Tengo ojeras bajo los ojos y mis ánimos están por los suelos, mamá lo nota así que compramos todo lo que necesitamos rápidamente para volver a casa.
- se nota que no dormiste bien Tara.
- tuve una pesadilla- confieso y suelto un bostezo más en el día, cuándo desperté del sueño no pude volver a dormir, mi mente no paraba de pensar, en buscar soluciones, en regañarme por mis acciones, al final todo me dio vueltas y terminé con un dolor de cabezas terrible que no me dejó dormir.
Mi celular suena una vez más y está vez lo apago, Eric no ha dejado de llamar y mandar mensajes pidiéndome disculpas, pero una disculpa no arreglará la situación, así que me tomo mi tiempo para pensar, quizás lo mejor sea dejar de verme con el por un tiempo.
Al llegar a casa mamá y yo preparamos el almuerzo, hablamos de tonterías y al final me comenta que esta noche Albert su compañero de trabajo vendrá a cenar.
- espero que se lleven bien- puedo
notar la preocupación en su tono de voz así que pienso que decir para tranquilizarla.- yo pondré todo de mi parte para que así sea- ella sonríe y se relaja.
- no pude tener una hija mejor.
- pues no, como yo tampoco pude tener una mejor madre.
Y era verdad.
Mamá me tuvo a los diecisiete, mis abuelos la echaron de la casa y tuvo que hacerse cargo de mi sola, por lo que se todo el dinero que mi padre me ha dado por la manutención ella no ha usado siquiera una parte de ese dinero, todo lo ha puesto en una caja de ahorro para poder pagarme la universidad, así que todo lo que tenemos ahora fue gracias a su voluntad de trabajar duro, mi madre era una mujer admirable y para mi era más que perfecta.
Por la noche finalmente conozco a Albert, el sujeto es un hombre bastante agradable, nos cuenta que es divorciado y que se mudó a la ciudad hace como cinco meses, también nos comenta de que no tiene hijos y puedo notar las miradas coquetas que se dan el con mi madre, hasta creo que comienzo a ser mal tercio, así que al acabarme el postre me disculpo y subo a mi habitación dejándolos a ambos solos.
Ya con el pijama puesto prendo mi móvil para escribir con Eric y decirle que será mejor alejarnos por un tiempo, pero antes de hacerlo recibo una llamada de Morgan, la emoción me recorre todo el cuerpo al instante, mi amiga me estaba llamando y no puedo evitar creer que ha recuperado la memoria, sin pensar siquiera que era algo muy distinto las razones de su llamada.
- hola Morgan, co...
- el tal Derek está aquí haciendo un escándalo- me corta de una y se nota lo molesta que está.
-¿cómo que haciendo un escándalo?.
- el muy idiota está frente a mi casa completamente borracho y se le ha ocurrido la grandiosa idea de lanzar piedritas a mi casa.
- por Dios...
- así que me encantaría que llames a su familia para que se lo venga a llevar o le insistiré a mis padres para que llamen a la policía.
- espera Morgan no llames a la policía yo me encargo de él.
- más te vale- dice ella y cuelga la llamada.
Ni en mis más locos sueños creería que esto pudiera pasar, Derek borracho, mi mejor amiga ahora era una desconocida que quería mandar arrestar a su novio y yo intentando salvarlos.
Me pongo un suéter y unos tenis deportivos para salir por mi ventana, no voy a arruinarle la noche a mi madre ,así que me voy sin decirle, solo espero que Albert no quiera irse muy pronto o mamá querrá subir a mi habitación a hablar conmigo.
Corro por las calles como una loca, Morgan solo vivía a unas cuadras de mi casa así que me encuentro frente a su casa después de diez minutos, con los pulmones gritando por un poco de oxigeno y las piernas temblando casi ni puedo sostener todo mi cuerpo por mi misma, sin mencionar el dolor cerca de las costillas, pero todo se me olvida al ver a Derek parado afuera y mirando hacia la ventana de Morgan.
Me acerco lentamente a el pensando en que hacer o decir, esta situación también me afectaba bastante.
- Derek...- el gira el rostro hacia a mi y se me corta la respiración, estuvo llorando, estubo bebiendo demasiado, puedo sentir el olor de alcohol desde donde estoy, se que si da un paso se va a tambalear, nunca lo había visto así.
- yo..., creo, creo que..., no va a abrir la puerta.
- será mejor que subas al auto, te llevaré a casa Derek.
- no, yo quier...
La puerta de la casa de Morgan se abre y la señora Lilian se acerca a nosotros.
- hola Tara, hola Derek.
- buenas noches señora, disculpe a Derek, usted lo conoce, sabe que el no es así.
- lo sé cariño, pero será mejor que lo lleves a casa,¿sabes conducir?,¿o quieres que mi esposo se lo lleve?.
- tranquila, yo puedo hacerlo.- realmente no tenía idea de dónde se encuentra la casa de Derek pero por lo que Morgan me contaba antes los padres de Derek le exigían mucho y que él no quería decepcionarlos, así que creo que solo por esta vez será mejor llevarlo a mi casa.
Derek no quiere subir a su auto pero al final lo hace, conduzco hasta casa y dejo el coche a media cuadra solo para que mamá no lo vea, llevarlo hasta mi ventana es todo un desafío, desde taparle la boca con las manos para que no diga incoherencias, hasta empujar su cuerpo hasta adentro, al final lo siento en mi cama y le saco los zapatos, lo acuesto y lo cubro con una manta, el se queda dormido de inmediato.
Me quedo viéndolo, su rostro se ve tan relajado, hasta podría besarlo y él no recordaría nada, pero eso no estaría bien por tantas razones, me acerco a él y le acaricio la mejilla, sonrio al notar que tiene barba saliéndo, suspiro, dolía saber que el estaba prohibido.
Tú sólo corre a salvar al pobre de Derek, querida Tara.😅🤣
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Hasta Que Ella Te Recuerde.[finalizada].
Teen FictionUna serie de acontecimientos termina colocando la vida de Tara Miller de cabezas, desde una amiga que tras un accidente termina perdiendo la memoria, la aparición de un padre y hasta darse cuenta de que ha entregado el corazón a un amor prohibido d...