Episodio 17 - Apoyo

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Wei Ying se despertó temprano en la mañana cuando se dió cuenta de que Lan Zhan no estaba acostado como era costumbre.

Normalmente era él quien se levantaba primero, Lan Zhan no podía despertarse antes de las 8 de la mañana, y lo hacía casi que obligado.

Se levantó y lo empezó a buscar por la casa, ellos habían estado viviendo juntos desde que Wei Ying firmó el contrato en la oficina. Cuando lo vio, se dio cuenta que su ceño estaba fruncido mientras miraba la computadora sentado en el piso de la sala.

–Baobei, ¿está todo bien? –dijo Wei Ying mientras se acercaba a donde estaba Lan Zhan y se sentaba a su lado.

–Sí lo estoy, solo que hay muchos problemas en la compañía.

Su hermano lo había llamado en la madrugada, uno de los prototipos que estaban manejando con una compañía en Londres tenía problemas, al parecer, el dron que estaban creando se volvió loco y casi le corta el cuello a un empleado.

Si no solucionaban eso, podrían presentarles una demanda.

–Debe ser algo grave, se te ven muchas ojeras.

Coloco sus manos en la espalda de Lan Zhan y le empezó a hacer un masaje para que se relajara.

–No te preocupes, –le dijo Wei Ying con una sonrisa. –todo se va a solucionar.

Se levantó y fue a prepararle un té caliente a Lan Zhan y se los llevo junto a unas galletas que quedaban así.

Ya van varios días que él tenía que trabajar de noche, si no era por una cosa era por otra, lo tenía preocupado.

–Ten.

Lan Zhan levantó la mirada y vio lo que Wei Ying le había preparado.

–Gracias.

Le sonrió de manera sincera.

Cada vez que Wei Ying tenía esos gestos hacia él, lo hacía sentir muy extraño.

Desayuno en las mañanas.

Té y galletas cuando tenía que trabajar hasta tarde.

Su ropa acomodada cuidadosamente.

Ese tipo de gestos lo hacían sentir extraño y cómodo, no sabía porque se sentía así al respecto.

–¿Puedo ver? –Wei Ying extendió la mano para tomar la computadora.

–Sí claro.

Wei Ying se colocó sus lentes y empezó a leer todo lo que había pasado y porque lo había tenido despierto hasta tan tarde.

Era muy grave el asunto.

Pero había una solución, se dio cuenta de la falla que tenía cuando vio el estado del dron. Había sido un sabotaje.

Iba a comentárselo a Lan Zhan, pero se dió cuenta de que estaba durmiendo.

Cuando toco su rostro se dió cuenta de que tenía fiebre. Debió haber sido por estar despierto tantos días sentado en el piso durante la madrugada.

Cerró la computadora y fue a recostar a Lan Zhan a su cama. Fue a buscar unos trapos húmedos y se los colocó en la frente para tratar de bajar su fiebre mientras escribía acostado en la computadora las indicaciones que tenía que hacer su equipo para poder solucionar el problema con el dron.

–Mmmm.

Wei Ying volteó cuando sintió que Lan Zhan estaba incómodo. Y le colocó el trapo nuevamente en la frente.

El Jade y El Loto (WangXian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora