Niall llega directo desde Verona cuando ya está a punto de amanecer. Lo primero que hace es venir a ver si necesito algo y después se encierra en el despacho de Mario. No se puede oír lo que están hablando, pero gracias a que las cortinas no están echadas, puedo verlos discutir a través del cristal.
Su discusión parece bastante fuerte, Niall parece echarle en cara algo y Mario le responde con rotundidad, entonces ambos ven hacia afuera y se dan cuenta de que estoy obsevándolos. Niall se encarga de cerrar los estores impidiéndome seguir viendo su discusión.
Pasan algunos minutos hasta que por fin Niall sale y se dirige hacia mi.
-Como muy tarde mañana por la mañana Louis está fuera -dice. Lo miro con el ceño fruncido. No sé de que han estado hablando, o más bien discutiendo, él y Mario, pero me he quedado muy desconcertada-. Mira, Bianca, si pudiera aclararía tus dudas. Pero creo que debe ser Louis quien lo haga.
Mario sale de su despacho y camina hacia nosotros, su mirada se cruza con la de Niall y después el rubio nos deja solos con la excusa de que va a ver a Louis. Se sienta a mi lado y juega con sus manos.
-Cuando Louis salga de aquí y hable contigo... por favor, ven a verme. Pase lo que pase, ven a verme, necesito que me escuches -murmura dejándome todavía más confundida-. Espero que él de verdad te haga feliz.
Tal y como Niall prometió, Louis es dejado en libertad unas horas más tarde y, más pendiente de mi que de otra cosa, nos vamos a su hotel. Niall se despide de nosotros en la puerta y nos dice que si necesitamos algo no dudemos en llamarlo. Louis le agradece la rapidez con la que resolvió el asunto y después, ambos entramos en la habitación.
Tras besarme, me avisa de que se dará una ducha y se encierra en el baño dejándome unos minutos para pensar. Niall y Mario se conocen, su discusión de esta mañana me lo dejó bien claro. Y un montón de dudas al respecto me embargan en este momento.
Cuando Louis sale del baño, enroscado en una toalla, decido que es momento de preguntarle por lo sucedido, y así lo hago.
-¿De qué se conocen Niall y Mario? -él se gira y me mira confundido-. Niall dijo que tú me explicarías todo, así que ya estás empezando, y desde ahora te digo que no quiero más mentiras, Louis.
Él suspira y después camina hacia la cama, dónde se sienta y me tiende la mano para que me acerque. Decido quedarme donde estoy y cruzarme de brazos hasta que me explique todo con claridad. Deja caer la mano y mira hacia el suelo buscando las palabras adecuadas.
-Cuando te fuiste supe que había cometido un error. En las cartas que me estaban llegando ponía claramente que si no me alejaba de ti, terminarían haciéndote daño -comienza a hablar, pero esta parte de la historia ya me la sé-. En un principio pensé que era simplemente una broma, pero después... aquel hombre entró en tu casa y tartó de propasarse contigo y... entonces me di cuenta de que iban muy enserio -Hace una pequeña pausa en la que se pasa la lengua por los labios-. En ese momento decidí que lo mejor era terminar con lo nuestro hasta que supiese quien estaba detrás de esas amenazas, pero fui tan cobarde que solo te escribí una nota y me largué.
En ese momento quiero decirle que sí, que verdaderamente fue un cobarde y llegué a odiarlo por ello, pero su mirada me dice que debo callar y escuchar.
-Mi idea era que no estuviésemos juntos para que no te hiciesen nada, pero al mismo tiempo encargarme de tu seguridad personalmente, pero cuando te fuiste de Verona casi me vuelvo loco. ¿Cómo se supone que iba a cuidar de ti si ni siquiera estabas en la misma ciudad? -hace un gesto de desesperación con las manos que me hace saber que verdaderamente lo pasó mal en aquel entonces-. Lo único que se me ocurrió fue ponerme en contacto con uno de mis socios aquí en Roma, él aceptó protegerte, pero como no estaba cien por cien seguro de que él podría encargarse de tu protección, envié a dos de mis mejores hombres para que vigilasen tus pasos y se encargasen de que nada ni nadie te hiciese daño.
Nunca me había hablado de sus socios hasta ahora, yo siempre pensé que los único con los que tenía trato era con Harry y Niall. Miro a Louis para que continúe hablando, su semblante es todavía más serio que minutos antes.
-Y tal y como predije, el muy imbécil estaba más preocupado por meterse entre tus piernas que en cuidarte y si no llega a ser por mis hombres hoy estarías muerta -mi boca se abre por la sorpresa. No puede ser quien estoy pensando-. Me encargué de mandarle un mensajito a través de Frattini y Galliano, pero no terminó de pillarlo, así que decidí intervenir personalmente.
-No puede ser... -niego repetidamente con la cabeza mientras me paso las manos por el pelo. Louis se levanta y agarra mi cara entre sus manos.
-La misión de Mario era protegerte, no alejarte más de mi.
-No, me niego a creer que Mario formara parte de todo esto. Él es policía, él...
-Él es nuestro aliado. Necesitábamos a alguien dentro del cuerpo y él estaba dispuesto a ser ese alguien. Mario no es tan santito como piensas Bianca. A él lo mueve la venganza. Igual que a mi -murmura-. A fin de cuentas, no somos tan distintos.
Me llevo las manos a la boca. Nunca me hubiese esperado que Mario estuviese involucrado en la mafia. Él... él es tan bueno. Por Dios, no me lo puedo creer, simplemente no puedo.
-¿Por qué...?
-¿Por qué qué? ¿Por qué se ha metido en este mundo? -asiento-. Por su madre. Como te he dicho, a él lo mueve la venganza. Quiere acabar con el asesino de su madre.
-Pero él es policía, podría detenerlo y hundirlo en la cárcel de por vida, no hay necesidad de que...
-Bianca, cuando alguien te arrebata un ser querido, lo único que quieres es destrozar a ese miserable con tus propias manos. y te lo digo por experiencia.
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Heeey. ¿Os esperábais algo así? El buenecito de Mario es un mafiosillo jeje y aun por encima aliado de Louis. Bueno, espero que os guste el capítulo. Besos :)
