Amanda.
Llego al pequeño alquiler en donde he vivido desde hace seis años, el lugar es pequeño, solo consta de una habitación, un baño y una cocina, pero era mi lugar, viví aquí con mi madre hasta que esta se marchó hace dos años atrás con un tipo cuyo nombre desconozco, desde ese entonces no la he vuelto a ver,¿y por que recuerdo eso ahora?, pues se fue el día de mi cumpleaños, hoy cumplo los dieciocho años.
Desde que se fue me he mantenido por mi cuenta, claro que fue difícil, mi vecina al darse cuenta me ha pasado un plato de comida cada vez que puede, pero eso no era suficiente, tampoco lo fue cuando la señora del alquiler me bajó la renta, así que busqué un trabajo , sin experiencia y siendo menor nadie quería darme uno, así que al final me convertí en una versión más de mi madre, conseguí dinero acostándome con hombres, desde entonces solo veo la vida como es, de blanco y negro, los demás colores simplemente desaparecieron.
Dejo mi bolso por el perchero, entro al baño y me saco la ropa, me meto al baño y dejo que el agua caliente me recorra todo el cuerpo, hace media hora me acosté con Daniel, un chico que quería perder su virginidad y pagó mi presio, los labios me tiemblan, suelto un sollozo, me siento sucia, muy sucia, yo no quería una vida así, pero la tenía y solo quiero terminar el bachillerato para irme de esta ciudad, a comenzar una nueva vida, quizás la única razón por la que no me voy de aquí es porque la sigo esperando, espero a mi madre, quien decidió abandonarme,¿por que?, quizás para poder gritarle y sacarle en cara todo, porque tengo tantas cosas que decirle, porque me lo he guardado todo.
Salgo del baño con los ojos hinchados, voy directo a mi cama, estaba cansada, desecha, solo quiero olvidarme de todo y para mañana todo estará bien.
Al día siguiente me levanto temprano, Tara me invitó a pasar el día con ella y su padre, eso me emociona, el día que me senté con Derek y ella no pensé que podríamos ser amigas, bueno yo los veía como amigos, con ellos no uso tantas máscaras como lo hacía con el equipo de porristas, así que me arreglo y tomo un taxi, al llegar a casa de Tara ella ya está esperando afuera con una mochila en la espalda.
- hasta que llegas, pensé que me dejaste plantada.
- claro que no.- Tara se me queda viendo con atención, eso me incomoda un poco.
- tienes los ojos hinchados,¿ estuviste llorando?.
- bueno un poco, me quedé viendo una película hasta tarde y era tan triste- ella asiente y se que no me ha creído, pero tampoco pregunta.
El papá de Tara sale de su casa y me saluda, ambos son muy parecidos, entonces nos pide que subamos al auto para irnos, al parecer iremos a la playa, de ida también lleva a la hermana pequeña, Elena, la niña no deja de hacerme preguntas de como tengo el cabello rubio tan largo.
- ojalá mi cabello fuera así de bonito.- dice Elena soltandome un mechón que tenía entre sus pequeñas manos.
- será así de lindo, solo ten paciencia.
- y deja de moverte tanto Elena- dice su padre y ella solo se ríe.
Cuando llegamos a la playa Tara saca de su mochila un mantel y varios taper con comida, yo la ayudo y luego vamos al auto para cambiarnos de ropa y meternos al agua.
- Elena te adora Tara.
- si ,lo se y yo a ella, es muy inteligente.
- se nota.
- por cierto te fuiste temprano del colegio.
- si, es que tenía asuntos que hacer- o mejor dicho trabajo, como el acostarme con alguien, suspiro y alejo esos pensamientos.
- entiendo, bueno no sé si quieres pero podrías quedarte a dormir esta noche en mi casa, derek vendrá mañana a ver una película.
-¿ y no quieres estar a solas con Derek?- bromeo y Tara rueda los ojos.
- no, no quiero, ya te dije Derek está prohibido.
- pues yo creo que te tiene ganas,¿ a caso no te diste cuenta como te vio el día de la fiesta?.
- es hombre, obviamente va a notar que soy una chica.
- bueno pues creo que le gustas.
- basta, no quiero hablar sobre eso, además ambas sabemos que cuando Morgan recupere su memoria ellos van a regresar.
- lo dudo, cualquier posibilidad que había entre ambos se perdió el día en que ella se acostó con Eric en esa fiesta, y más cuando el le suplicó que no lo hiciera.
-¿ tú estuviste ahí?
- si, lo vi todo.
Tara se queda perdida en sus pensamientos mientras que yo me quedo viéndola, la conozco hace tiempo pero hasta ahí, quien diría que ahora es mi amiga y yo le ando diciendo estas cosas, supongo que quizas había una pequeña esperanza de que mi mundo deje de ser completamente blanco y negro, quizás podría tener más colores, definitivamente podría.
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Hasta Que Ella Te Recuerde.[finalizada].
Novela JuvenilUna serie de acontecimientos termina colocando la vida de Tara Miller de cabezas, desde una amiga que tras un accidente termina perdiendo la memoria, la aparición de un padre y hasta darse cuenta de que ha entregado el corazón a un amor prohibido d...