Mi caso especial [NJ] (omegaverse)

Capítulo 23

- No tienes que disculparte por esto Nam. -soltó entre lágrimas- Tú mismo dijiste que lo que ocurrió fué en consecuencia de nuestros sentimientos ¿Cierto?

El omega tenía un punto.

- Además, -continuó- fuí yo quien te pidió que me marcaras, ¿Recuerdas?

Por supuesto que lo recordaba, sin embargo, era él quien se sentía mal por comportarse como un puberto hormonal, dejando de lado toda responsabilidad con su paciente y pareja en recuperación.

No obstante, había algo que debía hacer.

- Lo siento. -repitió- No me arrepiento de nada Hyung. -agregó, recibiendo la mirada de sorpresa de su omega- Sé que debí cuidarnos, especialmente a tí por tu estado. Pero no me arrepentiré, no aún, porque a pesar de que un segundo embarazo está dentro de las posibilidades, son bastante bajas.

- ¿Tendré que hacerme un test? -cuestionó.

- Debemos esperar un mes y hacerte un análisis de sangre para estar seguros. -explicó- Mientras tanto, utilizaré tratamientos que no sean dañinos en el hipotético caso de que exista otro bebé, para ayudarte con tu malestar. ¿Estás de acuerdo?

- Lo estoy. -afirmó.

- Bien, -soltó y giró para abrir el único mueble del baño y mostrándole un frasquito de gotitas para el estómago.- esto debería servir.

Seokjin lo tomó entre sus manos y se encaminó a la cocina en busca de un vaso con agua donde mezclar las cinco gotitas del remedio.

Regresó a la habitación tras tomarse el medicamento y se recostó en la cama, observando el techo.

Cuando el alfa regresó del baño, se acostó en su lugar y apagó la luz.

Pasaron varios minutos de silencio,  total antes de que el omega hablara en medio de la oscuridad.

- ¿Qué ocurrirá si espero otro cachorro? -soltó rápidamente, dudando en si realmente quería escuchar una respuesta.

- No estés nervioso amor, aún no lo sabemos.

- Pero, ¿Y si el resultado de la prueba es positivo? -insistió.

- Deja de pensar en eso, tampoco quiero que te ilusiones. -respondió.

El minutero avanzaba, en medio de la oscuridad, ambos permanecían quietos en su lugar. El alfa intentando dormir, y el omega deseando su atención.

Seokjin sentía que mientras más transcurría el tiempo, la cama se ensanchaba cada vez más, aumentando la distancia entre ambos y disminuyendo la posibilidad de contacto.

El omega sentía miedo, temía que su alfa ya no lo quisiera, porque estaba lleno de complicaciones y quizá tendrían que volver a pasar por todo una vez más.

El alfa significaba tanto para él, que casi no soportaba sus inseguridades.

"Él es demasiado para mí"

"Él no debería tener todos estos problemas"

"¿Soy una carga para él?"

"¿Qué pasaría si se enteran de nuestro lazo?

"También sería mi culpa si quedara desempleado."

"¿Y si nunca consigue otro empleo?"

Las lágrimas se agolparon en sus ojos, e intentó aguantar el llanto todo lo posible, pero sus dudas lo sobrepasaron y escaparon de sus labios involuntariamente.