos vamos a mentir, algo se podía notar ya que estaba encima de mi.

Nos soy de piedra, y esto no puedo controlarlo.

Frente ha esta diosa porque no se le puede llamar de otra forma, me hace ser débil a sus encantos, me encanta; y eso ella lo sabe, que ante ella me es demasiado o casi imposible decirle que no sobretodo en el hábito sexual-

Eva: jaja, que te pasa.

Hugo: lo que me pasa es que tengo una escayola y voy ha salir perdiendo si o si, porque no me puedo levantar y llevarte a la cama para poder hacerte las maravillas que me gustaría hacerte. Y sin embargo estoy aquí atrapado y no puedo salir.

Eva: jaja, si que te has explicado eh, detallado todo incluso demasiado no crees, jaja.

Hugo: no creo que no, es más creo que me he quedado corto de todo lo que quiero hacer contigo, primero empezando por nuestra cama.

Eva: mhm.

Hugo: si, ya veras.

Eva: jaja.

Hugo: tu ríete. Bueno, ¿seguimos viendo el capítulo?

Eva: si, pero esa parte mejor pasala.

Hugo: vale, jaja

-acabamos de ver el capítulo y vamos a sentarnos en una mesa casi pegada a la pared donde enfrente está la cocina y en medio de estas la puerta de entrada.

Ya habíamos terminado casi de comer-

Eva: ¿vas a querer postre?

Hugo: si, esque el postre de antes de comer, me lo he dejado casi ni a medias.

Eva: Hugoo, que tonto eres.

Hugo: el tuyo.

Eva: pues si.

-y viene hacia a mi y me da un beso en los labios-

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Hasta aquí el capítulo veintisiete.
Nos vemos en en próximo.
Gracias.
🥰

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