—Bueno, estamos aquí —dijo Mavi para después tragar saliva.
Estaba acompañada de Zouty, Subiu y Sahir, se encontraban frente a un enorme e intimidante portón de metal color blanco, el cual pertenecía a la casa de Maitso.
—... Parece que ahí dentro matan —dijo Subiu mientras se abrazaba del brazo de Mavi debido al miedo que sentía.
Zouty tomó una gran bocanada de aire y comenzó a caminar con pasos largos hacia el timbre de la casa, lo presionó, un extraño y fuerte ruido resonó, por lo que la chica se espantó y salió corriendo hacia donde estaban los demás.
—¡Lo sentimos, no queremos galletas hoy! —se escucho una voz desde el altavoz que estaba enfrente. Mavi corrió al timbre y apretó de nuevo el botón.
—¡No vendemos nada, venimos a buscar a Maitso! —el lugar se quedó en silencio unos instantes y luego el enorme portón comenzó a abrirse.
—¡Chicos, perdón por hacerlos esperar! —dijo la de alta estatura a lo lejos —pasen por favor.
Si desde el inicio los chicos estaban asombrados de todas las casas tan lujosas se veían en aquel barrio, no podían creer todo lo que veían en el patio de la casa de su amiga. Grandes arboles podados perfectamente y con figuras hermosas, al frente de la puerta de la casa había una gran fuente con la preciosa estatua de una torre al centro. El pequeño grupo subió al cuarto de Maitso y tomaron asiento.
—Mai, tu casa es demasiado grande y eso me asusta —dijo Subiu mientras miraba el gran espejo al centro de la habitación —Ay, amo demasiado tus cardigans y abrigos, son perfectos para invierno
—Y tienes razón, si qué te salvan la vida en las mañanas heladas qué hay —volteo hacia el chico —bueno Sahir, necesito que te sientes en la silla que esta frente a mi espejo —señaló el lugar —chicas, necesito que vayan sacando las cosas que trajeron para transformar a este chiquitín.
Mavi sacó varias piezas de joyería de su mochila y Subiu sacó un delineador en forma de lapiz y brochas para aplicar el maquillaje, Zouty solo miraba de lejos mientras jugaba con las cadenas que colgaban de su pantalón.
—Ahora, Subiu y yo nos encargaremos de la transformación, ustedes dos pueden buscar algo en mi armario que crean que le quedara bien y cómodo —Maitso tomó un cepillo de cabello y miró fijamente a Mavi y Zouty —confío en que elijan algo bonito.
Cada quien se puso en marcha a las ordenes de Maitso, luego de un rato de estar buscando por el gran closet, Mavi y Zouty sacaron una pieza de ropa al mismo tiempo, una sacó una blusa blanca y la otra una falda azul con tirantes, ambas se miraron y asintieron.
—Espero que ya estén listas, porque aquí ya tenemos la ropa —dijo Mavi mientras alzaba el conjunto.
—¡Unos minutos más! —dijo Subiu.
Y en lo que esperaban, Mavi se tumbó en el limpio suelo y Zouty en un sofá, desde ahí miraba a Sahir con los ojos cerrados todo el tiempo, al parecer quería que fuera una sorpresa para él mismo, a Zouty esto le pareció adorable y siguió admirándolo a la distancia.
—Todo listo
Sahir abrió sus grandes y brillantes ojos para mirarse en el espejo, se dio cuenta de que fácilmente podría pasar como una chica común y corriente, por lo que se emocionó y comenzó a saltar por todos lados, Mavi y Zouty estaban impresionadas por tan buen trabajo, mientras que Maitso y Subiu miraban orgullosas y algo exhaustas.
—Únicamente falta que te pongas la ropa que te escogimos y podremos irnos —dijo Mavi mientras sostenía la ropa y se la entregaba.
—¡De acuerdo! Entonces me daré prisa —el chico salió corriendo hacia el pequeño baño que se encontraba en la misma habitación.
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El Club De Las Seis Noches
AdventureUn día, un grupo de chicos comenzó a presentar anomalías y cosas extrañas que solo les sucedían cada noche. Ahora, deberán usar con provecho sus habilidades para salvar su ciudad.