Capítulo 3

7.7K 654 86
                                    

Llegamos a el Caldero Choreante y fuimos a donde estaba el tabernero.

-Tom necesito que abras la puerta- ¿puerta? Como una puerta nos llevaría a el Callejon Diagon.

-Enseguida Petunia- cuando Tom dijo eso nos llevó detrás de la taberna y nos sacó, afuera solo hay una pared como se supone que vamos a entrar a él Callejon Diagon.
Iba a preguntar pero vi como Tom toco unas partes de la pared, después de eso empezaron a sobresalir unos ladrillos dejando ver una puerta, es impresionante es la primera vez que veo Magia. Esto es increíble.

-Muchas gracias Tom- mi tía parecía muy contenta, parece que no es la primera vez que esta aquí.

-Denada Petunia- Tom se marcho.

-Venga, vamos Harry tenemos muchas cosas que hacer- entramos al Callejon Diagon, habían un montón de magos.
Después de estar andando un rato llegamos a un gran edificio blanco.

-Harry estos es Gringotts, es el único banco del mundo mágico, está dirigido por duendes y es el lugar más seguro del mundo mágico- EXISTEN LOS DUENDES! Esto es increíble, todo parece un cuento.

-Debes de saber que a los duendes no les gusta que le falten el respeto, antes de dejarnos pasar nos darán una advertencia pero no tienes que preocuparte, no te pasará nada Harry.

Entramos y quede sorprendió es más grande de lo que parece por fuera, antes de seguir andando apareció un duende.

- Entra desconocido, pero ten cuidado
Con lo que le espera al pecado de la codicia,
Por qué aquellos que cogen, pero no se lo han ganado,
Deberán pagar en cambio mucho más, así que si buscas por debajo de nuestro suelo
Un tesoro que nunca fue tuyo
Ladrón te hemos advertido, ten cuidado de encontrar aquí algo más que un tesoro- Tenía razón tía Petunia, la advertencia me da miedo, pero mi tía dijo que no había que preocuparse y la creo.

Yo sigo mirando el banco, me parece demasiado fantástico, me quede tan concentrado mirando Gringotts que no me di cuenta de que mi tía estaba hablando con un duende, vi como el duende le da una carta y se va.

-Harry vamos a comprar los libros y los útiles, otro día vamos a venir aquí- salimos de Gringotts y vamos a comprar los libros en Flourish y en Blotts, según mi tía es el mejor sitio para comprar libros mágicos, después compramos los demás útiles que nos faltaban, lo que más me sorprendía es que cuando mi tía compra algo pedía que lo encojiera y se queda tan pequeño que se puede meter todo en el bolsillo, es impresionante.

-Harry entra en esa tienda es de Madame Malkin es la tienda de túnicas, yo voy a ir a comprar una cosa que falta antes de que termines ya estaré ahi- le hize caso a mi tía y entre a la tienda.

-¿Hogwarts, guapo? - me pregunto Madame Malkin a lo que yo asentí con la cabeza.

-Tengo todo el equipo, ahora otro muchacho se lo está probando- mire hacia el fondo y vi a un niño de piel pálida y pelo rubio platinado, su pelo es genial.

Madame Malkine llevo al lado del rubio y empezó a tomarme medidas.

-Hola ¿también Hogwarts? - me dijo el rubio, lo mire y vi sus ojos nunca había visto unos iguales, eran grises.

-Si.. - me sentía nervioso y con miedo no quería caerle mal y no se por que.

-Mi padre esta en la tienda de al lado y mi madre está mirando las varitas-  parece que estaba aburrido.

-Luego voy a llevarlos a mirar las escobas, fastidiare a mi padre hasta que me compré una, luego ya veré como la meto en Hogwarts- tía petunia me ha comentado sobre las escobas y el quidditch mientras estábamos llendo al Caldero Choreante.

-¿Tu tienes escoba propia? - creo que le estoy cayendo bien.

-No- estaba muy nervioso en realidad queria caerle bien al rubio.

-¿Juegas al quidditch? - me siguió preguntando el rubio.

-No pero me gustaría jugarlo- conteste con una sonrisa, parece que le estoy cayendo bien, vi como sonrió ante mi respuesta.

-Yo si, mi papá dice que sería un crimen que no me eligieran para jugar por mi casa ¿ya sabes en que casa vas a estar? - parece que le encanta el quidditch, sabía cuáles eran las casas, mi tía me lo dijo por el camino.

-No, pero se en cual quiero estar- dije sonriendo, sabían que mis padres fueron gryffindor pero yo quería ser Slytherin o Ravenclaw.

-Bueno en realidad nadie lo sabe, pero yo quiero estar en Slytherin ¿te imaginas estar en Hufflepuff? Yo me iria ¿no crees?- me pregunto el rubio.

-Bueno es mejor estar en esa casa que no estar en ninguna- también mi tía me había contado las características de todas las casas, aunque ella era una squib sabia mucho de Magia.

-Tienes razón nunca lo había visto de esa manera- pensaba que se iba a enfadar por lo que dije, después el rubio se quedó callado y en eso vi como mi tía entraba junto con una lechuza blanca, nunca pensé tener una pero en la carta ponía que había que llevar un animal, preferiblemente una lechuza, veo como me saluda ells esta feliz, nunca me pensé que mi tía me quiere y me protege.

-Por cierto ¿donde están tus padres? - me pregunto el rubio con interés.

-He venido con mi tía- y es la verdad solo no quería que se burlaria de mi por no tener padres.

-Entonces por qué no están aquí tus padres- parecía muy curioso por saberlo.

-Ellos murieron por eso estoy aquí con mi tía- no quería decírselo seguro ahora no quiere ser mi amigo.

-Oh lo siento, no debí haber preguntado- parecia que el lo sentía y no se ha burlado de mí.

-Por cierto yo soy Draco Malfoy ¿y tu?- iba a contestar pero Madame Malkin me interrumpió.

-Ya está listo lo tuyo, guapo- cuando termino de decir eso mi tía se acerco.

-Venga Harry ya nos vamos, despídete- yo asentí.

-Yo soy Harry Potter, no vemos en Hogwarts- le dije con una sonrisa, parece que Draco se sorprendió cuando le dije quien era.

Compramos la varita, volvímos a casa todavía no era de noche por lo tanto no estaba ni Vernon ni Dudley en casa, en el camino a casa me dijo que guardaría las cosas y que seguramente iremos a gringotts dentro de 1 semana.

Harry Potter y la verdad oculta {Drarry}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora