Capítulo 44

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Se recomienda leer el capítulo anterior para retomar la lectura, gracias ✨

Eran las ocho de la mañana cuando Seokjin le anunció a su alfa que saldría a hacer ciertas compras.

- ¿A dónde irás? -cuestionó secando las tazas que el omega lavaba- ¿Quieres que te acompañe? -se ofreció.

- No es necesario Nam, no quiero molestarte, solo iré a comprar unas cosas y volveré enseguida.

- Tú nunca molestas cariño, me gustaría acompañarte. -le sonrió.

- Gracias Nam... -correspondió su sonrisa- ...pero de verdad no es necesario. -agregó.

- ¿Estás seguro? Sabes que esta mal que pienses que me molestas ¿Cierto?

- Si Nam, lo entiendo, pero quiero creer que puedo hacer unas compras yo solo. -soltó, un tanto tímido. A veces le costaba expresar sus sentimientos.

Más aún cuando mentía.

- Oh, lamento si te hice sentir mal. -respondió el alfa- Es que siento esa necesidad constante de protegerte a tí y a nuestro futuro cachorro. Pero confío en tí, recuerda avisarme sobre cualquier cosa que sientas ¿De acuerdo?

- Sabes que siempre lo hago, Nam.

- Lo sé, pero esta vez no te seguiré a escondidas. Por suerte vas de compras, no a visitar a un recluso. -sonrió divertido.

Y con esas últimas palabras repitiéndose una y otra vez en su cabeza, Kim Seokjin salió de su casa, reprimiendo cualquier sentimiento negativo para evitar que su alfa se preocupara.

No obstante, la culpa era difícil de ocultar cuando en realidad se dirija una vez más a aquel lugar donde pensó que todo había terminado.

Pues después de la siesta del día anterior, sentía que debía hacerle saber que su gran sueño de cuando eran niños, se había cumplido.

Seokjin nunca volvería a entablar una amistad con ese hombre después de lo ocurrido. Sin embargo, al saber que tenían un pasado agradable juntos y recordar lindos momentos como amigos, sentía que al menos debía comunicarle que era padre.

Pensó que en la visita anterior había concluido con esa etapa y pasado la página. No había pensado siquiera en contarle acerca de Seokjung, porque estaba más que claro que Namjoon era su padre.

Y es que el mismo recluso había afirmado sus pensamientos de que había perdido al bebé en manos de sus captores.

No obstante, la existencia de Seokjung significó un nuevo pendiente con el hombre, y Seokjin sentía realmente necesario comunicarlo para finalmente poder dejarlo atrás.

Estaba escrito con letra clara, y había sido muy directo respecto al tema. La carta contenía una corta y puntual frase.

"Mi cachorro nació bien, prometo cuidarlo."

Respiró profundo una vez más antes de volver a subir aquellos escalones. Y el rostro del oficial se ensombreció cuando le vió llegar, más el omega no comprendió la razón.

- Kim Seokjin.

- Eh... Si, también vine ayer... -comentó nervioso, pues lo tomó por sorpresa.

El oficial que le recibió era el mismo de la vez anterior, a quien le dejó la crema.

- ¿Qué necesita? -cuestionó el oficial.

- Vengo a dejar una carta para-

- Disculpe, -interrumpió- ¿No hablé con usted ayer?

Mi caso especial [NJ] (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora