Lo Juro

Capítulo 21 🔥

Gulf llevaba dos días dormido. Mew ya había sido dado de alta y Max por fin había despertado. Con respecto a este último, el médico había dicho que ya no tenía edad para sufrir aquellos sustos. Que su corazón se estaba debilitando. También le sugirió que hiciera más ejercicio. Había sido un alivio que todos estuvieran bien.

Desde que habían dado el alta a Mew, no se había despegado de Gulf, lo limpiaba, lo movía, le hablaba, le cantaba y dormía a su lado.

- Amor, ¿por qué no despiertas? Te necesito bebé- decía Mew al final del segundo día. Necesitaba mirar esos ojos negros enamorados –amor, abre los ojos por favor - decía mientras acariciaba el rostro de su amado. Habló y habló hasta que Gulf empezó a mover una de sus manos. Abrió poco a poco sus ojos, la luz de la habitación le hacía daño. Después de parpadear varias veces pudo ver ese rostro que tanto amaba. No pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas.

- M..e...w...- intentaba decir Gulf, pero su voz era un susurro.

- Shhhh, amor no hables, tranquilo...- acariciaba la cabeza de Gulf y tampoco podía evitar que sus lágrimas se acumularan en sus ojos, por la emoción de ver despertar a su amado y diciendo su nombre – no puedes hablar porque tienes una lesión en tus cuerdas vocales, no hagas esfuerzos -seguía diciendo, acercándose mucho más a la carita herida de Gulf.

- M...e...w - susurraba Gulf llevando sus manos al rostro de Mew atrayendo su oreja a su boca para que lo escuchara – yo... no..ten...go... na...da...- paró para respirar y siguió -con... Briiiight- terminó de decir y soltó a Mew, este lo miró y bajó su mirada, sus lágrimas brotaron como cascada.

- Amor, lo sé, lo sé - Mew intentaba respirar, él ya se había olvidado de eso, para él lo de Bright no tenía ninguna importancia, pero para Gulf era diferente, claro él no sabía que eso había sido parte de una trampa de San.

- Yo... te...a...mo...so..- paró para pasar saliva – so...lo...a...ti...- decía Gulf y Mew solo lloraba. Por dios, Gulf estaba como estaba y aun así se preocupaba por él, se estaba preocupando por dejarle claro que lo amaba. No podía estar más enamorado de ese hombre.

- Lo sé amor, lo sé y yo también te amo solo a ti – tomó las manos de Gulf y las besaba- ahora deja de hablar, por favor, te puedes hacer más daño-.

- No... me ... de...jes... -dijo Gulf aun llorando. Él recordaba que su última conversación por teléfono había terminado con Mew diciéndole que no regresaría a casa.

- No amor, nunca, nunca, jamás, por favor no pienses en eso. Te contaré todo ¿vale? Pero tienes que tranquilizarte por ahora – decía Mew limpiando sus lágrimas y las de Gulf. Después acercó la silla más a la cama para tomar sus manos – en la mañana vendrán tus padres y Thanya con una Tablet para poder comunicarnos ¿vale? – le decía mirando su carita. Acomodó la cama de Gulf para que pudiera estar sentado, más o menos. Gulf lo miraba y asentía lentamente con su cabeza. Sonreía. Mew sintió que su corazón por fin sonreía de nuevo también - ¿tienes hambre? ¿quieres que te pida algo? – preguntó, pero luego movió la cabeza negando. Gulf no podía comer solido todavía, tendrían que esperar a que él médico lo revisara - ¿Agua? – preguntó y Gulf asintió. Le acercó el vaso de agua y Gulf bebió, aunque con un poco de dificultad, se notaba en los gestos que hacía.

- Bien, te voy a contar las cosas, porque quiero que sepas que no nos vamos a volver a separar nunca. No quiero que tengas dudas – empezó a hablar Mew decidido. Era lo mejor hablar. Gulf sonrió y se acomodó para escuchar- Amor, San regresó, se enteró de la venta de la mansión y quería que le diera la mitad del dinero – soltó rápidamente como quien confiesa una culpa que ha cargado por mucho tiempo. Gulf no le quitó la mirada, quería saberlo todo – yo... yo no quería, ya te había prometido que sería para tu proyecto, así que ignoré su pedido – la mirada de Gulf cambió, bajó un poco los ojos y después miró hacia otro lado.