La Elegida [TMNT] (Terminada)

Capitulo 14

Aún continuaba viendo la ventada de una manera atónita. Él levanto la cabeza, sonrió apenas.

Raph intentó arrodillarce e hizo una mueca extraña, retorciéndose de dolor. Eso me hizo reaccionar y me acerque a la ventana. La abrí y el viento helado mesclado con la lluvia golpeo mi rostro. Pase el brazo de Raph por alrededor de mis hombros y lo ingrese a mi habitación.

Lo obligue a sentarse en el suelo y me arrodille hasta quedar a su altura.

- Por dios Raph ¿que te paso?- pregunte.

Su caparazón tenía pequeños rasguños, había golpes por todos lados y su brazo sangraba. Tenía una herida abierta. El roce de mis dedos en la herida provocó que diera un pequeño salto, seguido de dolor.

- Quédate aquí, iré por el botiquín- el asintió.

Baje de manera apresurada las escaleras. Llame a mi abuela pero ella no respondió ¿dónde estaría? En la mesa de la cocina había una nota, me acerque y la tome.

"Victoria acabo de salir por una urgencia, Jane me llamo y dijo que se quedara con su amiga Melody hasta que la tormenta pare"

Volví a dejar la nota en su lugar y seguí buscando. Busque en las alacenas, el botiquín estaba en el fondo de una de estas. Moví algunos alimentos y lo saque. Volví a subir las escaleras e ingrese a mi habitación. Me senté al lado de Raph y abrí el botiquín. Tome el algohon y lo moke en alcohol, volví a mirarlo.

- Puede que esto te duela- dije.

Respire ondo y pase el algodón por la herida, desinfectándola.

- Mierda...- susurró con dolor, apretando sus puños. Al sacar la suciedad y la sangre seca que había alrededor y dentro de la herida pude ver que era profunda, tendría que cerrarla. En Toronto mi tío me enseñó como curar heridas y como vendar de una forma decente. Por suerte dentro de este botiquín había un hilo especial que es para esta clase de procedimientos y un hilo.

- Wow, que vas a hacer- dijo mirándome no muy seguro.

- La herida es profunda, tengo que cocerla.

Mire a Raph y el desvió la mirada, seguramente queriendo evitar un interrogatorio. Mala suerte.

- ¿Ahora me dirás que paso?

- No paso nada.

- ¿A esto llamas nada?- dije apuntando su brazo.

- Bueno, tal vez tuve una pelea.

- Con quien.

- Tan preocupada estas por mi verdad- me sonrió de lado.

- Claro que no- dije- y no me cambies de tema- dije, el rio.

- Si tanto quieres saber...- suspiro antes de hablar- luche con el pie, me superaban en número.

- No te creo- termine de cerrar la herida y busque las gasas en el botiquín.

- ¿Me estas llamando mentiroso?- volví mi vista a él y su hermosa sonrisa se había borrado y ahora su expresión es seria.

- Tú ya sabes que los pies son fáciles de vencer, varias veces te he visto luchar con ellos y los derrotas fácilmente.

- Lo sé- dijo sarcástico.

- Sospecho que peleaste con alguien más- dije- ¿me dirás con quien?- el frunció el ceño, recordando a la perdona con la que habia peleado.