Hasta Que Ella Te Recuerde.[finalizada].

parte 19.

Un idiota, soy un idiota, el idiota más grande que pudo haber existido, besé a Tara, acabo de besar a la amiga de mi ex novia.

Cuando llego a casa saludó a mis padres, ceno con ellos y luego subo a mi habitación, mi mente no puede dejar de pensar en lo ocurrido y vuelvo a pensar que soy un idiota, por inercia me llevo los dedos a mis labios, cierro los ojos y es como si aún pudiera sentir los labios de Tara sobre los míos, un escalofrío me recorre el cuerpo entero, no voy a negarlo, deseaba besarla, solo que una cosa era desearlo y saber que nunca pasaría, pero ahora que pasó sigo deseando más, ¿que ocurre conmigo?, dejo escapar un suspiro y algo dentro mío se enciende, era pura euforia y de la nada sonrio, al darme cuenta borro la sonrisa, de hecho no se como sentirme, cuando vi la culpa en su mirada me sentí mal ,porque fui yo quien la besó, vuelvo a sonreír sin poder contenerme, pero ella me devolvió el beso con ganas, si, ella también quería besarme.

Mi mente comienza a moverse con velocidad, pienso en las veces que Tara me demostraba lo mucho que le desagrado, pero ahora me doy cuenta de que no es así, ella solo se protegía a si misma,mi sonrisa se hace más grande, yo le gustaba, no, yo le sigo gustando.

La adrenalina me recorre todo el cuerpo, tenía ganas de volver a casa de Tara y terminar lo que habíamos comenzado, pero en medio de todo la razón aparece, Tara es la amiga de Morgan, cuando Morgan recupere la memoria si es que lo hace sufriría tanto si sabe lo que sucedió entre Tara y yo, pero de algo estaba seguro, lo que sentía por Morgan en estos meses comenzaba a esfumarse y ahora entiendo por qué y Tara tenía mucho que ver con lo que me sucedía.

Al día siguiente a la escuela decido a hablar con ella, decirle cómo me siento, aclarar lo del beso, bueno no estaba seguro de que decirle, pero necesitábamos hablar, pero ella decidió evitarme, a la hora del almuerzo no apareció en la cafetería, la busqué en la biblioteca y tampoco estaba ahí, a la salida tampoco la vi y eso me enojaba, se comportaba como una cobarde, prefiriendo ocultarse de mi y lo peor de todo es que lo hizo toda la semana.

- ¿ me vas a decir por qué Tara se anda quedando en el baño de las chicas en los recesos?- Amanda me detiene en el estacionamiento antes de irme y me lo pregunta de una.

-¿se ha escondido ahí?- digo riéndome y ella asiente.

- así es, ahora dime por qué hace eso.

- la besé- Amanda se sorprende y luego sonríe.

- y te correspondió el beso, ahora lo entiendo todo.

-¿ cómo sabes que me correspondió?.

- es que a ella le gustas, pero siente que estás prohibido.

- porque fui el novio de Morgan.

- así es, ahora la pregunta es,¿ a ti te gusta Tara o te sigue gustando tu ex?.

- me gusta Tara- digo finalmente y sonrio como un bobo- y ni preguntes como sucedió porque no tengo la respuesta.

- por Dios, tienes que hablar con Tara, ella lo tiene que saber.

- lo sé, aunque conociéndola me mandará al diablo solo para que crea que ella no siente nada.

- si ,es lo más seguro, ¿ pero no vas a rendirte cierto?.

- no, el lunes voy a enfrentarla, quiera o no.

- y yo estoy más que ansiosa de saber que sucederá, ahora llévame a casa.

- bien.

Amanda vive en un alquiler, al parecer se independizó de sus padres o es lo que me dijo, se despide de mi y antes de irme mi celular comienza a sonar, me quedo sorprendido al ver el nombre de Morgan, ella me estaba llamando, dudo en contestar pero al final lo hago.

- hola...- digo y recibo la respuesta al instante.

- hola Derek y antes de que preguntes, no, aún no recupero la memoria, solo te llamo para que vengas a recoger algunas cosas tuyas de mi casa.

- ah, claro iré ahora.

- bien.- ella cuelga la llamada y conduzco hasta su casa.

Al llegar la señora Lilian me recibe como siempre ,con cariño, mientras que Morgan me dice para que pase a su habitación. Subo las escaleras y me encuentro con una caja sobre su escritorio con mi nombre en el.

- no sabía que hacer con los regalos así que quisiera devolverte todo.

- bueno hubiera sido más fácil tirarlos- ¿ ahora que haría con ésto?, quizás donarlo a la iglesia, mucho de lo que hay aquí son peluches.

- pues no quice.- me doy la vuelta para preguntarle por qué no quiso y retroceso un paso atrás chocando con la mesa, Morgan se acerca a mi y me rodea el cuello.

- quizás ya no somos novios pero podríamos acostarnos al menos- me alejo de ella.

-¿ahora olvidaste que tienes novio?.

- Eric y yo términos hace un mes.

- pues lo siento, no quiero nada contigo- me doy la vuelta para irme pero me detengo- puedes tirar lo que haya en esa caja.

Salgo de la casa de Morgan furioso, la desconozco totalmente, jamás pensé que podría comportarse así, ahora estoy más que seguro de que me gusta Tara, quizás si meses atrás  Morgan hacia esto le correspondería el beso al instante,pero antes de saber que besar a Tara era el cielo y el infierno a la vez, antes de saber que mi corazón podía acelerarse tanto con solo pensar en ella, antes de saber que disfrutaba de su presencia a mi lado, lo que sea que me ha hecho Tara queriendo o sin darse cuenta funcionó para robarme el corazón, si, Tara Miller me robó el corazón.