Camino de un lado a otro sin dejar de pasar la mano por mi cabello. «Estúpida, estúpida y más estúpida». Pienso el lo que dije allá adentro, sintiendo verguenza de mi misma.
Las palabras de la maldita chica no dejan de sonar en mi cabeza "No parecen pareja". ¿De qué carajos habla? Claro que parecemos pareja, nos vemos increíbles juntos, que estupidez. Ruedo los ojos y muerdo el interior de mi mejilla al recordarlos juntos y a ella robando de su comida. ¡La cual iba a robar yo! Y ese idiota, como se atreve a ligar con esa delante de mí.
No sé muy bien como sentirme al respecto, parecí una niña malcriada ahí adentro por nada y no dejo de sentir rabia y un hueco en el pecho, quiero regresar para ver si siguen juntos, pero a la misma vez quiero quedarme aquí para no verles las caras de idiotas.
«¿Serán celos?». No. Claro que no.
¿Yo? ¿Celosa?, nunca he estado celosa en toda mi vida, y esta no será la primera vez «Pero ya lo estas» me recuerda mi maldito subconsciente y me rindo.
Bien. Estoy celosa y me siento rabiosa, siento que podría golpear a alguien en el rostro en este jodido momento, de preferencia a Derek o a su bonito primo. Nunca me había sentido así, nunca me había gustado alguien — Y tal vez fue por una razón. — En mi vida había tenido que lidiar con esto y siento que voy a enloquecer.
El hilo me recorre la columna, mi respiración se agita y siento ganas de apuñalar a alguien, y solo me calmo una vez que escucho la voz de mamá.
—Sube cielito — habla mamá desde el auto con la ventanilla bajada
Su voz y sus ojos, iguales a los míos me regresan a la realidad.
Le tuve que pedir que viniera por mi, obligándola a salir del trabajo, realmente parezco una niña malcriada, pero no quería verle la cara a Derek y no quería ir con este enojo en el maldito transporte.
Subo y me toma la cara con ambas manos dándome besos en las mejillas y frente haciéndome reír.
Cada que hace eso me hace sentir como una niña de nuevo.
—¿Qué te sucede? — pregunto una vez que deja de atacarme
—Te extrañé — se excusa
—Me viste esta mañana
—Eres mi hija favorita, es mi deber extrañarte
—Eso no es verdad, y soy tu única hija
—Pues más razón tengo para extrañarte
Veo que toma un camino distinto en lugar de ir a casa, haciendo que le haga pucheros.
—¿A dónde vamos? ¡Llévame a casa!
—¡No patalees dentro del auto niña! Eres casi tan grande como una jirafa — me reprende
—Eso no es verdad — murmuro haciendo muecas
—Pero claro que sí. Me obligaste a irme del trabajo, ahora tendrás que aguantarme por el resto del día
Guardo los berrinches para que no me regañe ¡Yo solo quiero estar en casa y odiar a Aidan! ¿Es mucho pedir?
Mamá para el coche en un estacionamiento y se baja llevándome con ella, es más baja que yo, así que engancha su brazo con el mío, y así pasamos unas horas juntas haciendo que me olvide de la escena que hice y de Aidan. Lo cual se lo agradezco.
Y me convenzo aun más de que no necesito el medicamento.
°°°
Los siguientes días se resumen en ir de casa a la universidad, exámenes y Derek, que no ha dejado de aparecerse en la puerta de mi recamara con regalos para que lo perdone.
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GIVE ME A CHANCE | #1 | Trilogía Oportunidades
RomansA Cassia Díaz siempre le dijeron que su vida seria emocionante y llenas de aventuras. Sin embargo ella no espera mucho de la vida; Tener una vida normal, un trabajo normal y morir. La llegada del primo de su mejor amigo le mostrará que todo de lo qu...