|Chocolate|

50 10 1
                                    

Otro día de vida para Se Rim.

Terminé mi turno, ¡por fin!

¿Se Rim? -Dijo Han Eun Ji-

¿Qué quieres? -Respondí mirándola con fastidio para luego caminar hacia los vestidores, con ella siguiéndome-

Es que quería decirte que me tengo que ir, mis padres tuvieron complicaciones de salud y- -La interrumpí-

Entonces lárgate, no sé qué haces aquí todavía. -Dije sacándome el delantal evitando el tema-

Es que... Necesito que me cubras. -Suspiré internamente-

Si, si, no me sorprende. Ya vete. -Dije volviendo a ponerme el delantal-

¿De verdad? -Emocionada- ¡Gracias! -Agité mi mano dándole la espalda y ella se fue-

No puedo creer que vaya a hacer esto de nuevo.

Rodé los ojos y caminé hacia la oficina de Park Ji Won, mi jefa.

Hola Park Ji Won. -Hice una reverencia, ella me miró y frunció el ceño-

¿Jo Se Rim? ¿Qué haces aquí todavía? -Preguntó levantándose-

Han Eun Ji me pidió que la cubriera. Venía a avisarle que tomaré su turno. -Ella rodó los ojos-

¿Cuántas veces vas a hacer esto? -Se cruzó de brazos- Quiero que vayas a casa. Ya ha pasado más de una semana. -Dijo molesta-

Lo sé. Pero esta vez dijo que sus padres tenían complicaciones de salud... -Acomodé cabellos sueltos detrás de mi oreja, y ella sonrió de lado-

Sus padres están totalmente bien. Eun Ji cree que no tengo sus números. -Agitó su teléfono con una sonrisa burlona y yo abrí la boca-

¿Y entonces por qué la dejó irse? -Fruncí el ceño confundida-

No le pagaré. Al fin y al cabo, no está trabajando y cada vez que puede, busca la manera de escapar. -Se rió y yo también- Pero lo que no le pague a ella, si es que decides tomar su turno, te lo pagaré a ti. -Abrí los ojos sorprendida-

¿En serio? ¿Por qué? -Sonrió-

Lo necesitas. -Sonreí un poco- Además, todas ganamos. Eun Ji hace lo que quiera, tú trabajas el doble pero ganas el doble, y yo no le pago a gente que no trabaje dejando de lado a los que si cumplen y hacen hasta más de lo que deberían. -Asentí-

Me parece bien. Pero hoy me gustaría ir a casa. -Ella asintió-

Es lo justo. No hay tanta gente hoy, así que creo que puedes irte. Cuídate. -Dijo con una pequeña sonrisa volviendo a sentarse-

Muchas gracias, nos vemos mañana. -Dije de la misma manera, despidiéndome con una reverencia y salí de su oficina-

Llegué a casa. Eran aproximadamente las ocho de la noche. Gracias a que había ventanas y farolas fuera de mi casa podía ver el camino a mi habitación sin la necesidad de encender las luces.

Al entrar a mi habitación me quité la ropa y los zapatos que tenía, y los acomodé. Me vestí con una camiseta amarilla manga larga, un jogging gris y unos tenis blancos. Me puse una mascarilla facial mientras estaba sentada en la silla de mi habitación y coloqué el temporizador de 18 minutos.

Qué bueno que Ji Won me hizo esa propuesta. Por fin mi esfuerzo va a valer la pena. Pero debo dejar de permitirle a Eun Ji que me manipule como si fuera una estúpida.

Cree que tengo tiempo y energía para sus problemas o necesidades. Yo quiero paz, no más dramas emocionales de los que ya tengo.

Sonará egoísta pues ella fue la que me consiguió el trabajo en la cafetería, casi después de que terminara la secundaria. Pero no contaba con que tuviera dobles intenciones. Ji Won tiene razón, ella se está aprovechando y yo que casi no tengo vida social, ¿me va a quitar el poco tiempo que tengo libre? No lo creo.

¿Ella? o... ¿Ella? //Imagina con Choi San//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora