Capitulo 12

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Era sábado.

Los cuatro amigos habían sido invitados a cenar en casa de Naying, por lo que después de que cada quien terminara con sus ocupaciones pasaría por la casa de esta.

Yibo se encontraba en la academia recuperando las horas perdidas durante la semana, Wen Han estaba en casa de sus padres, Jackson cubría el turno de un colega en el trabajo y Xiao Zhan estuvo con Naying desde la mañana, pues el pelinegro quiso ayudarla a preparar todo y de paso aprender algunas de las habilidades culinarias de la mujer.

_ Bueno chicos- hablaba Naying, una vez estuvieron todos reunidos, al tiempo que se acercaba con una bandeja llena de pastelitos y galletas- aquí está el postre- colocó la bandeja en medio de la mesa y añadió- fue preparado especialmente por Xiao Zhan.

Miró a los presentes quienes parecían estar asustados de ser intoxicados y rió por lo bajo. Pese a que era la primera vez que Zhan hacía tales cosas, había demostrado tener una afinidad inigual para aprender. Algo que Yibo sabía perfectamente pues siempre le enseñaba cosas nuevas, como escribir, leer, entre otras cosas.

Xiao Zhan se encontraba detrás de Naying. Se notaba la preocupación en su rostro, presionaba sus manos, las cuales estaban entrelazadas pegadas a su  pecho y rozaba las uñas de sus pulgares la una con la otra repetidas veces. Estaba desbordando nervios.

_ Pero muchachos no solo se miren, tomen uno y deléitense con el sabor.

_ ¿Le ayudaste a prepararlos Naying?- pregunto Wen Han dudoso.

La mujer alzó la cabeza orgullosa y sonrió.

_ Solo le di la receta y la explicación, lo demás es trabajo de Zhan.

_ Tal vez no es tan ...

Xiao Zhan no alcanzo a terminar su frase cuando Yibo ya había tomado una galleta y dado la primera mordida. Aferró su labio inferior entre sus dientes y el agarre de sus manos se hizo más fuerte. Examinaba el rostro de su humano y los gestos que emitía al masticar y saborear su obra, algo sumamente dificultoso de descifrar. Yibo no desprendía señal alguna que le dijera si las galletas eran de su gusto o estaban tan horribles que ni siquiera podía gesticular gesto alguno.

_ Yibo escupelo, no tienes que obligarte a comerlo.

Jackson le dio un codazo a Wen Han por el comentario pero este seguía pendiente de su amigo. Ignorado todo, Yibo terminó la galleta y tomó un pastelito, al cual volvió a repetir sus acciones: mordió y saboreo.

_ Están demasiado deliciosos Zhan, felicitaciones- lo halago para luego sonreírle.

Había probado cada cosa que cocino, al igual que Naying, quien lo había felicitado durante toda la tarde por su talento culinario. No obstante, creyó que sus habilidades no eran del todo buenas, era su primera vez cocinando después de todo.

Sin embargo las palabras de Yibo, de su humano, habían sido suficientes para que aquellos sentimientos negativos cambiaran un poco.

Jackson ópto por seguir la acción de su amigo y tomó una galleta para después darle un mordisco.

_ Wah~ Zhan, esto en serio esta delicioso. - levantó el pulgar para luego terminar su galleta.

_ ¿En serio?

Wen Han estaba curioso. No creía que Zhan fuera bueno, no era creíble que una persona, y menos alguien como Zhan, fuera capaz de aprender a la perfección algo al primer intento. Solo conocía a una persona con esa capacidad: Wang Yibo.

_ No mientas Naying, ¡las preparaste tú!- soltó cuando terminó de saborear la galleta.

_ Las preparo Xiao Zhan, niño mal educado.

_ Auch- se quejo Wen Han cuando Naying le dio un golpe en la cabeza.

_ Te lo mereces, dale otra Naying. - apoyo Jackson.

_ ¡Auch!- se volvió a quejar Wen Han al sentir el segundo golpe.

Todos reían y Zhan los observaba desde su lugar, del que no se había movido por un segundo, mucho más tranquilo. Sus nervios se habían esfumado y en su lugar un sentimiento cálido se instaló.

Había observado aquellas situaciones divertidas desde lejos cuando era un ave, los diferentes vínculos que mantenían los humanos; y cuando llegó Yibo a su vida lo pudo ver mucho más de cerca. Sabía del aprecio de Wen Han y Jackson para con Yibo y lo mismo de él con ellos, así como también estaba consciente de lo importante que era la presencia de Naying en la vida de Yibo.

Y ahora se encontraba siendo uno más de ellos, disfrutando de esos momentos de los que tanto quiso formar parte.

La noche pasaba entre risas y algunas anécdotas. Yibo dejó de lado los sentimientos negativos que había estado sintiendo en los últimos días, después del encuentro con su tío, y disfrutaba de la compañía de sus amigos.

Observaba a Xiao Zhan reír, sorprenderse o asustarse, estudiaba meticulosamente cada gesto que el pelinegro producía.

Luego del beso y de haberse desahogado entre sus brazos, no se había atrevido a hablar de ello; ni volver a repetirlo siquiera. Aunque se muriera de ganas por volver a besarlo.

Tenía un cúmulo de sensaciones y sentimientos encontrados. Nunca había sentido nada parecido, y experimentar todo junto y con Xiao Zhan, con el que menos lo imaginaba, hacía aún más complicado darle una respuesta a todo lo que estaba experimentando.

_ Deja que yo lo haga Naying, tu preparaste toda la cena- se ofreció Zhan a recoger el servicio para después lavarlos. Siempre lo hacía con Yibo, estaba acostumbrado ya.

Naying se negó pero cuando Yibo dijo que él lo ayudaría acepto. No obstante Zhan solo dejó que lo ayudara a mover las cosas desde el jardín hasta la cocina, pues una vez estuvo todo allí, lo echo de vuelta a reunirse con sus amigos.

Luego de terminar con todos los servicios, colocarlos en su lugar, limpiar los bordes de la mesada por los que pudo haber caído agua, se secó las manos y se dispuso a salir de nuevo a la reunión. Sin embargo el ruido de la puerta siendo abierta y cerrada al segundo, lo alertaron.

Hasta donde sabía Naying era la dueña de casa y por ende única persona con las llaves correspondientes.

Miró a su alrededor y divisó un maso, el cual tomo y sigilosamente camino hacia la entrada. Para cuando entró en la sala, un hombre alto, vestido con prendas algo grandes y pesadas para su cuerpo, se encontraba parado en medio.

_ ¿Qui-Quién eres tu?- habló con miedo Zhan mientras sostenía con sus dos manos el maso y lo colocaba a la altura de su rostro.

_ Oh, no sabi-

_ ¡No estoy solo!- lo interrumpió- ¡Allí afuera hay más gente, chicos fuertes que te pueden patear el trasero!

Escucho frases como esas en las tantas películas que veía con Yibo, al tiempo que las escuchaba las repasaba en su cabeza pues creía que en algún momento le serian útil. Ese era el momento.

_ Hey tranquilo.

El desconocido procuró calmar al pelinegro que se veía demasiado tierno en esa posición amenazante. Intentó acercarse despacio al muchacho para no asustarlo pero no funcionó. Xiao Zhan alzó el maso en cuanto se percató que aquella persona se acercaba e intentó darle un golpe pero falló cuando el otro lo esquivo, atrapándolo entre sus brazos.

Sus rostros habían quedado lo suficientemente cerca como para distinguir el color de sus ojos aún cuando era de noche y la luz de la sala no era lo bastante brillante.

_ Tranquilo. - aquel extraño, no podía ni quería dejar de mirar aquellos hermosos ojos negros.

_ ¡Suéltame!- Zhan intentaba zafarse del agarre pero sus movimientos parecían ser nada en los brazos de su oponente.

_ Primero tranquilízate.

_ Creí escucharle decir que lo soltaras.

❤️💚

Hola! Otro cap q espero les guste.

Gracias por leer

Mi persona [ Yizhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora