𝘽𝙧𝙤𝙩𝙝𝙚𝙧 ; hyunin

11 : 11

❝Invitaré a HyunJin a comer por mi cumpleaños. Deséame suerte.❞

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Después de haber tenido mil y un colores en su rostro, JeongIn le preguntó si ya se había alimentado, recibiendo un asentamiento por parte del mayor. Era el único sin haber comido porque se quedó dormido, soñando cosas que probablemente nunca sucedan.

—Calentaré mi comida, hyung, ve a descansar.— dijo el menor, bajando las escaleras y dirigiéndose hasta la cocina.

—Estoy bien, Innie— ese maldito apodo jugándole mal. —, ¿quieres que te ayude en algo?

Yang negó y en su cara se formó una sonrisa diminuta por la preocupación de su hermanastro. Es que en verdad algo le decía que probablemente le guste, y sólo faltaba que él mismo descubriera sus sentimientos hacia HyunJin.

El de mayor altura se sentó en la mesa, tomando un vaso de agua, mirando hacia la dirección del pequeño que tanto amaba. No podía evitar sonreír al verlo aún en piyama.

—Emm...— quiso sacar plática. —¿Y JaeMin? ¿No van a tener su día de amigos?

JeongIn negó de nuevo, pero sin la sonrisa de por medio. Recordó lo que hizo que Hwang saliera corriendo y ocasionara su accidente.

—Hyung, sobre eso...— guardó silencio; si hablaba podría decir que casi se acostaba con el chico para olvidar sus pequeños sentimientos por alguien que estaba mal amar. —Lo siento. ChangBin me hizo reflexionar ese día; perder mi virginidad nada más porque sí no es muy maduro de mi parte.

Puso su plato de pollo en la mesa y se sirvió un vaso con agua de sabor. Se sentía extraño hablar sobre eso, pero en verdad no quería que hubiera más problemas por su culpa.

—No pasa nada, pequeño— acarició, como pudo, la pierna del menor por debajo de la mesa. JeongIn sintió estremecerse hasta la punta de sus pies. —, tú tienes la desición de con quién y por qué perderla. Además, ¿por qué hablamos de eso? Mejor cuéntame acerca de lo que veías en la laptop.

HyunJin debía admitir que su corazón dolía al hablar de ese tema, era muy difícil para él hacerlo porque sentía más que un sentimiento de hermano hacia el de hoyuelos y escuchar que tendría relaciones le hacía sentir que su mundo se le venía encima.

—Ouh...— se quedó callado, tratando de pasarse aquel pedazo de su comida. —Veía Demon Slayer, ¿quieres verla esta noche? Ya la acabé, pero podemos verla de nuevo.

—Oh, no, pequeño.— negó al escuchar tan magnífica oferta. —Deberías, deberíamos, dormir para poder ir a la escuela mañana.

—¿Ya no sientes dolor? JiSoo noona me contó anoche que tal vez y guardabas reposo por un par de días más.— tomó un sorbo a su agua. Se sentía rechazado de la forma más cruel posible, ¿quién en su sano juicio rechaza ver un anime con su hermano favorito?

Hwang negó, recogió el plato del menor y lo puso en el fregadero, también los dos vasos que ocuparon mientras estuvieron. Después de eso, revolvió los cabellos del contrario y sonrió perdidamente enamorado.

—Anda a dormir más.— dijo, llendo hacia las escaleras. —¡Linda noche! No olvides lavar los platos.

Y ahí se había quedado otra vez, sufriendo un colapso mental acerca de lo que sentía por el chico con el lunar bajo el ojo. No hacía otra cosa más que confundirlo y hacerlo sentir una estúpida persona que no sabe lo que quiere.

[ ... ]

HyunJin se había levantado temprano ese día, se sentía sano y fuerte, además de haber descansado correctamente. Preparó su mochila para la universidad y después se dió una ducha.